Macri y el integrismo católico

Por Julián Maradeo

A simple vista, la Fundación Nuevas Generaciones (FNG) es una de las tantas usinas de pensamiento del PRO. En ella, se funden el duhaldismo residual y los macristas de la primera hora. Sin embargo, su verdadera importancia recién se llega a comprender cuando se identifica la relación de complementariedad que existe entre la FNG y la Fundación Civilidad, una institución que aloja a varios ultraconservadores católicos que formaron parte de Verbo, órgano de difusión de la Ciudad Católica (CC), un grupo integrista fundado en 1959. Ya entonces exponían sus objetivos: lograr “una difusión capilar de las ideas” por medio de personas que estén situadas en lugares clave del Estado.
Los continuadores de la CC estuvieron entre quienes crearon en 2010 la FNG que en sus comienzos tuvo al ex presidente Eduardo Duhalde como principal impulsor. Pero el ocaso político el ex gobernador bonaerense contribuyó a que paulatinamente la fundación se fuera alineando al servicio del jefe de Gobierno porteño.

La primera plana de FNG está compuesta por Julián Obiglio, ex diputado nacional del PRO y actual presidente de la fundación; Diego Guelar, secretario de Relaciones Internacionales del PRO, y los diputados nacionales macristas Federico Pinedo, Jorge Srodek y Pablo Tonelli. Emergen también otros nombres históricamente vinculados con el duhaldismo y el menemismo. Entre ellos Alfredo Atanasof, jefe de Gabinete durante la presidencia de Duhalde; y Carlos Brown, diputado nacional por FE y lugarteniente de Duhalde en el territorio bonaerense. A los anteriores se suman Armando Caro Figueroa, ministro de Trabajo de Carlos Menem; Ramón Puerta, ex gobernador de Misiones y presidente por dos días en 2001; Enrique Thomas, ex diputado nacional duhaldista; y Luis Lusquiños, jefe de Gabinete durante el lapso que gobernó Adolfo Rodríguez Saá. Mención aparte para Gustavo Ferrari, ex integrante de Verbo, ex diputado denarvaísta y actual asesor general de la gobernación de Buenos Aires. No casualmente la provincia acaba de firmar con la Universidad Católica Argentina (UCA) un convenio para “el fortalecimiento de los aspectos jurídicos”.

En los “cocteles” que organiza FNG se suele ver a Guillermo Borda, hijo homónimo del ministro del Interior del general Juan Carlos Onganía; al presidente del Banco Ciudad, Rogelio Frigerio; y al rector de la Universidad Austral, Diego Blasco Funes. En 2011 Obiglio reemplazó en la Cámara Diputados a Esteban Bullrich para que éste asumiera como ministro de Educación porteño. Vale recordar que Bullrich se hizo cargo de la cartera educativa cuando no pudo concretarse la llegada a ese cargo de Abel Posse, otro profesor de la FNG. Obiglio, Pinedo y Guelar forman parte del think thank oficial del macrismo: la Fundación Pensar.

La revancha de los integristas

FNG no es más que una sola cara de la moneda. En la otra se encuentra la Fundación Civilidad. Ambas se complementan. Mientras Civilidad traba relaciones con municipios y provincias, FNG lo hace con organizaciones internacionales –como Interamerican Institute for Democracy, dirigida, desde Miami, por Guillermo Lousteau Heguy, padre del ex ministro de Economía– y apunta a la formación de “equipos de profesionales que serán esenciales para los gobernantes de los próximos años”.
Civilidad nació como una publicación que en 1981 ya era promocionada desde Verbo. En sus comienzos la revista pertenecía al Instituto Alberto De Nápoli, nombre adoptado en reconocimiento al interventor de Pergamino entre 1967 y 1973. De Nápoli sostenía lo que hoy se dice desde Civilidad: “La descentralización del poder estatal a favor de la comunidad organizada a través de los cuerpos intermedios, coinciden con el verdadero progreso político, salvaguardando la más auténtica representatividad democrática”.
Abrevando en el legado de la Ciudad Católica, Civilidad disemina la doctrina comunitarista, que imperó durante la primera etapa del régimen militar de la Revolución Argentina, encabezado por el general Juan Carlos Onganía.
La Ciudad Católica, fundada en el país a fines de la década del 50, alcanzó la cima en 1966, cuando Roberto Mateo Gorostiaga, ex presidente del Rotary Club y director de Verbo, quedó al frente de la Secretaría de Estado de Promoción y Asistencia de la Comunidad (Sepac). Desde la Sepac se procuró implementar el comunitarismo, publicitado como la tercera posición entre el “desorden liberal” y el “colectivismo estatista”. Para Primera Plana (agosto de 1968), no era otra cosa que “corporativismo fascista”.
Esta doctrina ve en el principio de subsidiariedad la posibilidad de instituir cuerpos intermedios para que el Estado no intervenga y, de esta manera, se puedan crear las condiciones para la aparición de una “representatividad natural, orgánica, desprovista de facciosos ideologismos y motivada exclusivamente en la vocación de servicios a la comunidad”. Tal definición pertenece al abogado devenido pintor y reemplazante de Gorostiaga en Verbo, Adalberto Zelmar. En octubre de 1972, la tapa de esta revista proclamaba: “El Municipio. Base de una Restauración Nacional”.

Uno de los alfiles de Civilidad es el profesor de la Universidad del Museo Social Argentino y la UCA, el médico Ignacio Garda Ortiz, quien fuera el último director de la revista Verbo en la década del 90. La periodista francesa Marie Monique Robin, en Los Escuadrones de la Muerte, señala que en Tucumán 1561, de la ciudad de Buenos Aires, no sólo está domiciliado el médico Ignacio Garda Ortiz –ex director de Verbo– sino que allí funciona Civilidad, y es uno de los últimos sitios donde vivió el sacerdote francés Jorge Grasset quien, apadrinado por el obispo Adolfo Servando Tortolo desde sus años como obispo de Paraná, fue una pieza clave a la hora de insuflar en la cúpula castrense la justificación espiritual de la tortura, tal como lo había hecho durante la guerra de Argelia. (Ver, El soldado de Cristo, Página/12, 17/11/13)

Garda Ortiz, quien acompaña a sol y sombra al abogado Pablo María Garat, presidente de Civilidad, integrante de FNG y a cargo de uno de sus cursos para jóvenes, participa habitualmente en mesas de debate que organizan Coninagro y la Sociedad Rural. Junto a otros, ambos encabezaron el Seminario Régimen Municipal y Desarrollo Local, brindado en Salta el 16 de octubre de 2012 con la participación estelar del gobernador Juan Manuel Urtubey. El encuentro se realizó con el apoyo de la Fundación Hanns Seidel, llamada así en honor al creador de la Unión Social Cristiana de Baviera.
Este tipo de cursos fue dado también a nivel local, en Paraná (Entre Ríos), San Martín de los Andes y Cutral-Có (Neuquén), Río Grande (Ushuaia), Córdoba Capital, Marcos Juárez y Río Cuarto (Córdoba), Ciudad de San Juan (San Juan), Trelew y Comodoro Rivadavia (Chubut), San José de Metán (Salta) y Río Turbio (Santa Cruz). El mismo grupo colaboró en la preparación de las convenciones constituyentes de los gobiernos provinciales de Chaco, Tierra del Fuego, Córdoba y San Juan. Garat fue uno de los expositores del Primer Congreso Internacional de Abogacía Estatal, Local y Federal, organizado por la Procuración General porteña en junio de 2013.

Asimismo, Civilidad comparte ponentes con la Fraternidad Sacerdotal San Pío X, organización lefebvrista que tiene sede en La Reja (Moreno). Uno de sus integrantes es el ex subsecretario de Culto del gobierno de Menem, Luis Roldán. Junto a Javier Varani, este ex colaborador menemista tiene a su cargo aportar su conocimiento sobre Participación ciudadana y sistemas electorales.

Ambas fundaciones, Nuevas Generaciones y Civilidad, trabajan silenciosa y mancomunadamente para cumplir con uno de los principales preceptos de la Ciudad Católica: tener a “nuestros hombres en todas partes, en todas las capas sociales, en todas las posiciones que permitan conocer los resortes del mecanismo del Estado”.

FAUNEN: como la Alianza, pero no tanto


Comparten protagonistas y partidos. Sin embargo, el nuevo frente tiene un caudal electoral, un despliegue territorial y un control ejecutivo menor al que tenía la Alianza en el ’97.

