#votojoven: legitimación de la tribu e institucionalización del cambio.



 Por Rubén Weinsteiner para EL PAíS

Roberto Brito Lemus plantea que la juventud, comienza cuando se desarrolla  la capacidad de reproducir la especie humana, y  termina cuando se desarrolla la capacidad de reproducir el orden social.
Se es joven mientras se cuestiona, contesta y demanda cambios y se evita reproducir el orden social tal cual está planteado. Cuando se evita “transar”.
La demanda más clara de los diferentes sub segmentos que componen el voto joven,  tiene que ver con la  institucionalización  de soluciones desde la política, a problemas colectivos de carácter  tribal  de los jóvenes.
El abordaje de estas demandas, conlleva una legitimación implícita   y demandada de valores, sentimientos, necesidades,  deseos y aspiraciones, colectivas y tribales. Esa legitimación es el corazón de la demanda del segmento.  Ser escuchado, reconocido el problema, y reconocido el carácter colectivo y la tribalidad de la demanda.
El discurso político tradicional,  que intenta interpelar al segmento joven,  lo hace desde el paradigma individual introspectivo y adulto,  frente  al paradigma  comunicacional colectivo de referencia externa y tribal,  desde donde el segmento 16-30 escucha y construye su sistema de preferencias.
El reconocimiento y la identificación con la tribu en tanto colectivo,   ante el problema por parte del discurso político, es el eje de la racionalidad instrumental del voto joven.  Para el joven,  identificación es amor, para los adultos identificación, es solo empatía.
Todo discurso plantea dos niveles a tener en cuenta: el de los contenidos y el relacional.  El primer nivel debe apuntar a la institucionalización de soluciones para problemas específicos, el segundo nivel a establecer un vínculo de reconocimiento y valoración hacia el colectivo, donde el joven se encuentra inserto,  y desde donde demanda esos cambios y soluciones.
Para que la comunicación  con el segmento joven sea  esencialmente persuasiva y técnicamente informativa, y  no al revés, debe tener en cuenta que es más importante lo que dicen otros jóvenes, dentro o fuera de la tribu, por afirmación o por negación, que lo que dicen los padres o los políticos. Si los jóvenes cumplen con lo que está bien para los padres, incumplen con lo que está bien para los pares y la tribu, y viceversa. “No tomes, no entables relación con gente peligrosa, estudiá mucho, acóstate temprano, no te quedes hasta cualquier hora en la computadora” consejos sobre la vida sexual, las relaciones, el trabajo y finalmente la política.
En la mayoría de los casos donde las consecuencias no revisten inmediatez , amenaza o peligro, la tensión padres-tribu, se salda a favor de la tribu, por el peso del colectivo a la hora de la aprobación y legitimación social.
La ocupación del imaginario por parte del joven, en tanto integrante de un colectivo, una tribu, con sus leyes, códigos y marcos transaccionales,  es una precondición de cualquier construcción discursiva, políticamente significativa,  para la interpelación y colonización de subjetividades dentro del segmento 16-30.
Rubén Weinsteiner

Livingston, solo 80

 Werner Pertot


“Prometo que no habrá ningún discurso aburrido”, dice el inusual volante con el que el arquitecto Rodolfo Livingston convoca a una charla en el Café de los Angelitos. El reconocido urbanista integra la lista de legisladores de Aluvión Ciudadano, el partido que creó el sanitarista Carlos Oviedo y que compite por un lugar en la Legislatura porteña sin una boleta nacional.

Livingston resume su vida hasta ahora: “A los 40, me casé, tuve mi primer hijo y corrí mi primer maratón. Después, tuve otros dos hijos, corrí 14 maratones más. A los 50, salvé a un ahogado. A los 67 me tiré en paracaídas y a los 80 empiezo mi carrera política. A los cien tengo pensada una fiesta. Pero no me pienso morir”.
Livingston nació en noviembre de 1931 y se recibió en 1956. En 1961 pisaba por primera vez Cuba, un mes más tarde del intento de invasión en playa Girón. “Estaba dispuesto a morir por la revolución. Hoy habría una callecita con mi nombre y alguien diría: ‘Oye, coge por la Livingston’”, se imagina. “Dirigí la erradicación de una villa miseria en un pueblo que se llamaba Baracoa. Se esperaba otra invasión”, recuerda. Volvió en 1962 y luego en los noventa, cuando supervisó el programa Arquitectos de la Comunidad, en Cuba. “Fui 32 veces a Cuba y formamos consultorios de arquitectura”, dijo.
Tuvo una columna semanal en el diario cubano Juventud Rebelde entre 2002 y 2003. “Cuando empiezan a estar en el monte el Che y Fidel, me interesé por esa gente que era muy cercana a mí. Leí un reportaje de Sartre, que estuvo en Cuba con Simone de Beauvoir. Me enamoré de un país y tengo una novia inmortal: Cuba”, dice Livingston, quien también pasó un año en Perú en 1967, tras la Noche de los Bastones Largos. “Nos sacaron literalmente a patadas de la universidad y me ofrecieron un cargo en Arequipa”, cuenta. Dio seminarios en Venezuela, Uruguay, Brasil y Cuba. Es autor de diez libros, como Cirugía de Casas, Arquitectura y autoritarismo y Cuba existe, es socialista y no está en coma. También tiene un libro con sus fotografías de Cuba. Fue director del Centro Cultural Recoleta en 1989.
“Me ofrecieron por primera vez ser candidato y me gustó la gente de Aluvión”, señala Livingston. Sobre las otras listas kirchneristas, indica que simplemente no hubo un ofrecimiento similar de parte de ellos. “No va a ser un trabajo nuevo. Hace 50 años que me ocupo de la ciudad. Tuve que pelear con la escuela shopping de Grosso. Quería hacer 25 escuelas-shopping más”, señala.
“El gobierno de Macri omite la belleza. La belleza es un derecho de los ciudadanos”, plantea Livingston. “El plan Pro.Cre.Ar es un aporte importante, pero hace falta más. Hay que modificar los códigos municipales que tienen prohibiciones ridículas. Son muchas cosas que podría proponer como legislador y que simplificarían la vida de la gente, sin necesidad de más presupuesto. La ciudad no puede estar gobernada por burócratas”, señala el arquitecto. “Cuando quiere hacer una casa, la gente primero llama al albañil y después va viendo sobre la marcha. Así nació el metrobús: es la consecuencia de querer hacer una propaganda electoral y un negocio. No fue precedido por el pensamiento”, dice Livingston, quien advierte que “el costo es una monstruosidad”. “Dietrich dice que se ahorran 15 minutos con el metrobús de la 9 de Julio. Pero no todo el mundo va de una punta a la otra. Se ahorran, supongamos, 7 minutos, que pierden buscando las nuevas paradas, que están cada cinco cuadras.”

