¿Adiós al campesinado? El supermercado siempre gana


Por Esther Vivas


La agricultura ha dejado de ser desde hace años una actividad económica central. Ante un modelo agrario diseñado por y para el agronegocio, cada vez más campesinos se han visto obligados a cerrar sus explotaciones y abandonar el sector. Sin embargo nuestras necesidades alimentarias siguen allí. Sin campesinado, ¿quién nos dará de comer?



La agricultura, en el Estado español, ha pasado de ser una de las principales actividades económicas a una práctica casi residual. En 1900, el 70% de la población activa trabajaba en el sector agrícola; en 1950, ésta había disminuido hasta el 50% del total; en 1980, ya únicamente representaba el 19%; y en 2013, sumaba un escuálido 4,3%. Las explotaciones agrarias, del mismo modo, desaparecen a gran velocidad. En el período de 1999 al 2009, en solamente diez años, éstas disminuyeron un 23%, según el Censo Agrario del Instituto Nacional de Estadística 2009. Pronto no quedarán campesinos en el campo.

Menos explotaciones y más grandes. La concentración empresarial es otra realidad en el mundo agrario. Entre 1999 y 2009, a pesar del cierre de fincas, las que se mantuvieron, en todas las comunidades autónomas, aumentaron su extensión. Aunque los mayores incrementos se dieron en Galicia, La Rioja y Cantabria. En la ganadería, se repitió la dinámica: el número de explotaciones de cada especie de ganado disminuyó, pero aumentó el número medio de cabezas. Castilla y León se situó al frente de la producción de bovino y ovino y Catalunya fue la primera en la producción avícola y porcina, ambas comunidades con el mayor número de ejemplares de cada una de dichas especies. Por cierto, en Catalunya existen prácticamente tantas cabezas de cerdo, como de personas.



La renta agraria en términos generales, en los últimos años, también ha retrocedido, a pesar de que en 2013, ésta aumentó un 7,7% después de varios años de mantenerse estable o en caída libre. Según datos de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), el sector agrario en la última década ha perdido un 23% de su renta. Asimismo, los costes de producción siguen incrementándose, y actualmente significan un 93% de la renta agraria en su conjunto. La subida de precios de la energía, los fertilizantes y los piensos ha contribuido de forma decisiva al aumento. Los ingresos disminuyen, los gastos no hace sino aumentar. Precios en origen y en destino

El diferencial entre el precio que se paga en origen al productor y el que nosotros pagamos en la tienda o el supermercado continúa subiendo. Si en junio del 2013, el precio del producto alimentario de origen a destino se multiplicaba de media por 3,79, un año más tarde, en junio del 2014, el importe se multiplicaba por 4,52, según el Indice de Precios en Origen y Destino de los Alimentos. Aquellos productos con un mayor incremento de su coste eran el calabacín, el repollo y la berenjena, con un diferencial porcentual entre el precio en origen y en destino de un 950%, un 808% y un 717% respectivamente. En definitiva, quién produce lo que comemos es quién menos dinero recibe.

De aquí que la COAG, la Unión de Consumidores de España (UCE) y la Confederación Española de Organizaciones de Amas de Casa, Consumidores y Usuarios (CEACCU) impulsaran una proposición no de ley sobre los márgenes comerciales de los productos agroalimentarios, que fue aprobada por el Congreso de los Diputados en 2008. La proposición instaba a una mayor transparencia en el proceso de configuración de los precios a lo largo de la cadena alimentaria, a la creación de un Observatorio de Precios para controlar y sancionar las malas prácticas en la fijación de los importes, a actuar para eliminar la especulación en los mercados agroalimentarios e implantar un sistema de doble etiquetado (precios origen/precios destino) que permita conocer el valor real de los alimentos y detectar distorsiones interesadas en los precios, entre otras medidas. Aunque del dicho al hecho...

El supermercado siempre gana

La venta a pérdidas por parte de los supermercados, vender por debajo del precio al que se paga al productor, es otra práctica habitual, aunque está prohibido por la administración mediante la Ley de Ordenación del Comercio Minorista y la Ley de la Competencia Desleal. La gran distribución, sin embargo, utiliza esta medida con el objetivo de fidelizar a sus clientes, vendiendo algunos productos, los llamados "productos relamo", a un precio muy bajo. A pesar de ingresar menos dinero con su venta, lo compensa con el incremento de la comercialización de otras mercancías.