Por Sebastian Abrevaya
 
En las últimas semanas, tanto sectores del oficialismo como de la oposición se encargaron de trazar las similitudes entre el recientemente lanzado Frente Amplio Unen (FAU) y la experiencia de la Alianza, encabezada por Fernando de la Rúa y Carlos “Chacho” Alvarez. Varios de sus dirigentes y de sus partidos, como la UCR y el socialismo, integran ahora el nuevo frente, que nace con el objetivo de derrotar al peronismo, igual que en los ‘90. Sin embargo, existen otros puntos que permiten poner en cuestión ese paralelismo y, en buena medida, las posibilidades de un triunfo electoral en 2015. En un artículo publicado en su blog, el politólogo Andy Tow advierte que tomando como base la experiencia de las elecciones legislativas de 1997, previas a las presidenciales de 1999, el escenario es bastante diferente del que se plantea de cara a las próximas presidenciales. “En caudal electoral, control ejecutivo y despliegue territorial, el FAU está bastante lejos de ser la Alianza”, concluye Tow.
Ya sea por la intencionalidad política de quienes buscan asociar a la nueva alianza con el fracaso de la vieja Alianza, así como por las similitudes concretas entre ambas experiencias, desde el Frente Amplio Unen se vieron obligados a salir a desmarcarse de aquel fantasma. El propio Fernando de la Rúa y también Graciela Fernández Meijide aseguraron que el nuevo armado “no es lo mismo que la Alianza”, por lo que pronosticaron un futuro promisorio para el proyecto político. También es cierto que tanto el Frente para la Victoria, así como el PRO tienen entre sus filas a ex funcionarios e integrantes de aquella frustrada experiencia política.
Para Ernesto Calvo, politólogo y profesor de la Universidad de Maryland, la comparación entre ambos espacios se produce, por un lado, porque se repite la necesidad de combinar el desarrollo territorial de partidos como la UCR con una experiencia competitiva en áreas metropolitanas, como el Frepaso. Y por el otro, porque se genera a partir de la convicción de que un partido solo no puede derrotar al peronismo, ya sea en su versión oficialista (Frente para la Victoria) u opositora (Frente Renovador). Pero una vez que se saca del medio el clivaje federal y la necesidad de vencer al PJ, aparecen las diferencias, que no son menores.
En su blog www.andytow.com, Tow advierte que en cuanto al desempeño electoral, las fuerzas que componen el FAU obtuvieron en 2013 una victoria en sólo 6 de los 24 distritos, mientras que la Alianza en el ’97 había triunfado en 11. Y a nivel nacional, podría computarse casi un 25 por ciento de los votos para el FAU en octubre, contra el 47 por ciento de la Alianza en el ’97; el resultado en la última elección fue más flojo que el del acuerdo radical-frepasista. En aquellos años, la UCR controlaba ejecutivos de peso como Córdoba y la Ciudad de Buenos Aires, junto a otros menos potentes como Río Negro, Chaco, Catamarca y Chubut. Hoy, el FAU gobierna las provincias de Corrientes y Santa Fe. “Los desafíos que enfrenta el FAU para alcanzar la presidencia de la Nación son formidables. El principal apoyo electoral de la Alianza fueron las gobernaciones, y el FAU sólo cuenta con dos y en el nivel municipal el radicalismo ha mostrado una lógica de la supervivencia política mucho más prosaica, como la de varios de sus intendentes sumados al Frente Renovador bonaerense”, detalla Tow. Otra diferencia se encuentra en la distribución del voto. Mientras la Alianza acumulaba sus mejores desempeños relativos en los distritos más grandes como Buenos Aires, Capital Federal y Córdoba, el FAU obtuvo su mayor cantidad de votos en los distritos más pequeños. Como dato saliente, Tow destaca que en tierra bonaerense el FAU obtuvo el 12 por ciento en comparación con el 48 que obtuviera la Alianza en ’97.
Según Calvo, también se debe tener en cuenta que la Alianza combinó sólo dos fuerzas nacionales, mientras que el FAU es un armado de 8 partidos políticos, entre nacionales y de distrito.
Por último, el Frente Amplio Unen no contiene una pata peronista de centroizquierda como podía calificarse al Frepaso, ni tampoco, al menos por el momento, una opción como el PRO de Mauricio Macri, análogo a Acción por la República, de Domingo Cavallo, que terminó formando parte del gabinete aliancista. Retomando la hipótesis del politólogo Juan Carlos Torre en el texto Los huérfanos de la política de partidos, el rol de las opciones electorales de centroizquierda o de centroderecha es clave en la suerte del espacio no peronista.

Cambio en las PASO

Quienes buscan un frente quisieran poder votar candidato a presidente y que el ganador elija al segundo en la fórmula. Los que tienen candidato único, indiferentes.


Por Raúl Kollmann

La modificación de la ley de las PASO –originalmente redactada por Cristina Fernández de Kirchner cuando era legisladora– por ahora no está en los planes del Frente para la Victoria. Fuentes calificadas tanto del Poder Ejecutivo como del Legislativo dijeron  que no se está trabajando en algún proyecto de ese tipo y que tampoco hay intenciones de avanzar en ese sentido. Para algunas de las fuerzas opositoras, la modificación de la ley de las PASO es vista con esperanza. Por ejemplo, si Hermes Binner y Julio Cobos disputan la interna de FAUnen, la ley hoy no permite que después armen una fórmula conjunta. La idea de quienes quieren reformar las PASO es que se elija sólo el candidato a presidente y que éste quede en libertad para seleccionar a su vice.
En las fuerzas políticas más heterogéneas había cierta expectativa. Y lo mismo ocurría con quienes auspician una alianza entre FAUnen y el PRO. La hipótesis es que el ganador de las PASO de esas fuerzas podría convocar como vice a uno de los candidatos que salieron segundos o a un candidato que hubiera ganado en la interna de otra fuerza. Por ejemplo, con esa alquimia se podían armar fórmulas del estilo de Binner-Cobos o Cobos-Binner o Macri-Cobos. Incluso se mencionaba que una alternativa de ese estilo podía ser usada por el FpV, mezclando candidatos que compitieran en las PASO: Scioli con Urribarri o con Randazzo o con Capitanich. Y también era una posibilidad para las distintas fuerzas de izquierda a las que no les resulta sencillo converger en una sola candidatura. Lo cierto es que ni en el Ejecutivo ni en el bloque del FpV se está trabajando en una reforma de esa naturaleza, y es sabido que el oficialismo tiene los votos imprescindibles para que un proyecto así pase por el Congreso.

“Desde ya que le conviene a FA Unen –analiza Roberto Bacman–. En la actualidad se vota por fórmula: los candidatos a presidente y vice más votados son los elegidos. El planteo es que se opte sólo por el presidente y de este modo el ganador tendría la posibilidad de consensuar el vice entre las otras fuerzas que participaron. ¿A quién le conviene? Es evidente que a FA Unen. Es una manera de evitar la dispersión del voto tras la primaria dándoles lugar a los que perdieron y especialmente a los ciudadanos que votaron por otro candidato.”
Rouvier está de acuerdo con esa mirada. “Esta reforma les posibilita participar en los frentes electorales a los que pierdan en las PASO habilitándolos para que compitan en otras instancias o que una figura de su espacio complete la fórmula presidencial para la elección general. Es indudable que la modificación apunta a ofertas heterogéneas que necesitan ampliar su representación, evitando futuros conflictos internos. Es una reforma que apunta a la amplitud y a la combinación de fuerzas. En este sentido es lógico que le interese especialmente a la coalición FA Unen.”
La perspectiva de cambiar la ley tampoco parece viable porque al Frente Renovador no le conviene, ya que tiene un único candidato, Massa, y por lo tanto no necesitará combinar fórmulas. Y no le interesa al PRO, que tiene como postulante único a Macri. Sin embargo, hay quienes no salen a la palestra pública y piensan que el oficialismo debe favorecer una alianza FA-Unen-PRO, lo que llevaría a que haya dos grandes fuerzas opositoras –FA-Unen-PRO y el Frente Renovador– que se dividirían los votos, mejorando las chances del FpV. Y para favorecer esa alianza entre Macri y Unen, tal vez no sería un mal camino la reforma de la ley. Por eso, no falta quien dice que habrá que esperar y ver, aunque hasta el viernes pasado no había ningún tipo de movimiento para tocar la norma que rige las PASO.

2015 fortalezas y debilidades de las marcas políticas

La carrera que ya arrancó

Falta mucho, pero la competencia empezó, con todas las preguntas que eso implica. Las opciones para la sucesión en el kirchnerismo, los escenarios posibles de la oposición, las fortalezas  y debilidades de cada uno.

Punto de partida

Artemio López elige concentrarse en el sistema de partidos a la hora de encarar su visión del escenario. “La hegemonía electoral del oficialismo es un dato central para evaluar las condiciones iniciales de la carrera electoral –asegura–. El FpV posee un piso de 35 por ciento al que ninguna fuerza opositora logra hoy superar y ni siquiera acercarse a menos de diez puntos. La fortaleza del candidato del FpV es la gestión iniciada en mayo de 2003 que permitió el mayor ciclo de crecimiento económico con generación de empleo y descenso de pobreza, marcando un notable record en la historia nacional. El punto débil es la polarización que induce el kirchnerismo, lo que ofrece restricciones en caso de acceder a la segunda vuelta.”
Para Manuel Mora y Araujo, la largada “tiene una tabla de posiciones en la que casi todas las encuestas coinciden: puntos más, puntos menos, Massa, Scioli, Macri, Binner, Cobos, Altamira”.
Enrique Zuleta Puceiro, en cambio, plantea sus dudas. “La ventaja actual de Massa sobre Scioli es relativa. En los monitoreos nacionales que hacemos los principales encuestadores –basados casi todos en muestras nacionales de 1000 o 2000 casos–, Massa se beneficia por el hecho de que la proporción de encuestados en la provincia de Buenos Aires alcanza a la mitad de los casos. La incidencia muestral de Massa en el territorio bonaerense le otorga una ventaja de cinco o siete puntos. En encuestas más amplias y elaboradas, referidas a todos los distritos, como las que hacemos para estrategias más exigentes, la ventaja es para Scioli, mejor conocido y con mejor distribución de sus apoyos en todo el electorado nacional.”

Por último, Analía Del Franco afirma que todavía no hay ventajas decisivas. “La foto de la carrera electoral muestra por lo menos diez candidatos de los cuales seis cuentan con más del 85 por ciento de conocimiento entre el público. Sin embargo son sólo dos, Scioli y Macri, los que presentan mayor nivel de ‘familiaridad’ con el electorado a nivel nacional. Massa y Binner presentan este rasgo, pero focalizado en sus provincias de origen, y en las grandes ciudades. Así las cosas, ¿cómo se presenta el electorado? Expectante, y con cierta atención sobre 2015. Como consecuencia ninguno de los candidatos presidenciales presenta una diferencia significativamente mayor que el resto. Siendo los mejores posicionados Scioli y Massa, y con más distancia, Macri”.