Quien vota a quien en Chile

El ADN del voto

A un mes de las elecciones, una encuesta del Ichem y la Universidad Autónoma -con entrevistas cara a cara y más de 1.700 casos a nivel nacional- ayuda a revelar uno de los misterios de la presidencial: cómo son los votantes que respaldan a las principales candidaturas que compiten para llegar a La Moneda. Ésta es la radiografía de aquellos electores que afirman tener decidida su opción: dónde se ubican, qué edad tienen, cuál es su nivel socioeconómico y qué piensan sobre los temas valóricos y sociales que están en el debate.

La candidata de la Nueva Mayoría logra sus mejores porcentajes entre las mujeres (en que supera por ocho puntos su desempeño frente a los hombres), votantes de más de 45 años, integrantes de los grupos socioeconómicos D y E y sectores rurales, donde la intención de voto supera el 45%, e incluso el 50%. El grupo de edad es especialmente importante, porque los votantes de más de 45 años son los más dispuestos a participar en noviembre.
Bachelet también tiene un respaldo importante entre quienes no tienen estudios universitarios: logra el 44,9% en el grupo que llegó hasta la educación media y el 65,6% -casi dos de cada tres preferencias- en quienes tienen educación básica.
Los números más bajos para la ex mandataria se dan entre los jóvenes que tienen entre 18 y 29 años (con 27%), la zona norte del país, los solteros y quienes tienen estudios universitarios, donde logra 27,1%. También baja su desempeño en las denominadas “urbes medianas” -ciudades que no son grandes centros de población-, donde alcanza 37%.
En cuanto a temas valóricos, si bien los votantes de Bachelet apoyan  el Acuerdo de Vida en Pareja (61,9%), rechazan el matrimonio homosexual (sólo 37% a favor), la legalización de la marihuana (51% en contra) y el aborto (39,2% a favor). Estos tres últimos temas han sido levantados como propuestas por diversos sectores de la Nueva Mayoría, pero la candidata no se ha comprometido con ninguna de ellas.
El 38,7% de sus votantes afirma que preferiría matricular a su hijo en un colegio municipal, la cifra más alta entre los cuatro principales candidatos, y el 54,9% asegura que prefiere un presidente que comprenda sus problemas antes que uno que sea técnicamente más capaz.
En cuanto a su situación personal, quienes optan por Bachelet son más bien pesimistas: el 61,5% piensa que avanza menos o está retrocediendo en relación al resto de los chilenos; el 54,7% afirma que su situación económica dentro de cinco años será igual o peor, y el 47,9%, si pudiera tomarse un café con ella, le hablaría de sus problemas, siendo que en los demás candidatos la opción mayoritaria sería contarle de sus sueños y proyectos.

Su anterior postulación presidencial y su presencia en la escena política en los últimos cuatro años parecen haber dado frutos para el candidato del PRO al menos en una dimensión: su nivel de conocimiento a nivel nacional es de 97,3%, muy similar al de Evelyn Matthei (98,9%) y Michelle Bachelet (99,1%).
Los mejores grupos para Marco Enríquez-Ominami son los votantes entre 18 y 44 años, los sectores ABC1 y C2 y quienes tienen estudios universitarios, donde las intenciones de voto son superiores al 10%. Lo mismo ocurre en el Norte del país -sector donde superó el 25% en las elecciones de 2009 y tiene alcaldes que lo respaldan-, aunque sus cifras son superadas por las de Franco Parisi en cuanto a intención de voto en esa zona (10,6% contra 12,3%).
Los votantes de Enríquez-Ominami tienen un perfil muy determinado en temas valóricos: son los más liberales de entre las cuatro candidaturas principales. El 58% está a favor de legalizar el aborto, el 50% apoya el matrimonio homosexual, el 80,2% respalda el Acuerdo de Vida en Pareja y el 56,6% aprobaría la legalización de la marihuana, siendo el único candidato del grupo para el que sus votantes apoyan las cuatro iniciativas.
El 15% de quienes respaldan a ME-O tiene educación básica, el 39% cursó educación media y el 46% tiene educación superior. El 51,4% afirma que optaría por matricular a su hijo en un colegio particular subvencionado, y el 50,2% de ellos dice que preferiría a un presidente que comprenda mejor sus problemas antes que a uno que sea técnicamente más capaz. Económicamente, son optimistas: el 56,8% piensa que su situación personal estará mejor en cinco años de lo que está hoy y el 44,7% afirma que siente que avanza más que el resto de los chilenos.
Enríquez-Ominami también tiene el problema de ser la “segunda opción”: es el segundo candidato mejor evaluado en preguntas como “con quién se tomaría un café” o “a quién invitaría a un asado”, y el 21,3% lo menciona como el candidato por el que votaría en caso de que el postulante por el que optaron inicialmente no se presentara, pero eso no se capitaliza en la intención de voto.