El aceite de oliva ha sido, en los últimos años, uno de los productos agrarios más golpeados por esta práctica, ahora parece le llega el turno al arroz. Pero, no es oro todo lo que reluce. El consumidor piensa que ahorra con estos métodos, aunque una vez en el 'súper' lo que deja de pagar en un producto lo acaba pagando en otro. La gran distribución siempre gana.

Mientras, estas prácticas tienen un efecto nefasto en el campo, ya que presionan a la baja el precio que se paga en origen por dichos alimentos conduciendo a la ruina del agricultor. Sin entrar a analizar, por otro lado, el fraude que, a menudo, se da con estas prácticas, cuando nos venden, por ejemplo, aceite de oliva virgen extra a un precio extremadamente barato, y al analizar el producto resulta no tratarse del aceite de primera calidad que nos decían.

Muchos campesinos, ante estas operaciones, tiene que acabar cerrando sus fincas. Entonces, si estos desaparecen, ¿quién nos dará de comer? ¿Quiénes producirán y distribuirán la comida? Creo que la respuesta es clara: unas pocas empresas que controlan cada uno de los tramos de la cadena alimentaria. Se trata de multinacionales como Dupont, Syngenta, Monsanto, Kraft, Nestlé, Procter&Gamble, Danone, Carrefour, Alcampo, El Corte Inglés, Mercadona, por solo citar a algunas. ¿Tenemos, pues, la comida garantizada?. Ecoportal.net

Esther Vivas

Carrió les dice imbéciles, y desde Unen le dicen que se afilie al PRO




Luego de que la diputada Elisa Carrió dijera que en la alianza UNEN "hay imbecilidad", dos de los principales referentes y armadores del espacio salieron a responder los insultos.

A través de un comunicado publicado desde la página de Libres del Sur, el secretario general de la agrupación, Humberto Tumini, cuestionó: "¿A qué obedece que Carrió continúe con gestos y pronunciamiento políticos confrontativos con sus aliados? ¿No percibe que los mismos van mucho más allá de la pluralidad de opiniones que contiene nuestra alianza, para producir confusión en la ciudadanía y desgaste a nuestro frente y candidatos?".

Además, desde el espacio, cuestionaron la insistencia de la diputada para llegar a un acuerdo con el PRO de Mauricio Macri: "Carrió, nuevamente, insistió en que el PRO debe ser parte de las alianzas de UNEN. En el orden nacional y en la Ciudad de Buenos Aires, agregó. Ya en su momento había tenido un agresivo desaire hacia Pino Solanas respecto de la misma cuestión".

No es difícil ver que ese sistemático lavado de cara que la diputada le hace al PRO

"Desde que sucedió esto último -agosto pasado- en adelante, hubo pronunciamientos prácticamente de la totalidad de UNEN en desacuerdo con ella. No sólo se han expresado en contra de cualquier alianza de ese tipo Hermes Binner, Julio Cobos, Margarita Stolbizer, Ricardo Alfonsín y la enorme mayoría de la dirigencia radical, Fernando Solanas y Libres del Sur, entre muchos, sino que, además, hubo explícito pronunciamiento en ese sentido de la Mesa de UNEN de la provincia de Buenos Aires, como así también del mismo organismo de nuestro frente en la CABA", agrega el texto.

El comunicado firmado por Tumini sigue: "No es difícil ver que ese sistemático lavado de cara que la diputada le hace al PRO y a Macri, sólo contribuye a beneficiar a la derecha democrática. Que no es muy 'democrática', pero sí es derecha".

"El hecho es que UNEN no es una alianza que vaya a 'juntar el agua con el aceite'. Es un acuerdo político de fuerzas progresistas para gobernar la nación sobre esas ideas. Bueno sería que Carrió lo contemplara", concluye.

Quien también salió al cruce de las declaraciones de la chaqueña fue el ex diputado nacional y director por la oposición en la AFSCA,
Gerardo Milman, quien dijo que si Carrió "piensa que está reunida con imbéciles, no debería estarlo “.
En diálogo con Radio de la Ciudad, remarcó que “la política es una actividad voluntaria”, a lo que agregó que “juntos están los que quieren estar juntos y separados los que quieren estar separados”.