Ballottage

Eduardo Fidanza piensa que no habrá definición en la primera vuelta electoral, es decir que nadie sacará la suficiente distancia. “La campaña comienza con tres candidaturas definidas, las de Massa, Scioli y Macri, y la conformación reciente de una coalición –Unen– cuyo candidato depende de una interna que genera hoy interrogantes, porque podría formar parte de ella Macri, lo que constituiría una novedad significativa en los modos de construcción política en la Argentina, ya que implicaría el intento de convergencia entre la centroizquierda y la centroderecha. Por otra parte, es claro que la elección de 2015 se definirá en una segunda vuelta.” Existen elementos que para otros analistas obligan a poner condicionales a semejante afirmación. En primer lugar la experiencia histórica del último período democrático, que muestra triunfos en primera vuelta en casi todas las elecciones presidenciales. En segundo término, todo apunta a que las PASO jugarán esta vez un rol preponderante, lo que puede también hacerlas funcionar como una primera vuelta real que ordena el voto para la real.

Una elección distinta

Roberto Bacman sostiene que la de 2015 es una elección peculiar, en esencia porque no hay un Kirchner como candidato presidencial. “La carrera electoral se lanzó muy temprano. Basta decir que faltan aún quince meses para las PASO y de allí tres meses más para las elecciones generales. Pero se justifica: el oficialismo por primera vez en once años no tiene un candidato definido (o sobreentendido), y los dirigentes de los partidos opositores son conscientes de que deben poner inteligencia y esfuerzo para evitar que se repitan las condiciones que les dieron formato y estructura a los escenarios electorales de 2007 y 2011: una oposición dispersa, heterogénea y sin un claro y definido proyecto de gobernabilidad alternativo al oficialismo. Los resultados de aquellos comicios, en especial la gran diferencia entre el Frente para la Victoria y los restantes partidos, es un desafío que hoy han decidido asumir, desde distintas tácticas y estrategias, con el principal propósito de evitar a toda costa que se repita la estructura de voto de 2007 y 2011 en las próximas presidenciales.”

Razones del votante

Ricardo Rouvier cree que un punto decisivo estará en las cuestiones de fondo: “Es una campaña que será sobre continuidad o diferenciación. En estos momentos ya hay instalaciones de precampaña que van en ese sentido. Dentro del oficialismo, la gama mostrará candidatos que se presentarán como más genuinamente continuadores y otros que expresen algo de distanciamiento. Las fuerzas de oposición se plantarán fuertemente de modo adversativo, anunciando el desmonte de la mayoría de los caminos emprendidos hasta ahora. Pero habrá alguno que será más prudente. Hay dos aspirantes que picaron en punta, pero falta mucho y la carrera no está definida”, redondea Rouvier.

Pero Zuleta pone el acento en las diferencias entre esas dos elecciones. “No olvidemos que en 2015 se vota poder y no oposición. La inmensa mayoría de los ciudadanos votará a quien juzgue más capaz de gobernar y no a quien juzgue más capaz de oponerse o vetar al Gobierno. Por el momento, la candidatura más sólida es la de Daniel Scioli. Con más de veinte años de protagonismo en los primeros planos, es la figura más conocida, con menores rechazos y con atributos personales y funcionales casi ideales para una política de concertación nacional como la que deberá representar y conducir el próximo presidente. Scioli cuenta además con la adhesión, explícita o no, de la casi totalidad de los gobernadores. Sergio Massa es el candidato hoy por hoy con mayores posibilidades de disputarle la presidencia a Daniel Scioli.”

Candidatos y proyectos

Para muchos, los comicios –en especial, los presidenciales– se definen por las características de los candidatos. El ciudadano va a poner en manos de una persona –el futuro presidente– buena parte del destino del país y el votante también cree que le da responsabilidades a ese candidato que influyen en su vida personal.
“Massa es lo nuevo –señala Mora y Araujo–; Scioli es lo conocido y confiable, cercano a la gente; Macri es la gestión; Binner es gestión con sensibilidad social; Cobos es el que se jugó una vez y eso no se olvida; Altamira es el ideológico en carrera y, además, honesto. Así arrancan.”
“Respecto de las fortalezas y debilidades –señala Fidanza–, observo que Massa cuenta con mayor apoyo en la opinión pública, pero debe mantener la delantera en la agenda, lo que no es fácil; Scioli, por su parte, mantiene buena imagen e intención de voto pero su suerte está atada a que CFK termine relativamente bien su gobierno. Macri posee buen desempeño nacional y un fuerte reconocimiento por su gestión en la ciudad, pero carece aún de estructura territorial suficiente para apoyar una candidatura presidencial.”
“Del lado del kirchnerismo –analiza Ignacio Ramírez–, hay una propuesta política más densa: intervención del Estado, inclusión social, épica reparadora. Eso le asegura competitividad. No obstante, tiene distintos desafíos por delante: revertir las inquietudes económicas, relanzar el sentido hacia el futuro del proceso político en curso y transitar un proceso de internas donde el ganador pueda encolumnar detrás de sí a todos los matices del oficialismo. En el universo opositor creo que persiste una mala interpretación de los resultados legislativos del año pasado en función de lo cual se articulan discursos similares para interpelar o pedir un voto presidencial, cuya anatomía motivacional es muy distinta a la del voto de medio término. El voto presidencial está más anclado en factores de mediano y largo plazo y no es un subproducto del humor circunstancial. En entornos globales de incertidumbre, la oposición aún no consigue superar la etapa de emisión de mensajes demasiado pegados a las encuestas o agendas mediáticas epidérmicas.”
Bacman lo redondea de esta manera: “El oficialista Frente para la Victoria tiene la ventaja comparativa del proyecto de gobernabilidad. Viene gestionando desde 2003, lo realizado es su bien más preciado para mostrar. El desafío: encontrar el mejor candidato para asegurar esa ventaja inicial y desde allí potenciarla. El resto, tiene el mismo desafío de los últimos años: demostrar que son capaces de construir un proyecto concreto y contundente de gobernabilidad para la Argentina”.
En la línea de largada –y más teniendo en cuenta lo que falta–, las alternativas están abiertas. En el oficialismo piensan que el ciudadano común no querrá perder las conquistas de estos años y que el votante es poco proclive a arriesgar en una elección presidencial. En la oposición creen que la elección va a tener un signo de cambio y que eso pone la pelota en su cancha.
Es cierto que la carrera es larga, pero también es cierto que todos ya empezaron a correr.

Cómo sobrevivió el Partido Comunista de EE.UU.

Si bien sufrió un golpe demoledor con el colapso de la Unión Soviética en 1991, un pequeño grupo de miembros acérrimos perseveró

 

Earl Browder lídero el Partido Comunista de EE.UU. entre 1934 y 1945
Como la mayoría de estos movimientos alrededor del mundo, e l Partido Comunista de Estados Unidos sufrió un golpe demoledor con el colapso de la Unión Soviética en 1991. Pero un pequeño grupo de miembros acérrimos perseveró.
No muy lejos de Wall Street, en el séptimo piso de un elegante edificio de ocho plantas en la calle 23, en el oeste de Nueva York, funciona la sede de un improbable sobreviviente político: el Partido Comunista USA (CPUSA).
La oficina es iluminada y moderna. En un muro hay fotografías en blanco y negro de las mayores figuras de la historia del partido. Las obras de Marx, Engels y Lenin están apiladas en las estanterías.
El edificio fue comprado para alojar al partido en la década de 1970, antes de que Chelsea - el barrio en el que se encuentra- se volviera un sitio de moda.
"Hicimos un buen negocio con esto", dice Roberta Wood, la tesorera.
En una concesión a la realidad capitalista, todos menos dos pisos están alquilados. Los ingresos financian la publicación People´s World, un sitio web que es descendiente directo del difunto periódico del partido, The Daily Worker.
El partido dice tener entre 2.000 y 3.000 miembros a nivel nacional, de los cuales solo dos personas son parte de la nómina asalariada, el presidente Sam Webb y su vicepresidente Jarvis Tyner, quien fue candidato a la presidencia en 1970.
Su objetivo final, sin embargo, está arrasando su ambición. "El Socialismo marcará una nueva era en este país", dice el programa del partido. "La gran riqueza de Estados Unidos será por primera vez para el beneficio de toda la gente".
"La meta a largo plazo", dice Webb, es "llegar a la sociedad comunista, el fin de todas la divisiones de clases, una sociedad igualitaria, la extinción del Estado".
El Partido Comunista tuvo alguna vez una fuerte presencia en la política estadounidense. En su apogeo durante 1930 y 1940 tenía una red sólida a lo largo del país, anotándose varios éxitos electorales. Tres congresistas demócratas eran secretamente miembros del partido.
Nunca superaron los 100.000 miembros pero su influencia fue amplia. "Sin duda tuvo un impacto en la vida estadounidense", dice Harvey Klehr, profesor de Ciencias Políticas de la Universidad Emory de Atlanta.