OPINIÓN: DOS COLLERAS
[Por Daniel Flores, director de Estudios Ichem-U. Autónoma de Chile]
La competencia presidencial de noviembre, demuestra la encuesta Ichem-U. Autónoma, no es por el tercer lugar entre candidatos diferentes. Es por el domicilio político entre candidatos similares. Mientras ME-O busca los votos blandos de Bachelet, Parisi busca los votos que Matthei no logra remontar. Porque los votantes de Marco y Parisi son muy diferentes. Mientras el voto de Marco es más político e ideológico, el de Franco es un voto que prefiere lo técnico. Mientras el votante de ME-O  se ubica en la centroizquierda y declara que prefiere a políticos antes que a técnicos, el votante de Parisi se posiciona en la centroderecha, y prefiere candidatos más capaces técnicamente, que representantes ideológicos o políticos.
Por eso, el par de oposición no es ME-O vs.Parisi, sino que Bachelet vs. MEO y Matthei  vs. Parisi. Y en este sentido, Parisi tiene un campo mucho más llano de crecimiento. Porque mientras Marco enfrenta al poderoso arquetipo bacheletiano, Parisi compite con una derecha que ha tenido cuatro candidatos presidenciales en lo que va del año, ycon un duro enfrentamiento interno por los dichos del presidente Piñera durante la conmemoración de los 40 años del golpe.
La competencia entonces es clara. El 41% del electorado bacheletista votaría por Marco si ella no fuese la candidata. El 28% del electorado de Matthei  sería de Parisi si ella no estuviese. Al revés, los votos que comparten Parisi con ME-O y Bachelet con Matthei son mínimos. La competencia es por los domicilios políticos.
Luego, los candidatos masculinos tienen de dulce y de agraz. Como a Parisi lo conoce el 61% de la población, tiene espacio para crecer hasta noviembre, y probablemente lo haga. A Marco, en cambio, ya lo conoce un 97% de las personas y, por tanto, su rango de crecimiento hasta las elecciones depende solamente de restarles votos a otros. Sin embargo, al otro día de las elecciones, el escenario será distinto. Porque a ME-O le corresponderá sumar el 41% de los votos de Bachelet, que votarían por él si ella no estuviese, y que lo dejarán, probablemente, como el político de centroizquierda mejor posicionado (un 31% de expectativas de voto a nivel nacional). Mientras que, luego de noviembre, Parisi deberá luchar, por un lado, con la sombra de una eventual candidatura de Piñera y, por otro, con el posicionamiento de la izquierda liberal de Velasco.




Los sectores de jóvenes (22,7%), ABC1 (28,6%) y de personas con educación universitaria (21,9%) son los mejores nichos para Evelyn Matthei entre quienes declaran que participarán en las elecciones el próximo 17 de noviembre. Además, tiene buenas cifras en el grupo que describe tener un bienestar alto en su vida (24,4%), y en cuanto a características geográficas, también obtiene un desempeño mejor que su promedio en el Norte del país (19,8%) y en las “urbes medianas” (22,4%), ciudades cuyo perfil concuerda con el despliegue hecho por la candidata en terreno.
Su desempeño es más bajo que el promedio en los sectores rurales (12,1%) y entre quienes sólo tienen educación básica, donde obtiene 9%. En el resto de los bloques su desempeño es parejo, aun cuando se observa una pequeña diferencia al comparar la intención de voto de las mujeres (18,2%) contra la de los hombres (16,3%).
El perfil en lo valórico es más conservador que en los otros tres candidatos analizados. Los votantes de Matthei respaldan el AVP (68,2% a favor), pero rechazan el aborto (51,7% en contra), el matrimonio homosexual (61,2%) y la legalización de la marihuana (58,6%).
El 15% de sus votantes tiene educación básica, el 44% educación media, y el 41% educación superior. Y a la hora de elegir dónde matricular a sus hijos, las cifras son parejas: el 24% lo haría en un colegio municipal, el 33% en uno particular subvencionado y el 31,6% en uno privado.
En cuanto a su percepción de vida, quienes optan por la candidata de la Alianza parecen estar conformes con su situación actual. El 67,3% afirma que aunque el sistema económico necesite ajustes profundos o menores, no lo cambiaría por otro. El 52,7% cree que avanza más que el resto de los chilenos, y sus votantes prefieren como presidente a un político “técnicamente más capaz” (47,2%).
En el caso de Matthei, cobran especial relevancia los indecisos. El sondeo indica que el 17,7% de quienes respondieron que irán a votar aún no tiene decidido por quién lo hará, una cifra elevada considerando que queda un mes para la elección. Por eso, es un grupo que podría modificar el escenario de la presidencial.


Franco Parisi está, literalmente, contra el tiempo. De los cuatro candidatos con mayor intención de voto, el economista es el que tiene menor porcentaje de conocimiento: 61,3%. La cifra indica dos cosas: que aún tiene espacio para crecer, pero que tiene una carrera contrarreloj para llegar al público que no lo conoce.
Pese a que apela constantemente en sus intervenciones al mundo popular -su lema de campaña es “El poder de la gente”-, la fortaleza de Parisi está en los jóvenes y los sectores más educados. En el grupo de 18 a 29 años, el independiente tiene 15,2% de intención de voto entre posibles votantes, mientras en los grupos ABC1 y C2 tiene 13,7% y 12,7%. En tanto, entre los hombres obtiene el doble de votos que entre las mujeres (10,8% versus 4,5%), y entre quienes tienen estudios universitarios llega al 12,3%. De hecho, al desglosar esa cifra, el 4% de sus votantes tiene sólo educación básica, el 48% tiene educación media y el 48% tiene educación superior.
Entre sus puntos débiles, Parisi logra apenas 1,4% entre los mayores de 60 años; en los sectores más pobres (D y E) logra 4,0% y 2,7%, respectivamente, y en las zonas rurales alcanza el 4,5% de las preferencias.
En cuanto a temas valóricos, sus votantes están a medio camino entre liberales y conservadores: hay “empate técnico” -45,4% a 44,5%- sobre si se debe legalizar el aborto y respaldan el Acuerdo de Vida en Pareja (73,6%), pero rechazan el matrimonio homosexual (52,5% en contra) y la legalización de la marihuana (48,6% no está de acuerdo).
Al igual que en el caso de Bachelet, el 55,4% de los votantes de Parisi cree que avanza menos que el resto de los chilenos o que está retrocediendo. El 55,5%, por su parte, afirma que preferiría matricular a sus hijos en un colegio particular subvencionado. El 43,2% cree que la sociedad chilena cambió tras las movilizaciones estudiantiles de 2011, la cifra más alta de los cuatro candidatos.
Sus electores se reparten en caso de que Parisi no fuera candidato: el 20,2% afirma que votaría por la abanderada de la Alianza, el 21,7% lo haría por ME-O, y el 25% por Bachelet.