Carrió tomó el té con Michetti y quiere una UCR amarilla


Fue en un bar de Recoleta, y cuestionó a quienes se sacan fotos con Massa; la senadora macrista decidirá sus futuros pasos en diciembre

Por Lucrecia Bullrich


Después de dos semanas de vacaciones en Estados Unidos , Elisa Carrió retomó la campaña con una postal que vuelve a poner en escena el debate sobre la amplitud de las alianzas del Frente Amplio UNEN: invitó a la senadora Gabriela Michetti (Pro) a participar de un ciclo de charlas en el Instituto Hannah Arendt. En ese marco de cordialidad y complicidad, arremetió contra los radicales que se sacan fotos con Sergio Massa .

"Mi respuesta es el silencio absoluto. Voy a atenerme a lo que decida mi partido en abril del año que viene", fue su primera reacción a la pregunta por los encuentros de Gerardo Morales y José Cano con Sergio Massa. Pero no aguantó y se despachó: "Cada vez me siento más la representante de los radicales de siempre, los radicales de principios".

Fue antes de que Michetti llegara al bar Victoria, en Recoleta. "Hola, mi amor. Llegué sólo dos minutos tarde", se disculpó. Carrió la esperaba tomando café y comiendo un tostado. Ante las cámaras, defendieron la necesidad de "trabajar en común" y "más allá de las candidaturas".

Carrió volvió a hablar de las fotos de sus socios de la UCR, pero cambió de blanco. "Massa es el narco-Estado", disparó. Más cauta, Michetti planteó que el jefe del Frente Renovador "formó parte de una construcción no republicana". Conscientes del impacto de la imagen conjunta, se animaron a jugar con posibles lecturas del encuentro. "No creo que moleste", arriesgó Michetti. Carrió volvió a dedicarles una ironía a sus pares del FAU. "Es divina esta foto. Y no les molesta porque son misóginos. Creen que las mujeres sólo nos juntamos para tomar el té", azuzó.

Consultadas sobre sus planes electorales, se ajustaron al libreto que vienen ensayando desde hace meses. Carrió reiteró que no es candidata "a nada" y que "la situación del país es demasiado grave como para especular" con postulaciones. Michetti ratificó que decidirá sus próximos pasos en diciembre. "Podría ser candidata a vicepresidenta [de Mauricio Macri], pero hoy estoy mas vocacionada [SIC] por la ciudad", dij.

Ya dentro del bar, donde las escucharon unas 80 personas, Michetti planteó la importancia de "recuperar la ética y la honradez para hacer política", habló de "la transformación del cansancio en hartazgo" y describió ese pasaje como una instancia "maravillosa para reformular el actual sistema de poder".

Carrió la escuchó con atención hasta que empezaron las preguntas. Se paró, se estiró el vestido y jugó con la tensión que, por segundos, cruzó el bar. "Me retiro. Pero no me voy. Salgo a fumar. Dejo la carterita para que no haya confusiones", bromeó antes de salir a la calle.Michetti esquivó una pregunta sobre el "criterio" para distinguir a Marcelo Tinelli como personalidad de la cultura y Carrió cuestionó la "ansiedad de los que ya están en campaña", de los medios y de "los sectores devaluacionistas", entre los que ubicó a Massa. Fiel a su estilo, cerró con una advertencia: "No caigamos en las provocaciones del Gobierno, que quiere el autogolpe"

Urtubey: malas encuestas, y frustrado acuerdo con Massa


 

El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey , ratificó hoy que quiere participar de las elecciones primarias (PASO) el año próximo, aclaró que no tiene intenciones de ser vicepresidente de una potencial candidatura de Sergio Massa. Luego que se filtraran informaciones que daban cuenta de reuniones entre su hermano y el Senador massista Jorge D'onofrio, reveladas por este mismo.

Urtubey encargó en cuestas de medición a una consultora de primer nivel nacional, y los resultados fueron muy malos. Bajísima visibilidad,  alto nivel de desconocimiento, y dentro del voto más ligado a la base de sustentación del kirchnerismo, el Gobernador salteño es percibido como conservador, y más ligado ideologicamente al sector de Sergio Massa o Mauricio Macri que al peronismo tradicional.

Urtubey estaría utilizando su candidatura presidencial como una herramienta de marketing político, para fortalecer su candidatura a la gobernación.