Persecusión

Líderes del Partido Comunista posan antes del juicio en el que fueron acusados y condenados por conspiración, en 1949.. Foto: AFP 
El inicio de la Guerra Fría trajo la persecución de los comunistas estadounidenses y sus aliados, el más famoso en manos del Comité de Actividades de la Casa Antiestadounidense, y luego, de parte del senador republicano Joe McCarthy.
Ese período fue "devastador" para el partido, a pesar de que "la represión contra de ellos era tan fuerte y de tanto poder, que les generó un inmenso espíritu de compañerismo", dice Vernon Pederson, profesor de historia en la Universidad de Gran Falls, en Montana.
"También pareció significar para ellos que todas las cosas que dijeron que iban pasar estaban sucediendo. La revolución estaba llegando y ocurrió la primera ola de represión, como lo habíamos previsto desde el principio".
Durante la Guerra Fría el Partido Comunista tenía una estructura subterránea paralela y un pequeño número de personas que espiaban para Moscú.
Hasta la década de 1980 el partido recibía cantidades importantes de financiación soviética, dice Klehr, dinero del que el FBI sabía y tenía rastreado.
Muchos miembros abandonaron el partido tras la represión soviética en Hungría en 1956 y en Checoslovaquia en 1968, mientras el partido mantuvo su línea ortodoxa prosoviética.
La ruptura final vino cuando Gus Hall, líder entre 1959 y 2000, apoyó el golpe de Estado de la vertiente más radical de la Unión Soviética contra Mijail Gorvachov en 1991.
Pederson asegura estar "ligeramente sorprendido" de que el partido haya logrado sobrevivir a la caída de la Unión Soviética, pero le da crédito a un grupo de miembros "que simplemente se negaron a renunciar sin importar qué tan sombrías estaban las cosas".
"Ellos tienen una convicción extremadamente fuerte y han invertido una cantidad increíble de sus identidades personales en el Partido Comunista", dice.
Webb, el líder actual del partido, es un hombre de 68 años un poco encorvado, con una voz áspera pero amable. Parece más cómodo hablando del clima político actual que de ideología.
La tarea inmediata, dice, es derrotar a la "extrema derecha" de EE.UU., contribuyendo en la amplia coalición de grupos de izquierda que promueven la lucha contra la desigualdad económica y los derechos de las minorías.

Nuevos tiempos

El senador republicano Joseph McCarthy fue uno de los grandes abanderados de la lucha contra el comunismo en EE.UU... Foto: AP 
El partido se enfrenta a un desafío demográfico: un exjefe de la división de Nueva York recuerda haber asistido a más de 100 funerales de militantes en el año 2000. Pero también asegura que hubo un pequeño incremento de afiliación y pago de las cuotas en el último tiempo, lo cual atribuye a un aumento de interés generado por la crisis financiera de 2008, y paradójicamente, a los ataques de la derecha contra los "socialistas" demócratas que se interesaron en algunos de la izquierda.
Webb señala otros eventos recientes, incluyendo al movimiento Occupy -conocido también como el movimiento de los Indignados-, la elección del socialista Kshama Sawant en el consejo de Seattle, y el triunfo de Bill de Blasio en la alcaldía de Nueva York.
También hace notar que hasta los Republicanos están hablando de pobreza. "El clima en el país está cambiando, la gente está pensando en la desigualdad económica".
Una sociedad socialista es la meta del "futuro imaginable", dice Webb, pero el comunismo está "probablemente mucho más distante".
"Si hacemos coaliciones sobre la base de la gente que está de acuerdo con nuestra visión del socialismo, seríamos sufientes para caber dentro de una una pequeña pero cabina telefónica", bromea.
Los críticos que han seguido el curso del partido, sin embargo, los desestiman.
"Las posiciones que adoptan son realmente indistinguibles de los grupos de izquierda de la socialdemocracia", dice Ron Radosh, historiador y escritor, quien abandonó el partido después de la represión de la sublevación húngara en 1956.
"Ni siquiera sé por qué alguien pertenece a la izquierda". Klehr se refiere al partido como "una secta, casi un culto", y dice que dejó de prestarle atención hace cerca de 10 años porque se volvió "esencialmente irrelevante".
Tony Pecinovsky, un organizador del partido en los distritos de Kansas, Missouri y Tennessee, dice que los desvanecidos recuerdos de la Guerra Fría y el pragmático activismo de las bases del CPUSA han disminuido el estigma sobre el comunismo, pero los prejuicios siguen arraigados.
"Me han llamado terrorista, he recibido amenazas telefónicas, ha aparecido gente en mi casa que no es bienvenida", dice.
"El anticomunismo y todo eso es todavía muy real en los términos de la lejana extrema derecha en nuestro país y los fundamentos del Tea Party".
"Tratamos de que nuestro trabajo hable por nosotros mismos, y quitarle el peso a aquella palabra empezada con "C"".
Webb dice que él no reacciona adversamente cuando la gente le dice que es un comunista. Alguna gente joven, tal vez con apenas un poco de comprensión de lo que la palabra significa, piensa incluso que es muy cool. Pero da a entender que el partido podría por fin ofrecer algo de bagaje histórico ya que construye alianzas con otros grupos de izquierda estadounidenses.
De cara a la convención del partido en junio, Webb dice que quiere crear una atmósfera en la cual los "camaradas" se sienten libres de expresar sus preocupaciones, incluyendo el nombre del partido.
"Algunos sienten que deberíamos considerar cambiarlo". Otros sienten fuertemente que no deberíamos. Así que acordamos que permitiremos el espacio para que esa conversación tenga lugar"..

Solanas, Artaza, Juez, Giustiniani y Donda entre otros, le dicen no a una alianza con Macri

Un grupo de 14 diputados firmaron un duro comunicado que destaca que la coalición tiene "un claro perfil progresista y de centroizquierda" y advierte que un acuerdo con el PRO generaría "contradicciones insalvables"

 
La posición más extrema la tiene Elisa Carrió: dijo que "no cree en ideologías" y quiere que Mauricio Macri compita en las elecciones primarias junto a los candidatos del Frente Amplio UNEN. Otros, como Ernesto Sanz o Julio Cobos plantearon un acuerdo con el PRO de cara a una eventual segunda vuelta en las elecciones de 2015. Y aunque en el entorno del jefe de Gobierno porteño le han puesto paños fríos a esa posibilidad, buena parte de lo que podría definirse como "el ala izquierda" de la flamante alianza entre socialistas, radicales y otros partidos firmó un comunicado conjunto en el que usó términos muy duros para cerrarle el paso a la iniciativa.
La nota lleva la firma de 14 dirigentes, entre ellos, los senadores Fernando "Pino" Solanas, Luis Juez, Rubén Giustiniani y Nito Artaza, y la diputada Victoria Donda. Luego de subrayar que el acta constitutiva de FAUnen tiene "un claro perfil progresista y de centroizquierda", sentenciaron: "Consideramos que una actitud consecuente conlleva contradicciones insalvables con el acervo ideológico y la experiencia de gobierno del sector político liderado por el ingeniero Mauricio Macri".
"Emparentar el Frente Amplio UNEN con el PRO alimentaría un circuito de superficialidad donde supuestamente todo da lo mismo. Esta lógica es uno de los peores rasgos culturales que se arrastran desde hace tiempo y ha sido agravado manifiestamente durante la década kirchnerista", advierten los firmantes.
También cuestionaron las "metas y formas" de la gestión del PRO en la Ciudad. "Distan mucho de las políticas públicas que UNEN propone para el distrito. Por ello, la confrontación electoral que el año pasado nos enfrentara con el PRO no se basó en una mera disputa de cargos sino que expresaba las profundas diferencias existentes desde el punto de vista programático, político e ideológico", analizaron. Y recordaron que Macri "nunca se manifestó sobre las desastrosas consecuencias de las políticas del menemismo".
No obstante, los dirigentes reconocieron "la necesidad de mantener un diálogo institucional con todas las fuerzas políticas, en cuanto hace al normal desenvolvimiento de la vida democrática y republicana", sobre todo en lo que hace a "la puesta en marcha de políticas de Estado de largo plazo".
El comunicado también lleva la firma de los senadores Jaime Linares y Norma Morandini, los diputados Alcira Argumedo, Jorge Varinotto y Graciela Villata, el presidente de Libres del Sur, Humberto Tumini, el titular del Partido Socialista Auténtico, Mario Mazzitelli, y los legisladores porteños Javier Gentilini y Virginia González Gass.
Otros que también ya se manifestaron rotundamente en contra de un acuerdo con el PRO fueron los diputados Margarita Stolbizer y Ricardo Alfonsín. Hoy además se volvió a pronunciar sobre el tema el presidenciable de FAUnen que más a la izquierda se ubica, el socialista Hermes Binner. "Nosotros no queremos tener un acuerdo con Macri, no tenemos absolutamente nada que ver", indicó, aunque reconoció que la decisión la debería tomar "la mesa de conducción" de la coalición.