FICHA TÉCNICA: La encuesta Ichem-Universidad Autónoma se realizó en base a un universo de población urbana y rural de 18 años y más, residente en las 15 regiones del país, con una cobertura total en base al Censo de 2002. Se encuestó a 1.708 personas, que fueron entrevistadas en sus hogares, en cuatro tipos de territorios comunales: grandes urbes, urbes intermedias, comunas con centro urbano y  presencia rural y comunas rurales. Es una muestra probabilística en todas sus etapas, compuesta de conglomerado (para las manzanas), al interior de cada conglomerado selección al azar de viviendas dentro de ellos, y dentro de éstas selección al azar de personas. El error muestral se estima en ±2,35% considerando varianza máxima y un 95% de confianza. El instrumento fue un cuestionario estructurado con respuestas cerradas y aplicado en una entrevista cara a cara. La recolección de datos se efectuó entre los días 23 de agosto y 27 de septiembre del 2013, trabajo realizado por Iccom-Cadem. En los gráficos y tablas se presenta a los candidatos por orden alfabético.

La debilidad de la negación



Por Rubén Weinsteiner para El País

Toda negación implica una afirmación,  esto es Lacan.
Andá y decile a tu esposa: “tu amiga Claudia…, no me gusta” , “la verdad, que no me mueve ni un pelo”. A partir de ese momento,  tu esposa va a estar completamente segura  que te gusta mucho su amiga Claudia.
La funcionalidad de la negación en el discurso, es inversa en términos de sus objetivos a la intención del emisor.  Nadie que sea honesto debería decir  “no robé ”, sería como para alguien que no tiene ninguna cicatriz en la cara,  decir “yo no tengo ninguna cicatriz en la cara”. Si uno no tiene  el deseo de tener algo ni nada con Claudia, difícilmente habilite los senderos neurológicos que le hagan decir  algo relacionado con  “tener algo con Claudia”,  aún para negarlo, y eso las audiencias lo decodifican rápido,  aunque  no lo puedan poner en palabras y en emergencia,  y fundamentarlo.
Esta percepción no decodificada, no construye afirmaciones racionales con reproductibilidad, no es algo que las personas van a contar y repetir,  sino que genera  sensaciones y sentimientos que se van solidificando e interviniendo en los mecanismos de valoración y preferencias.
Desde ya que la afirmación no debería dejar ninguna duda, pero debería negar afirmando e intervenir en forma cenestésica en los públicos objetivo.
La reacción refleja,  siempre será negar, para  luego exponer elementos objetivos que desmientan la información que deseamos negar. Y esta secuencia plantea problemas complejos.
El primer problema que presenta la negación consiste en rebatir con una respuesta racional una instalación emocional que han “comprado” algunas personas. Una vez que la emocionalidad generada  se instala, corre por canales separados con la racionalidad.
El segundo problema consiste en la previsibilidad y obviedad, ya que  lo que se espera siempre es la negación, con lo cual la predisposición  del oyente es defensiva.  Ante la difusión de una noticia que señala que el ministro de defensa recibió una coima,  resulta obvio que el ministro no va a decir “es cierto recibí una coima”.
El tercer problema consiste en que cuando alguien tiene que negar un rumor o una información,  esa información ha generado  interés en la masa crítica, con lo cual el negador se convierte en un aguafiestas. La población se enteró que el ministro de economía participó de una orgía, a la gente le gusta imaginar difundir y viralizar el rumor, si viene el ministro a arruinar ese disfrute no será bien recibido, uno cree aquello en lo que quiere creer.
El cuarto problema de la negación radica en la asimetría de reproductibilidad de esa negación,  en relación a la información que se pretende negar. La cantidad de veces que se repite una información ponderada por la viralización boca a boca, 2.0 y la retroalimentación desde y hacia los medios tradicionales, es muy superior a la cantidad de veces que una persona puede negar algo.
La acción más eficaz para gestionar una acusación un rumor o una información negativa,  es la construcción de una imagen emocional positiva en la audiencia, que compita y derrote las construcciones cenestésicas generadas por la información original.
Si hay algo en lo que la información o el rumor refieren,   que tenga que ver con un error propio, resulta altamente eficaz admitirlo. Cuando alguien comienza un discurso admitiendo un problema o un error, el receptor baja la guardia y se consigue automáticamente crédito de ese receptor.
Resulta clave microsegmentar la reacción, porque las sensaciones construidas por la información original, difieren de acuerdo a los públicos donde está intervino.
Hace falta  destabicar y explicar el mecanismo por el cual se instaló el rumor, o se fraguó una falsa información, de manera clara, simple y didáctica, identificando los intereses que se movieron detrás de la operación, sin personalizar.
Resulta fundamental reaccionar rápido, el tiempo que pasa aumenta la tasa de reproductibilidad de la información y solidifica la emocionalidad que la información genera y el costo de revertir aumenta minuto a minuto como en un taxi.