Actualización de la AUH

Mientras se discute nuevamente la suba del MNI para el pago de Ganancias cuya afectación en la cúspide de la pirámide salarial es insignificante, no se debate un tema urgente como es el qué hacer con la Asignación Universal por Hijo, que recibe solo una actualización anual en un contexto de alta inflación. 
Como sabemos la AUH impacta sobre 3,6 millones de niños beneficiarios y se expande a 7,2 millones de personas integrantes de los hogares donde existe uno o más receptores del beneficio, todos hogares de la base de la pirámide de ingresos, exactamente opuestos a los hogares cuyos miembros superan el MNI. 
La gran medida de política social del gobierno nacional, que retrotrajo los niveles de pobreza e indigencia a los valores de 1980, dando carnadura al ciclo de desempobrecimiento más vigoroso desde la recuperación democrática, debe repensar su mecanismo de actualización anual. 
En un contexto de inflación de alimentos como el que se vive, es indispensable lograr una actualización temporal más acotada que la actual, al menos actualizarse dos veces al año junto a las jubilaciones y pensiones y no una sola vez con las asignaciones familiares. Observemos que los 460 pesos actualizados en septiembre de 2013, hoy ya sólo representan 390 y en octubre, antes de ser nuevamente actualizado su monto, equivaldrán a 320 pesos que se destinan a la subsitencia alimentarias del hogar básicamente. 
10 días sin beneficio
Sucede que la AUH transfiere 15 pesos diarios por beneficiario, que por las características de los hogares inferimos se gastan en alimentos y bebidas en su totalidad. Así las cosas, los 140 pesos depreciados por el aumento de precios, en el último mes anterior a su actualización equivalen a 10 días menos de asignación por beneficiario si la pérdida se diera de una sola vez e inicialmente. Diez días sin morfi, como señala Amartya Kumar Sen. 
Igualmente, si midiéramos los niveles de pobreza e indigencia mes a mes, los mismos variarían significativamente. Si tomamos el lapso octubre 2013/ octubre 2014 antes de la actualización, la pobreza e indigencia pasarán de 4,5 por ciento y 13,7 por ciento en octubre de 2011 al 6,0 y 14,7 por ciento en el mismo mes de 2014, respectivamente. Para referirnos a la carencia extrema, la indigencia, umbral que por debajo de su satisfacción existe riesgo alimentario, se trata punta a punta en 12 meses, de acceder a 600.000 indigentes adicionales por falta de actualización de la AUH en tiempo y forma, de los cuales 270.000 son menores de 15 años.

Moyano acordó con el Barba Gutiérrez, se mantiene la municipalización y levanta el paro

Se mantiene la municipalización del servicio de basura, pero los trabajadores de Covelia pasan al municipio con el mismo sueldo.
El conflicto del gremio de camioneros con el intendente de Quilmes, Francisco "Barba" Gutiérrez, luego que este decidiera municipalizar el servicio de recolección de residuos y excluir a la empresa Covelia, vinculada a la familia Moyano, entró esta noche en un principio de solución.

Luego que Pablo Moyano lo amenazara de muerte y ante un intervención de su padre el líder de la CGT opositora, Hugo Moyano -que recriminó las palabras de su hijo-, esta noche los camioneros levantaban el paro que tenía a Quilmes hundida en la basura. 
El Municipio de Quilmes informó en un comunicado que el acuerdo se rubricará este lunes en el Ministerio de Trabajo, y entre los puntos acordados se vislumbra por donde pasó el acuerdo: Se mantiene la municipalización del servicio, pero los trabajadores de Covelia pasan a la comuna, manteniendo el sueldo actual, que es lo que no quería el intedente, ya que las escalas de camioneros están muy por encima de las de los municipales.

"Un Scioli en la antípodas del Kirchnerismo"


El Kirchnerismo puro y duro desconfía de Scioli,  se debate si apoyarlo y encorsetarlo o enfrentarlo.  Cogobernar o enfrentar. en cualquier escnario Scioli tampoco la tiene fácil, hoy lidera las encuestas, pero si CFK da la orden de enfrentarlo competiría por el mismo voto que Massa y el 20% de piso del kirchenrismo se le iría.

Una de las medidas que más irritó al gobierno fue la elección que hizo el gobernador de Martín Insaurralde como su sucesor. Insaurralde quien derrotafo con paliza por Sergio Massa, es visto como frívolo y en las antípodas del kirchnerismo.
Como parte de ese apoyo, Scioli mandó a su alfil Ivan Budassi a realizar un procedimiento en La Salada, uno de cuyos administradores, Jorge Castillo es el mayor enemigo de Martin Insaurralde. La Salada fue defendida por el Sexretario Moreno y por la Presidenta mismo, quien en Angola dijo "La Salada es parte de la Argentina". 

Esta movida del gobernador es vista como un aviso de lo que vendrá, "Un Scioli en la antípodas del Kirchnerismo", según nos dijo un integrante de la mesa chica presidencial.
 
Daniel Scioli apuesta a una alianza con gobernadores e intendentes peronistas y otras fuerzas para llegar a ser el candidato del oficialismo en las elecciones presidenciales de 2015. Mientras sus contendientes en el FpV, Urribarri, Randazzo y Domínguez, buscan todo acto posible para mostrarse con la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, el bonaerense planea formar un gobierno de coalición en caso de llegar a la Casa Rosada, con sectores de la oposición que se hagan cargo de organismos de control y en directorios de empresas del Estado.

La idea del mandatario bonaerense es ofrecer a los 13 gobernadores del PJ que no podrán renovar sus cargos integrar un futuro gabinete o encabezar las listas de diputados o senadores nacionales en sus respectivas provincias. En ese contexto, Scioli dejaría en "independencia" a los líderes territoriales del PJ para la conformación de las listas de legisladores provinciales y municipales con la estrategia de mostrarse como "el candidato creador de consensos" y "continuidad" del kirchnerismo pero "con cambios" en el estilo de liderazgo.
Tras mostrarse el lunes  junto al jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, durante la presentación de una muestra del Papa Francisco, y visitar Corrientes el 6 y 7 de este mes, Scioli viajará a Catamarca para encabezar un encuentro con mandatarios peronistas de provincias mineras. Allí mantendrá una reunión con la anfitriona Lucía Corpacci, a la que luego se sumarán José Gioja (San Juan), Francisco Pérez (Mendoza) y Luis Beder Herrera (La Rioja), entre otros de los que aparecen cada vez más cerca de apoyar la candidatura presidencial del bonaerense.
Scioli continuará su gira por el interior que impulsa para consolidar su candidatura a presidente, el 12 y 13 de mayo en Córdoba, donde compartirá con su par del PJ antikirchnerista, José de la Sota, una disertación en la Fundación Mediterránea.

Progresismo FAUNEN: el mapa no es el territorio

Leemos en La Capital sobre el  proyecto de ley que estarían consensuando las múltiples fracciones de  FAUNEN para ajustar automáticamente el mínimo no imponible de Ganancias, fijándolo en el equivalente a 10 salarios mínimos, vitales y móviles (SMVM).

Cifra que la diputada Donda estima en unos 19.000 o 20.000 pesos mensuales; ignorando que el salario mínimo está en $ 3.600 desde el 1º de enero; con lo cual la suba propuesta sería en realidad hasta unos $ 36.000 mensuales, o sea bastante más. 

O lo que es lo mismo decir, en más de 7 veces el promedio de las remuneraciones de los trabajadores en actividad.

Escasa oportunidad, y dudoso progresismo: atar a la evolución de una variable como el Salario Mínimo Vital y Móvil (que tutela con un "piso" legal a los sectores de trabajadors más vulnerables de toda la fuerza laboral), la desgravación impositiva de los salarios más altos de la escala (los que pagan Ganancias), en un escenario de marcadas fragmentación y disparidad retributiva es, lisa y sencillamente, un soberano disparate...

Alta ocupación hotelera en todo el país por el fin de semana largo

Así lo informó la Cámara Argentina de Turismo (CAT); Tandil, Villa General Belgrano y San Luis, entre los destinos más elegidos por los turistas


El fin de semana largo registra una alta ocupación hotelera en los principales centros turísticos del país. Así lo aseguraron desde la Cámara Argentina de Turismo (CAT).
La cifra estimada representa un crecimiento acumulado del 15,2% con relación al mismo período en 2013.
Entre los destinos con mayor ocupación hotelera se encuentran Tandil y Goya, con el 100%.
Durante los fines de semana largos de 2014 ya se movilizaron unos 5,3 millones de turistas, según la Cámara.
El relevamiento realizado por la CAT para estos feriados determinó los siguientes niveles de ocupación en los centros turísticos más visitados del país:
  • Bariloche 70%
  • Colón 90%,
  • Federación 80 %,
  • Concordia 70 %
  • Esquina 90%
  • Ituzaingó: 85%
  • Corrientes 85 %
  • Goya: 100%
  • Iguazú 80 %
  • Salta 85 %
  • La Rioja 85 %
  • Mar del Plata: 65 %
  • Tandil 100 %
  • Pinamar 70 %
  • Cariló 80 %
  • Valeria del Mar 60 %
  • La Punta 98 %
  • Potrero de los Funes 60 %
  • Renca (San Luis) 100 %
  • San Francisco (San Luis) 92 %
  • San Jerónimo 90 %
  • Nogolí 80 %
  • Villa General Belgrano 85 %
  • Jujuy 80 %
  • Termas de Rio Hondo 98% (Hoteles 4 y 5 estrellas)
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El dilema kirchnerista: Abrazar o enfrentar a Scioli


 
Cristina frente a una decisión clave: Enfrentar a Scioli –y acaso fortalecerlo- o negociar unidad a cambio de lugares en las listas.
Daniel Scioli está ingresando en el territorio que mejor conoce: El mundo del candidato. “Ser el más preparado o inteligente no garantiza nada. A la hora de ganar elecciones lo que necesitas es un candidato y Daniel ya demostró que es un gran candidato”, se entusiasman cerca del gobernador.




La biografía política ofrece cierto sustento al entusiasmo. Scioli viene ganando elecciones hace años por márgenes muy amplios, incluso superando déficits evidentes de gestión. Quedará para otra discusión, si estos le son completamente atribuibles, o son el efecto de una provincia desfinanciada por la Nación.



Un simple repaso por las noticias revela que en las últimas semanas Scioli ocupó el centro de la escena y logró incomodar a casi todos. El peronismo histórico cada vez disimula menos su tránsito a La Plata. El sanjuanino José Luis Gioja fue el primer gobernador en decirlo con todas las letras. Pero son muchos más. La catarmarqueña Lucía Corpacci –amiga de Cristina del Senado- es otra que ya comprometió su apoyo.