Rubén Weinsteiner

Brasil votará economía, ruptura con aliados y nacionalismo 2.0

 
Un Brasil que disfruta de una tensa calma luego de las masivas manifestaciones de mediados del presente año, ya comienza a calentar los motores para el proceso electoral del 2014. En él se definirá la reelección o no de la actual presidenta Dilma Rousseff. Hasta las movilizaciones, la reelección era considerada poco menos que un trámite sencillo. No obstante, el impacto del descontento multiplicado por los medios de comunicación masiva y las cada vez más protagónicas redes sociales derivaron en una caída de la popularidad de la mandataria del 65 % al 30 %. Para luego volver a crecer a cifras entre 35 y 40 %.
Asimismo, en el frente económico, la devaluación del real fue muy fuerte hasta agosto, rondando un 20 % y se detuvo en los últimos meses por la masiva intervención del Banco Central. Para ello, se usaron 55 mil millones de dólares (un 15 % del total de reservas y una vez y media todas las reservas del Banco Central argentino, que están en 35 mil millones). La principal preocupación del Brasil es controlar su inflación, que llegó al 6,5 anual hace unos meses y que por acción de las autoridades monetarias cerraría el año en 5,82, con un estimado de 5,84 en el 2014. Décimas por abajo del techo del 6 % anual que el equipo económico de Lula y luego de Rousseff establecieron para contar con una economía sana y estable.
Esa prioridad afecta la tasa de crecimiento en el corto plazo (2,4 en 2013 y 2,2 el año que viene) pero aleja al Brasil de proyecciones de ajustes más fuertes como se esperan en otros países de la región que cuentan con tasa inflacionarias del 25 al 30 % como la Argentina y poco más del 40% en Venezuela. No obstante, esta ventaja de mediano y largo plazo tiene como contracara un nivel de crecimiento más que modesto de la economía brasileña en el electoral 2014.
A la agitación de las capas medias, creciente y fortalecidas en estos once años del PT en el poder, se le suman algunas novedades en el plano político partidario. La joven y carismática ex ministra de Medio Ambiente de Lula, Marina Silva, que ya rompiese en el pasado con el oficialismo y lo enfrentara en las elecciones del 2010 sacando un más que digno 20 % de los sufragios y quedando sólo por detrás de Rousseff y el opositor Serra, articuló una alianza con el PSB del hábil Eduardo Campos. Él mismo, ex ministro de Ciencia y Tecnología del primer gobierno de Lula y actual gobernador de Pernambuco. Antes de esta suma de fuerzas, las encuestas otorgaban un 35 % para la actual presidenta, Marina Silva con 16 %, Campos con 5 % y 11 % para el opositor gobernador Aecio Neves del PSDB. Según trascendió, Neves ha visto, paradójicamente, con buenos ojos el arreglo de la dupla Silva-Campos dado que en su opinión este escenario de mayor fragmentación de ex aliados del PT y un descenso de la popularidad de Rousseff mejoraría las posibilidades de la necesidad de una segunda vuelta electoral entre la mandataria y el opositor que se sitúe en un segundo puesto.
Neves parece percibir que la dupla presidencial de los ex oficialistas será con Campos encabezando. Pese a ello, de confirmarse una intención del voto en torno al 40% para la presidenta, sus posibilidades de ser reelecta serían más que importantes. De más está decir que la histórica visión de Brasil como un país “ballena” de movimientos lentos y previsibles ha quedado en cuestión este año, pero aún a años luz de los vaivenes tradicionales que viven sus vecinos hispanos. Otro factor, en este caso externo, ha venido a aportarle a la presidenta un buen tema de marketing electoral. Tal es el caso de la firme postura asumida ante la administración Obama por el caso de espionaje de la agencia de inteligencia de las comunicación NSA de los EEUU

Clivajes eficaces para la gestión de la marca política



Por Rubén Weinsteiner para EL PAÍS
Una de las dimensiones más importantes para la construcción de una marca política poderosa, es la arquitectura de un discurso de poder sólido,  en función de un clivaje eficaz.
El clivaje es la división traducida en competencia política,  que construye las singularidades y particularidades de un liderazgo, permitiendo plantearle a la sociedad en ese discurso de poder,  los cambios propuestos, construir el debate  y estructurar la competencia con los demás jugadores políticos.
El clivaje permite presentar lo que uno es, reforzado por lo que uno no es, simplificando en un esquema binario, si-no, blanco-negro,  un planteo  fácil de asumir, del tipo “de que lado estás” a los electores.
Organizar el debate y definir un clivaje
Plantear el eje divisorio, el clivaje,  es organizar el debate, y el que organiza el debate acumula poder. Los comentaristas, los que opinan y reaccionan sobre lo que hace el que organiza el debate y el clivaje, resignan poder. Gana el que instala, dirige y por lo tanto controla  el debate.
A lo largo de la historia, la construcción de los clivajes políticos viraron de la clivación por variables duras como religión, etnia o territorio a establecer clivajes por variables blandas.
Desde los históricos derecha-izquierda, conservadurismo-liberalismo en Estados Unidos o peronismo-antiperonismo, en la Argentina; a  la UCR desarrollando un clivaje en torno a institucionalidad-clientelismo, Carrió acerca de  transparencia-corrupción,  Macri; ineficiencia-gerentismo eficiente, el Kirchnerismo inclusión-exclusión (todos/as-pocos), el sujeto político agromediático modelo 2008 consolidado en la figura de Cobos en su momento: consenso-enfrentamiento. Otros probaron mano dura-garantismo, modernidad primer mundística-atraso (lo viejo), privado-estatal,  liberación o dependencia, etc.
Hay clivajes eficaces y otros que no lo son
En la toma de la iniciativa para la instalación del debate y en  el diseño eficaz  del clivaje reside la clave del éxito en la construcción y acumulación.
Desde el marco  investigativo llegamos a la conclusión que hay ejes que no han servido para construir poder y votos, como seguridad y corrupción y otros que si, como economía y formas. Seguridad y corrupción han sido altamente eficaces para construir malestar, pero no para construir votos.
La disposición y dirección del debate y el diseño, instalación y gestión de los clivajes son acciones que requieren abordajes  permanentes, creatividad, pensamiento disruptivo y una  persistente ruptura de límites.
Gana el que organiza sostiene y conduce el debate, en torno al clivaje más eficaz en un contexto de tiempo y espacio.
Rubén Weinsteiner