Igual que el jefe de bloque del Senado, Miguel Angel Pichetto, quien organizó el almuerzo que Scioli tuvo esta semana con el caudillo pampeano Carlos Verna. Esa comida es acaso uno de los indicadores más fuertes del creciente efecto gravitacional que está generando el gobernador bonaerense en el peronismo.



Verna es uno de los políticos mas duros y experimentados que tiene el PJ. El año que viene disputará la gobernación de su provincia. Fue el único caudillo territorial que renunció a su candidatura en el 2011, cuando Cristina quiso armarle la lista de diputados con camporistas.



Después, se sumó al bloque del Peronismo Federal junto a viejos lobos de mar como Carlos Reutemann, Adolfo Rodríguez Saá y Juan Carlos Romero, todos cercanos a Sergio Massa. La novedad es evidente: Scioli no sólo se benefició de la madeja tejida por Juan Carlos Mazzón para obturar el salto de peronistas hacia el Frente Renovador, sino que ahora comienza a tironearle al propio Massa sus aliados. La misma tensión sufre la Casa Rosada.



El dilema kirchnerista



Por estas horas en el Gobierno se debate una pregunta inquietante: ¿La estrategia de rodear a Scioli con rivales y enfrentarlo en las primarias, no será un enorme regalo? Es que una confrontación en la que Scioli aplaste a los candidatos del kirchnerismo, terminaría de liquidar a ese movimiento y lo dejaría en inmejorables condiciones para la general.



Es por eso que La Cámpora comenzó a revisar su entusiasmo inicial con el entrerriano Sergio Urribarri y , ahora limitó su estrategia a acumular fuerzas para una negociación por las listas de diputados, con el candidato que sea.



Por eso barajan dos iniciativas: Aplicar el sistema de integración proporcional D´Hont en lugar del clásico mayoría y minoría, que siempre utilizó el peronismo para definir sus listas. O directamente proponer que se intercale uno y uno.



Otro elemento acaso más gravitante empuja al kirchnerismo a una negociación de lista única: Una campaña competitiva para enfrentar a Scioli en la primaria presidencial tiene un costo estimado en los círculos del poder, de 1.200 millones de pesos. “Quien se va a gastar eso para perder”, se preguntan cerca del gobernador.




Hoy el candidato kirchnerista que mejor mide es el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, muy lanzado a la pelea presidencial. “Cristina tiene que definir si quiere jugar a ganar. Si quiere ganar no puede dividir el voto kirchnerista”, explican cerca suyo. La lógica es simple –y por eso contundente-, ante el peso específico de Scioli la única chance es concentrar todo el voto kirchnerista en una sola oferta. “Esto se define antes de fin de año”, especulan en la Casa Rosada.



Lo que se discute detrás de estas alquimias es evidente: El barco kirchnerista está llegando a puerto y los marineros quieren seguir en la actividad. Es decir: ¿Qué estrategia es la más adecuada para salvar lo que se pueda salvar?



Sin embargo, nada de esto debería entenderse como el certificado de un tránsito asegurado para Scioli en su camino a la Casa Rosada. Como candidato oficialista que es, su suerte sigue atada a la marcha general de la economía. El escenario de crisis controlada o estabilizada lo beneficia, la implosión terminaría con sus sueños presidenciales.



Falta poco y falta mucho. Después del Mundial empezará a definirse el trazo grueso, de una pelea se librará el año que viene. No habrá nada más político que ese puñado de meses.

La provincia de Buenos Aires y el panradicalismo: una relación difícil

Leemos en El Estadista
(Columna de María Esperanza Casullo y Santiago A. Rodríguez)
La contracara del crecimiento del panperonismo en la provincia es la retracción del radicalismo y sus aliados. Causas, análisis y estrategias para revertir esta tendencia.
En un artículo publicado en el estadista número 95 presentamos cifras sobre el crecimiento del voto panperonista en la provincia de Buenos Aires. Decíamos entonces que en el 2013 la suma de todas las opciones peronistas o neoperonistas sacó más del 65% de los votos en 130 de 135 municipios de la provincia, luego de varios años de sostenido crecimiento. Concluimos que “una parte importante de los votantes de la PBA entiende que el peronismo se ha convertido en la mejor opción para ser oficialista y, también, para ser opositor. El precio que han decidido pagar los votantes para expresar su oposición al Gobierno ha debilitado severamente a la oposición no peronista, que pierde así atributos para librar ‘la madre de todas las batallas’”.
El debilitamiento del atractivo opositor de las opciones no peronistas puede verse con claridad en los mapas electorales que presentamos a continuación: si en la nota anterior veíamos como la provincia de Buenos Aires se iba cubriendo de azul, ya que en más y más distritos el panperonismo obtiene 65% o más de los votos; hoy mostraremos como paralelamente disminuye el número de circunscripciones en donde la suma de las opciones no peronistas (es decir, la UCR más sus circunstanciales aliados) alcanzan un piso de 30% de los votos.
La UCR llega a la elección presidencial del 2007 en crisis, luego de arañar el 10% de los votos en septiembre de 2003 y caer a casi 8% en el 2005, lo que equivale a un cuarto puesto, con la tradicional lista 3. En el 2007, la Unión Cívica Radical se encolumnó detrás de la candidatura a presidente de Roberto Lavagna bajo la etiqueta de UNA, en la cual el centenario partido aportaba el candidato a vicepresidente y la estructura. De esta manera, el sector no peronista se presentó a elecciones con dos candidaturas fuertes, la antes mencionada y Elisa Carrió, y una que podemos llamar residual, la de Ricardo López Murphy. Finalmente, a nivel nacional, Carrió resultó más votada que Lavagna. En la provincia de Buenos Aires las tres opciones panradicales lograron una presencia territorial uniforme, logrando 30% de los votos en prácticamente toda la provincia (Figura 1). UNA superó el 30% únicamente en dos municipios: Navarro y Tres Lomas.
Figura 1: Año 2007. Municipios de la Provincia de Buenos Aires en donde UNA, la Coalición Cívica y Recrear obtuvieron al menos un 30% de los votos.
buenos aires ucr 2007.png
En el 2009, sin embargo, la fórmula del entonces recientemente creado Acuerdo Cívico y Social, consolidando al no peronismo en una sola boleta, retrocedió en su performance. De tener un piso del 30% en casi toda la provincia, la identidad panradical pasó a tenerlo en la mitad del territorio provincial. En esta elección, crucialmente, no pudo obtener este piso de votos en la mayoría del conurbano bonaerense, sólo manteniéndolo en San Isidro y Vicente López, tradicionales bastiones radicales (Figura 2).
Figura 2: Año 2009. Municipios de la Provincia de Buenos Aires en donde el Acuerdo Cívico y Social obtuvo al menos 30% de los votos.
UCR 2009.png
En 2011, el radicalismo de la provincia de Buenos Aires decidió ofrecer una oferta electoral distinta y llevó adelante una alianza con Francisco De Narváez, antes que llevar un candidato a gobernador panradical o propio, partiendo aguas con sus recientes socios, que se presentarían bajo el Frente Amplio Progresista y el ARI. Aun con una relativa mejora con relación al 2009, la identidad panradical no pudo alcanzar el 30% en toda la provincia, y tampoco ser competitiva en el conurbano (Figura 3). En este sentido, la alianza con Roberto Lavagna del 2007 fue mejor procesada por los votantes radicales que la alianza con De Narváez: después de todo, Lavagna, aunque peronista, tenía un discurso desarrollista y había sido funcionario de Raúl Alfonsín.
Figura 3: Año 2011. Municipios de la Provincia de Buenos Aires en donde el FAP, UDESO y el ARI obtuvieron al menos 30% de los votos:
ucr 2011.png
En el 2013, finalmente, la UCR presentó una lista a diputados nuevamente en alianza con el Partido Socialista, el Gen y la Coalición Cívica, entre otros. Los resultados fueron los peores obtenidos hasta ahora. En la provincia de Buenos Aires, otrora el distrito de donde surgieran dirigentes como Hipólito Yrigoyen, Ricardo Balbín, Oscar Alende y Raúl Alfonsín, la alianza Frente Progresista Cívico y Social sólo logró el 30% de los votos en un puñado de localidades ubicadas en el centro, oeste y sur de la provincia (Figura 4). Estos municipios, sumados, totalizan menos de 160.000 habitantes según el Censo 2010, aproximadamente 1% del total provincial.
Figura 4: Año 2013. Municipios de la Provincia de Buenos Aires en donde el Frente Progresista Cívico y Social obtuvo al menos 30% de los votos.
ucr 2013.png
Una hipótesis para explicar los pésimos resultados del 2013 es que, luego de las alianzas fallidas del 2011, un porcentaje importante de opositores hayan juzgado que era más útil su voto para Sergio Massa y hayan votado en consecuencia. Otra posibilidad, no opuesta a la anterior, es que la lista del Frente Progresista para estas elecciones no haya resultado atractiva: tanto Ricardo Alfonsín como Margarita Stolbizer habían sido candidatos anteriormente y en la lista del 2013 no existió novedad en las candidaturas. La presencia en la lista de los sectores que motorizaron el fallido acuerdo con De Narváez, probablemente, haya sido también otro factor.
ALGUNAS CONCLUSIONES Y TANGENTES
-Desde 1995, la Unión Cívica Radical no ha podido representar un cabal rol opositor sin entrar en una alianza o frente con otros partidos. Esto se ha profundizado tras la atomización del partido hacia fines de los ’90 y la crisis del 2001. En la última década, sólo en 2003 y 2005 ha utilizado la tradicional lista 3. Desde el 2007 hasta aquí, la UCR se ha presentado a cada una de las elecciones nacionales bajo una alianza distinta: con Lavagna primero, dentro del ACyS luego, con De Narváez en 2011 y con el FAP en 2013. Esta política de alianzas demuestra una saludable vocación de articular políticamente, sin embargo, también es posible que la sucesión de aliados tan diferentes haya diluido la marca del radicalismo, perdiendo atractivo. Por ejemplo, en 2011 la alianza nacional UDESO es consecuencia de una situación metropolitana de la ciudad de Buenos Aires y Gran Buenos Aires, sin resultados positivos en ninguna otra localidad del interior provincial (siquiera tuvo impacto claro en el GBA). Se podría argumentar que hubieran obtenido iguales o mejores resultados apelando a la identidad tradicional del sello“Lista 3”.
-Desde el 2007 hasta aquí, la Unión Cívica Radical y sus aliados han perdido aún más terreno: la lucha por la oposición efectiva parece haberse trasladado al interior del extenso y maleable archipiélago panperonista.
-En la provincia de Buenos Aires, desde principios de los ’90, la UCR no tiene un claro líder político que sea al mismo tiempo competitivo electoralmente. Esta es una gran diferencia con otras provincias como Santa Fe (Mario Barletta), Jujuy (Gerardo Morales), Córdoba (Ramón Mestre y Oscar Aguad) y aun en Mendoza (Julio Cobos, Ernesto Sanz, Roberto Iglesias y Alfredo Cornejo). Ni Leopoldo Moreau, ni Ricardo Alfonsín, ni Margarita Stolbizer son vistos como candidatos a gobernador competitivos. La estrategia de suplir esta debilidad con alianzas extrapartidarias puede traccionar votos en el corto plazo pero, sin embargo, tiene el efecto paradójico de diluir la marca propia y dificultar la aparición de nuevos talentos políticos en el mediano plazo.
-Asimismo, el radicalismo perdona y contiene mucho menos que el peronismo a “los que se van”. Si bien aceptaron el regreso de Cobos, todavía está fresca la aparatosa excomunión de los radicales K en 2007. Algunos de ellos optaron por integrarse al massismo y no regresaron a la UCR (por ejemplo, José Eseverri, de Olavarría; Gustavo Posse, de San Isidro o Mario Meoni, de Junín). Este factor refuerza las dificultades a mediano plazo, obturando el ascenso desde lo local a lo nacional de líderes más jóvenes.
-Otra diferencia entre el radicalismo y el Frente para la Victoria es que, si se observan las listas de diputados del 2005 a la fecha, puede notarse que el FPV de la provincia de Buenos Aires tiene un núcleo de diputados que se reeligen sucesivamente, como Carlos Kunkel, Diana Conti, Edgardo De Petri, Remo Carlotto, María Teresa García yHéctor Recalde, por citar algunos. Estos son considerados necesarios dentro del Congreso por el liderazgo político nacional; sin embargo, per se, son figuras de escaso atractivo electoral. La gran diferencia es que la certeza que tiene el FPV de obtener 30 puntos o más hace que sea factible ubicarlos en puestos en donde “entran seguro” y darle la cabeza de lista a figuras que, en un principio, tendrían mayor atractivo electoral, y esas sí rotan. Este manejo estratégico, entre capacidad de obtener votos e importancia para el armado interno del partido, se hace mucho más difícil cuando hay menos bancas para repartir.
-Tal vez lo que el centenario partido deba hacer en esta coyuntura es volver al territorio. ¿Qué pasa en esas zonas de la provincia en donde la UCR sigue haciendo pie aún hoy? ¿Cuál es la fórmula exitosa para el mantenimiento local de la identidad, que se traslada a una elección nacional? ¿No hay allí, en Ayacucho o Pellegrini, por ejemplo, dirigentes propios con los cuales construir una apelación provincial?
La UCR de la provincia de Buenos Aires parece falta, en estos momentos, de dos cosas de las cuales en su momento tenía cantidades: liderazgo y épica. Es decir: un liderazgo claro, que discipline a la interna y contenga a los insatisfechos y, al mismo tiempo, pueda desarrollar un discurso llano y directo, no áridamente generalista, para interpelar a la sociedad y atraerla a un proyecto alternativo. Sabemos que decir “hace falta un líder” puede leerse como una apelación a una bala de plata, pero decimos líder y no estadista. No hay que olvidar que, en un momento histórico, de internas difíciles y fragmentadas, eso fue lo que surgió desde el interior de la provincia, más precisamente Chascomús.