La web social, problema u oportunidad en la construcción de la agenda mediática


Por Rubén Weinsteiner para ELPAIS


Los medios de comunicación suelen transitar tres ejes de acción en términos de modificación de la realidad política.

a) la orientación del voto
b) la construcción de climas y opiniones
c) el armado de la agenda

Estamos en un momento de transición en lo que hace a los factores que determinan la agenda y el spin mediático, definido este a través de la orientación de la atención e interés público, la conformación de una escala de temas predominantes, la jerarquización de la relevancia de dichos temas y el entendimiento de los mecanismos de priorización y discriminación temática que manifiestan los individuos cada día, a cada hora.
Esto en la Web se ve muy claro analizando las búsquedas más populares en Google. Hoy a la mañana la gente quiere saber todos acerca de Britney Spears, a la tarde está detrás de Lindsay Lohan y mañana a la mañana Google explota detrás de información sobre Tiger Woods.
Hasta la explosión de la Web, si bien la TV y la radio eran los medios más consumidos, y la lectura de diarios en papel se encontraba en franco retroceso, la prensa escrita mantenía el monopolio de la capacidad de instalar los temas, que durante el día se ampliarían y reciclarían por la radio y la TV. La TV aún con toda la importancia que cobró en los 90 con la explosión del cable, era más importante en la exhibición visual de los hechos y en la circulación de determinados argumentos, que en la instalación de noticias o temáticas nuevas.

Con la explosión de la Web, el diario impreso a las 11 am ya empezó a quedar viejo, pero seguía reteniendo el poder de instalar los temas. Una investigación que nada tenía que ver con lo que venía pasando, se instalaba causal o naturalmente en las radios, en la TV, y en la Web 1.0.
Hoy el diario impreso sigue reteniendo el poder de instalar temas, pero la Web 2.0 instala climas, viraliza rumores, chistes, ponderación de verdad de las noticias, factores constitutivos de los estados de ánimo y climas emocionales.

La reproductibilidad que brinda You Tube, la facilidad para viralizar enviando un link, la masividad del e-mail, las redes sociales, el microblogging y la velocidad de los mensajeros, determinan un escenario donde la web 2.0 no puede imponer todavía la agenda pero la puede condicionar fuertemente, recontextualizar y resignificar, al grado de destruir lo planteado desde el diario impreso, potenciarlo, o darle otra dirección al spin mediático.
El proceso de recontextualización y resignificación, ocurre porque la Web 2.0 es conversación, de a dos de a millones, pero conversación, y cuando uno conversa, no es como estar declamando desde la tribuna o detrás de las cámaras, sino que uno habla a la altura de los ojos, sin impostar, pero en realidad está siendo escuchado-leído por millones, y esa conversación es “desgrabada” y dejada al alcance de cualquiera vía Google para siempre.

La Web 2.0 le impone al político sus reglas nuevas y disruptivas, y a la vez le permite entrar en el eje de la mirada que vincula a lo público con la cotidianeidad, lo coloquial, un lenguaje más descontracturado, con un intercambio de información que se puede hacer en un bar, en una casa, pero no en la TV o en la Radio.
Un político en la Web 2.0 puede entrar en el circuito de confiabilidad y credibilidad de la gente. Por eso en la Web 2.0 el político habla de otra manera, tira data más sensible, opina, adjetiva, habla desde el ring side, desde el llano, manifiesta gestos de familiaridad, llama a la gente por su nombre de pila, como si fueran amigos, y hasta le está permitido como a todos en el llano, “zarparse” de vez en cuando.

La Web 2.0 es conversación, construcción, armado, por eso tanto el “hablarles” como el “escucharlos” constituyen alternativas parciales, que no definen el dispositivo 2.0. Acá no se trata de hablar desde una tribuna que llega a millones o de escuchar a millones, sino de construir un vínculo de compromiso horizontal y simétricamente condicionado con millones. Por eso la Web 2.0 es una gran oportunidad, pero sin estrategia puede ser un problema. Problema u oportunidad esa es la elección hoy.

La Web 2.0 es una herramienta fantástica para desintermediar. Cuando los medios que dominan la agenda establecen un filtro a todo lo que pasa, se puede llegar a la gente saltando por arriba de ese filtro, destabicando la construcción de los medios, y estableciendo canales que en tiempo real, pueden generar flujos de información sólidos y potentes, que cada día más, van a condicionar la agenda.

Los públicos en la web social


Rubén Weinsteiner para Newsweek

La revolución que produjo la transición de la Web 1.0 a la Web 2.0 estableció el cambio de paradigma del brodcasting al pullcasting, es decir, se pasó de la emisión por parte de los medios, de un mensaje, un programa, una propuesta comunicacional, lo que llamamos brodcasting, a la acción por parte del público de “tirar”, hacer pullcasting, armarse su propio recorte, su programa, a través de las alertas en los buscadores, la sintonía fina de estos, You Tube, la microsegmentación en la oferta informativa, los blogs, los canales en las redes sociales, las búsquedas en Twitter.

En la transición de la Web 2.0 a la Web 3.0, la Web semántica, el cambio pasa por la modificación de la conducta del público de visitar sitios para encontrar información, a tener la expectativa que esa información específica, ya no la general de la web 1.0 o la de medios como la Televisión, llegue a ellos. Esta es parte de la revolución de la Web social semántica.

Las personas como prosumidores, productores y consumidores de información, incorporaron la Web 2.0, y construyeron a través del tiempo sus propios canales customizados de provisión de información, desde donde reciben y donde también producen información, y ahora esperan que esos canales sean las autopistas a través de las cuales les llegue la información específica que les interesa.

Las preguntas que nos tenemos que hacer como jugadores en general, marcas corporativas o políticas, medios, etc son:

a) ¿A quien queremos llegar?
b) ¿Dónde buscan estas personas información?
c) ¿Que diferencial podemos establecer en términos de la generación de relato y contenidos?
d)¿Cuales son los criterios de dominio, de los contenidos en las agendas de los diferentes canales?

Con las respuestas a estas preguntas podemos diseñar una estrategia de comunicación eficaz apoyada en la construcción de una propuesta de valor que este a la altura de las expectativas del público, establezca un diferencial claro con respecto a los otros emisores y construya poder de fuego específico para colonizar subjetividades.

El publico 2.0 es inteligente, busca propuestas de valor, las acciones de alta visibilidad sin contenido, no solo que no lo impactan sino que lo llevan a tomar medidas. El publico 2.0 adopta canales a través de los cuales recibe las propuestas de valor, cuando un canal lo defrauda, lo percibe como de bajo nivel o vacío y lo saca de su menú cognitivo, por ineficacia y porque el bajo nivel de ese canal habla de él en términos aspiracionales, es lo que consume.

El líder republicano advierte que “esto no es un juego” y que no habrá marcha atrás

“Esto no es un maldito juego”, ha salido a decir este viernes, con gesto de ira, John Boehner, el presidente de la Cámara de Representantes y máxima autoridad republicana en el Capitolio, para desmentir rumores de que estaba considerando ceder y darle a la Casa Blanca el presupuesto que reclama. Lejos de eso, miembros de la oposición aseguran que su líder les ha comunicado que esto es “una batalla épica” en la que “no habrá marcha atrás”.
Todo sigue igual en Washington, quizá algo peor. En el Congreso no hay movimiento. Lo que se observa, si acaso, es un mayor distanciamiento. En el cuarto día del cierre de la administración federal, la inactividad en la capital de la nación es aún más visible. Los pequeños negocios empiezan a resentirse. La ciudad ofrece un deprimente aspecto de desolación. Barack Obama ha salido a pasear un rato por el centro y comer un sándwich para tratar de compensar ese vacío. Aprovechó para decir que no va a negociar “con una pistola apuntando a la sien del pueblo norteamericano”.
El daño económico se hace más evidente, sobre todo para las personas que han sido cesadas en sus trabajos, los bonos del Tesoro se empiezan a resentir en el mercado
Los republicanos insisten en hay que sentarse a hablar. Los demócratas y Obama les contestan que lo harán solo cuando aprueben la extensión presupuestaria que tienen bloqueada. Los republicanos confían en que el público castigará esa resistencia de sus rivales al diálogo y les obligará a hacer concesiones. Los demócratas creen que los ciudadanos culpan al otro bando por esta crisis y es solo cuestión de esperar a que esa presión se les haga irresistible.
Mientras tanto, el daño económico se hace más evidente, sobre todo para las personas que han sido cesadas en sus trabajos, los bonos del Tesoro se empiezan a resentir en el mercado, las dudas sobre la solvencia política de la mayor potencia mundial se acrecientan y el riesgo, que hasta ahora parecía menor, de una suspensión de pagos empieza a hacerse más real.
Ya se sabe que, en todas las negociaciones, hay que esperar a que las cosas se pongan muy mal para que empiecen a ponerse bien. Cada bando explota al máximo las debilidades del contrario antes de hacer las primeras concesiones. Podría ocurrir también en este caso. Hay que recordar que EE UU estuvo ya en 2011 al borde de la suspensión de pagos y se encontró una solución en el último instante. En aquella ocasión, el conflicto se produjo sobre qué recortes del gasto público estaba dispuesto a hacer Obama a cambio del levantamiento del techo de deuda.
Hay que recordar que EE UU estuvo ya en 2011 al borde de la suspensión de pagos y se encontró una solución en el último instante
Como en esta ocasión, aquello era un chantaje: no cumplo con un trámite al que estoy obligado constitucionalmente si no me das algo a cambio. Como le ha dicho por carta el líder demócrata en el Senado, Harry Reid, a Boehner, es como si los demócratas le hubieron dicho a George W. Bush: no elevamos el techo de deuda si no se detiene la guerra de Irak.
La diferencia de la crisis actual es que el margen de la negociación es mucho más estrecho, en realidad, nulo. En 2011, aunque Obama también denunció el chantaje, podía, y finalmente pudo, darle a los republicanos algunos de los recortes de gastos que pedían. La solución fue mala y provisional, como el tiempo demostraría, pero se evitó la catástrofe.
Esta vez, lo que piden los republicanos es la reforma sanitaria de Obama, al completo o parcialmente, una ley que es el emblema de su presidencia y, probablemente, la razón principal por la que será recordado en la historia. Es un precio demasiado alto que el presidente no puede pagar sin infligir un daño descomunal a su prestigio y a su gestión.
Pero Boehner insiste en que esta crisis no se va a resolver si Obama no cede, aunque sea un poco, con esa reforma. “Le recordé al presidente la otra noche –estuvieron reunidos en la Casa Blanca el miércoles- que el es famoso por decir que, en toda negociación, nadie consigue el 100%. Pues bien, no lo va a conseguir tampoco esta vez”, advirtió el presidente de la Cámara de Representantes.