La foto de Macri con Violetta que es furor en Twitter

El jefe de Gobierno porteño fue captado con un gesto y una mirada particular hacia la cantante.


Un gesto, una mirada y una foto en el momento exacto. El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, es el blanco de los comentarios en las redes sociales, especialmente en Twitter, por una fotografía tomada esta tarde junto a la cantante y actriz Martina "Tini" Stoessel, protagonista de la serie de televisión "Violetta".

Luego del show gratuito, que fue organizado por el gobierno de la ciudad de Buenos Aires y que convocó a cerca de 250.000 personas en Palermo, el funcionario se acercó a saludar a la artista, de 17 años. En ese momento, un fotógrafo de la agencia DyN captó el momento en que Macri le miraba los pechos a Stoessel y realizaba un particular gesto, lo que desató la polémica.

El jefe de Gobierno porteño, la semana pasada, fue el blanco de las críticas, especialmente de las femeninas, al manifestar que "a todas las mujeres les gustan los piropos, aunque les digan qué lindo culo que tenés". Luego se disculpó.




La simulación sirve para ganar una elección, UNA sola.

Lenguaje y simulación en la construcción de la oferta electoral 


Por Rubén Weinsteiner


La Web 3.0 contribuye a construir el nuevo campo de la mirada en la construcción del poder político. La lucha por ordenar las percepciones sobre lo que pasa, de estructurar la narrativa y organizar el debate, se da cada vez con más fuerza en la Web 3.0.
La masividad y velocidad de circulación de la información, plantea al ciudadano 3.0 la necesidad de ordenar, priorizar y discriminar fuentes e información y a la vez defenderse de la simulación.

El posicionamiento en la Web social, del político en forma personal, de un espacio o de sus seguidores y militantes, se convierte en un elemento cada vez más importante. Si el continente no incluye, si el espacio no seduce, no se posiciona en buscadores, no penetra en las redes sociales,  los contenidos, la información y las intenciones pierden poder en todo sentido.

El formato simétrico, híper masivo y viral de la Web social, impone reglas de juego disruptivas, nuevas y muy determinadas, a partir de las cuales la propuesta vincular del político o del espacio puede mutar, innovar y alimentarse de la demanda del mercado con mucha más flexibilidad y velocidad que con los medios  1.0.
En este sentido, hay dos aspectos fundamentales y básicos en la construcción y gestión de la imagen 3.0.  Por un lado está el aprendizaje del lenguaje, el adoptar las reglas de cómo se comunica en la Web 3.0, como se habla, como se interactúa y como se interviene, en definitiva, la pragmática. Este aprendizaje se da como cualquier otro, como aprender un idioma, las señales de tránsito o la forma de actuar de un legislador nuevo en el congreso.

Por otra parte está el posicionamiento y la construcción deliberada de la imagen.

Cuando hablo de posicionamiento me refiero a :
a) Determinar quién soy y la imagen que quiero dar e instalar
b) Construir el mensaje
c) Emitirlo

Entre ambos aspectos, el aprendizaje del lenguaje y el posicionamiento, hay una zona gris donde es difícil determinar dónde empieza el “respeto” por ciertas reglas del lenguaje y donde empieza la producción de artificios para ganar adhesiones.
El lenguaje representa al objeto como un mapa al territorio, pero el mapa no es el territorio ni la imagen construida por el lenguaje es el objeto. El lenguaje tiene su lógica interna en la producción del sentido, y es una realidad distinta del objeto del cual se presenta como análogo. Todo lenguaje es una simulación, simular es imitar representar, reproducir pero también es fingir, engañar, mentir.

Esta diferencia entre la propuesta ideológica y la impostación puede no ser percibida en el corto plazo. La campaña de De Narváez en 2009 y su fuerte apuesta a la Web 2.0 -no desde la militancia, sino de un equipo contratado- y su resultado, constituyen un caso de laboratorio para este análisis.
El discurso de esta campaña, se apoyó en lugares comunes y propuestas no propuestas, abiertas e inclusivas, por su indefinición. Estableciendo como principal propuesta en términos de discurso de poder, ser el eje polarizador en contra de Néstor Kirchner. Concretamente el quiebre amor-odio en torno a la figura de Kirchner, planteaba un escenario 70/30, en el cual si el 70 se dispersaba el 30 ganaba. Por eso la propuesta no tuvo que ver ni con lo ideológico, ni con los que, ni con los cómo, nadie sabía ni supo cual era la propuesta en términos de medidas concretas a proponer en el parlamento por parte de Francisco De Narváez, ya que no se presentaba para un cargo al que esperaba llegar por primera vez, el ya era diputado y jamás había presentado un propuesta en el recinto y nunca había tomado la palabra. Luego de ser reelecto y haber asumido, nada cambió.

Todo el planteo del mentor de FDN, Durán Barba, fue; “si votamos todos al mismo, Kirchner pierde”. Y funcionó, De Narváez obtuvo 2 puntos más que Kirchner.
En ese colectivo había de todo, gente que lo odiaba a Kirchner, los votantes de Patti que al bajarse este se quedaron sin candidato, los peronistas no K, los radicales que consideraban mas importante que Kirchner pierda que votar a su partido, etc. Difícilmente encontremos personas que se enamoraron de la propuesta de De Narváez, porque resulta difícil enamorarse de una propuesta de acción táctica, “voten a b para que no gane a”, la gente se enamora de las personas, de las ideas o de las propuestas de acción estratégicas. Y la simulación de corto plazo tanto en la Web social como en el mundo real sirve para proponer acciones tácticas, nunca ideas, ni planes estratégicos.

Votar a la Alianza para que el peronismo no gane, fue una idea-acción táctica, de cortísimo plazo, porque solo sirvió para ganar pero no para gestionar, por eso cuando alguien gana con ese tipo de propuestas y llega al gobierno, no sabe qué hacer, se pone nervioso y choca el país como De la Rúa.

¿Qué piensa la gente acerca de De Narváez hoy, como propuesta de acción, más allá de haber sido un instrumento eficaz para enfrentar a los Kirchner?
La respuesta a esta pregunta toma sentido, con una direccionalidad y claridad que se profundiza de manera directamente proporcional al paso del tiempo.

La política sin militantes, sin cuadros, sin ideología, de propuestas ligadas estrictamente a “que las cosas funcionen” y a “la concordia y el diálogo”, en realidad, rechazan a la política como instrumento, por eso en el poder, se encuentran sin instrumentos para gestionar, creando mas problemas de los que solucionan.

La simulación virtual o real sirve para ganar una elección, pero UNA sola.

Rubén Weinsteiner

Los gobernantes no los ponen los que votan, sino los que cuentan los votos


Los votos hay que emitirlos, pero también contarlos


Graciela Fernández Meijide-Carlos Ruckauf  Provincia de Buenos Aires 1999


Pinky-Alberto Balestrini  La Matanza 1999

Miguel Del Sel-Antonio Bonfatti 2011


Pascual Cappelleri- Eduardo Duhalde 1983



Lanata desenmascara a Melconian

La guerra entre Tinelli y Vila





Urribarri y Randazzo, de campaña

Dos de los precandidatos presidenciales kirchneristas, el gobernador entrerriano, Sergio Urribarri y el ministro del Interior, Florencio Randazzo se mostraron el jueves 1° de Mayo en actividades vinculadas al Día del Trabajador.

Urribarri junto al vicegobernador de Buenos Aires, Gabriel Mariotto, y el intendente local, Daniel Di Sabatino.
El gobernador entrerriano, Sergio Urribarri, estuvo por la mañana en la histórica quinta de Juan Perón en San Vicente junto al vicegobernador, Gabriel Mariotto, y el intendente local, Daniel Di Sabatino. Después hizo una recorrida por la villa 1-11-14 del Bajo Flores y terminó el día con un acto en La Boca junto a algunas agrupaciones kirchneristas.

En tanto Florencio Randazzo participó de un acto organizado por el CGT donde llamó a “defender los logros alcanzados durante los gobiernos de Néstor y Cristina, donde los trabajadores fueron el eje de todas las políticas” y pidió que “no se dejen engañar por aquellos que se disfrazan de peronistas, pero que son promocionados por grupos económicos y mediáticos para llegar al poder y ponerlo a trabajar por sus intereses”.

Patrick Smith:“La inflación no impacta en la imagen de las marcas argentinas en el exterior”

por JULIETA CAMANDONE

FutureBrand es una consultora global de marcas que opera en 18 países y pertenece a Interpublic, uno de los grupos de comunicación más importantes del mundo, que cotiza en la Bolsa de Nueva York . En la región, tiene oficinas en Santiago, Lima, Bogotá y México que responden a la oficina local, en Buenos Aires. También tiene una oficina en Brasil.
Patrick Smith, CEO Global de la compañía, visitó la Argentina y  mostró una foto alentadora: la firma tuvo un crecimiento orgánico del 60% desde 2009. Pese a la crisis global que se desató en ese año, el negocio, dice, es un éxito.
–¿Cuál es el valor que le dan hoy las empresas al branding?
–Se lo toman muy en serio. El concepto evolucionó en los últimos diez años y las empresas dejaron de verlo como el ‘logo’ y ahora ven en el branding algo fundamental, y esa es la razón por la que nuestro negocio funciona. Se dan cuenta de que pueden explicar los aspectos centrales de su empresa y comunicar la forma en la que hacen las cosas. Y eso es algo central en su negocio.
–¿El Branding puede salvar a la marca al momento de una crisis?
–Hay marcas que desde la reputación nunca se recuperan de una crisis. Primero tienen que entender cuál es el mensaje que hay que dar para frenar el daño, desde su posicionamiento y su cultura, y preguntarse si necesita cambiar. El cambio es un proceso de entre dos y tres años en el caso de empresas grandes. Hay que comunicar los cambios que está haciendo, y ser humilde. Lo peor en este caso es hacer un nuevo logo y decirle al mundo lo genial que sos.
–¿La crisis global impactó en el presupuesto que las empresas le otorgan?
–Creo que la crisis impactó, probablemente porque es una de esas partes del gasto de su presupesto que pueden postergar. Entre 2009 y 2010 se notó, pero ahora la inversión volvió con fuerza y hay diferentes niveles de actividad. Inclusive en Europa se está volviendo activa la inversión.
–¿Cómo está la actividad en América latina?
–Es un mercado fuerte. Ya llevamos algunos años trabajando y lo que vemos es que Brasil y América latina tienen un crecimiento consistente de hasta 25% anual. Tenemos expectativa de mantener el crecimiento desde Buenos Aires. Una de las cosas importantes de entender es que hay respeto y credibilidad en la gente de este país.
–¿Qué freno encuentran las marcas argentinas para salir a los mercados externos?
– Las asociaciones en torno a las marcas argentinas tienen que ver con un nivel de cultura y sofisticación que les dan una idea cosmopolita. Están relacionadas con deportes como el polo y, por supuesto, el fútbol, además del tenis, rugby; a la comida y la vida de exteriores, y está considerado un lugar civilizado para estar. Los temas de coyuntura local no son un impedimento para las marcas argentinas en el exterior. La inflación, por ejemplo, es algo que no sale de acá y no impacta en la imagen de las marcas.
–¿El segmento de ‘social media’ es para todas las compañías?
–Sí. Es un canal más, que te permite ser más específico en el target, y más efectivo. Lo importante es ser consistente en el mensaje

El uso de la capacidad instalada en la industria está en su menor nivel en 11 años

En marzo se ubicó en 67,9%. Desde 2003 que el sector no presentaba tal grado de capacidad ociosa para el tercer mes del año. El bloque automotriz, uno de los más afectados
 

La utilización de la capacidad instalada en la industria ya está en su peor nivel en 11 años y las perspectivas no son favorables porque casi el 90% de los empresarios no cree que habrá mejoras en el segundo trimestre del año.
De acuerdo a los datos oficiales, en marzo el uso de la capacidad instalada se ubicó en 67,9%. Desde 2003, en los inicios de la salida de la crisis de 2001/2002, que el sector no presentaba tal grado de capacidad ociosa para el tercer mes del año. Si se toman los datos del primer trimestre del año, la utilización de la capacidad instalada en la industria alcanzó el 67,2%, casi tres puntos por debajo que en el mismo periodo de 2013, informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec).
Por otro lado, la encuesta cualitiva industrial que mide las expectativas de las firmas marcó que no se esperan mejoras en el segundo trimestre de 2014. En particular, el 69,1% de las empresas aseguró que no prevé cambios en la utilización de la capacidad instalada en el segundo trimestre de 2014 con respecto al mismo periodo de 2013, el 20% anticipa una baja y sólo el 10,9% vislumbra una suba.
El sector que presentó la menor utilización de capacidad instalada en marzo fue el de metalmecánica (50,7%), seguido por el automotriz (57,3%) y productos del tabaco (62%). En el primer caso según la serie histórica del Indec desde marzo de 2002 que el indicador no registraba un porcentaje menor para ese mes. En el caso de la industria automotriz hay que mirar las cifras de 2009 para ver una utilización de la capacidad instalada más baja.
El sector automotor viene atravesando una crisis desde principios de año por la caída de ventas. Alrededor de 3.500 operarios de tres empresas automotrices ya fueron suspendidos por al menos una semana debido a la caída en la producción, generada por la baja en la demanda de autos y camiones cero kilómetro en el mercado interno y desde el exterior.
A pesar que el automotriz es uno de los sectores más afectados, las dificultades se perciben en todos los bloques y ya se reflejan en todos los indicadores oficiales. El Estimador Mensual Industrial (EMI) registró en marzo una caída de 6% respecto al mismo mes del año pasado mientras que la baja en el primer trimestre fue de 3,3% si se compara con igual periodo de 2013.
En tanto, el Índice de Obreros Ocupados (IOO) también del Indec registró una reducción de 1,2% interanual en el primer trimestre del año. Hay que remontarse a la crisis de 2009 para ver caídas de igual o mayor envergadura. Hace unas semanas la Unión Industrial Argentina (UIA) había dado a conocer un documento con cifras hasta 2013 que hablaba de estancamiento en el empleo pero las cifras de 2014 dadas a conocer esta semana ya hablan de una caída en los puestos de trabajo del sector.
Además, la producción industrial viene perdiendo peso en el PBI. De acuerdo a un informe del Estudio Federico Muñoz y Asociados, en 2004 la industria explicaba el 16,8% del PBI mientras que en 2013 retrocedió hasta 15,5%, casi el mismo nivel que presentaba en 2001.
Las perspectivas para el sector no son alentadoras. En la misma UIA esperan que la actividad retroceda hasta 2,5% este año. En tanto, según la última encuesta cualitativa industrial del Indec los empresarios del sector vislumbran un virtual escenario de estancamiento en el segundo trimestre respecto del mismo período de 2013. El informe revela que el 69,4% de las firmas espera un “ritmo estable”en la demanda interna, el 17,5% espera una baja y apenas el 13,1% augura un avance.