Hacia una comprensión más profunda de nuestra naturaleza política

 Avi Tuschman

Estamos atravesando momentos históricos que provocan desencuentros y divisiones. Nuestro panorama político, social, y económico continúa fracturándose cada vez más, y un gran abismo parece separar a las personas de la derecha de aquellas de la izquierda. De la misma manera, mucha gente se encuentra confundida y preocupada por las agitaciones y turbulencias políticas en lugares como Siria, Egipto, Corea del Norte, e Irán. Necesitamos encontrar alguna manera de comprender estos problemas a un nivel mucho más profundo y objetivo.
Hay tres cuestiones que son absolutamente fundamentales para poder entender el futuro de nuestro país y el mundo: ¿Cuáles son las causas primordiales de nuestra debilitante división izquierda-derecha? ¿De dónde se originan realmente nuestras orientaciones políticas? ¿Y cómo podemos predecir la erupción de la inestabilidad política en lugares claves del mundo? Los comentaristas de hoy opinan que nuestro comportamiento político proviene de nuestros puntos de vista sobre asuntos de actualidad, o de nuestra situación económica, o de nuestra eterna lealtad a este partido político o el otro.
Pero esto es incorrecto, o al menos incompleto. Llevo los últimos diez años investigando el gran rompecabezas que es la orientación política, tanto durante mi carrera como asesor de jefes de estado en la formación de la opinión pública, al igual que en mis investigaciones de doctorado en antropología evolutiva en la Universidad de Stanford. En esta larga trayectoria, he reunido decenas de hallazgos vanguardistas de campos como la neurociencia, la primatología, y la genética, y todos ellos me llevan a la siguiente conclusión reveladora: nuestras orientaciones políticas no son solamente construcciones intelectuales que provienen de nuestra crianza, educación, afiliaciones sociales, o preferencia de periódicos; más bien, nuestras orientaciones políticas son predisposiciones naturales profundamente arraigadas, y moldeadas dentro de cada uno de nosotros por poderosas fuerzas evolutivas.
El fundamento de esta conclusión proviene de algunas fuentes sorprendentes. Por ejemplo, resulta que gemelos que fueron separados al nacer y criados en ambientes muy distintos, sin embargo crecen a compartir de adultos actitudes políticas extraordinariamente parecidas. Así mismo, aproximadamente la mitad de la variación en nuestras actitudes políticas proviene de diferencias genéticas entre individuos. Los neurocientíficos también han descubierto interesantes diferencias fisiológicas asociadas con nuestras preferencias políticas. En el año 2010, por ejemplo, el catedrático Geraint Rees de la University College en Londres descubrió que los encefalogramas pueden predecir correctamente si una persona tiene una tendencia muy liberal o conservadora – por lo menos con una precisión del 72 por ciento.
Fascinantes descubrimientos transculturales sobre la opinión pública también han comenzado a aparecer. Contrario a la creencia popular, nuestra división polarizada izquierda-derecha no es única; en realidad, similares espectros políticos existen en casi todos los países. Ellos tienden a ensancharse bajo estrés económico, pero esencialmente su estructura continúa presente. Es por eso que muchos asuntos controversiales – como el matrimonio entre homosexuales – invariablemente polarizan espectros políticos en todo lugar de la misma manera. En grandes grupos, la orientación política izquierda-derecha es distribuida en una curva natural, en forma de campana. A pesar de que la mayoría de la variación en personalidades políticas ocurre dentro de los grupos, el promedio de los rasgos de personalidad de una población se desplaza ligeramente hacia la izquierda o derecha en función a la patria de sus ancestros.
Resulta que hasta nuestros parientes más cercanos, los chimpancés, tienen personalidades políticas, un tanto rudimentarias, pero que son significativamente similares a las nuestras. Los chimpancés son los únicos animales que comparten todas las cinco dimensiones generales de nuestra personalidad, incluyendo las dos dimensiones que se correlacionan bien con la votación izquierda-derecha. Igual que nosotros los humanos, los chimpancés muestran una gran variación en Openness (apertura a nuevas experiencias) y Conscientiousness (responsabilidad), que en los humanos son asociadas con el ser políticamente liberal o conservador.
¿Pero qué significa todo esto?
Muy pocos de los estudios que podrían ayudar a explicar estos hechos han infiltrando de las revistas académicas a los medios de comunicación. De hecho, la mayoría de los descubrimientos aún no han cruzado ni siquiera las fronteras disciplinarias tradicionales de la academia. Así que me sentí obligado a escribir Our Political Nature: The Evolutionary Origins of What Divides Us (Nuestra naturaleza política: los orígenes evolutivos de lo que nos divide) , como un primer esfuerzo de unir y asimilar estas diversas investigaciones en una sola explicación bien documentada de las fundaciones biológicas de nuestros más profundos valores. Mi objetivo, en definitiva, ha sido el de pintar un retrato esclarecedor y preciso de nuestra naturaleza como animales políticos.
Como demuestro en el libro, las orientaciones políticas a través del espacio y el tiempo emergen de tres grupos de rasgos de personalidad medibles. Los tres grupos giran en torno a actitudes hacia el tribalismo, la desigualdad, y distintas percepciones de la naturaleza humana. Estos rasgos son, además, la más poderosa causa de la votación izquierda-derecha, e incluso dirigen a muchas personas a votar en contra de sus intereses económicos. Nuestras personalidades políticas también forman nuestra elección de pareja e influyen los grandes patrones reproductivos de nuestra sociedad. Tal vez más importante aún, el libro cuenta la historia natural de estos rasgos de personalidad, que surgen de conflictos biológicos épicos.
La ciencia fundamental aquí es compleja y muchas veces retadora. No obstante, he hecho todo lo posible para convertir este material en una intensa y entretenida expedición a través de los mundos de los cazadores-recolectores, los genes egoístas y generosos, y hasta de los virus. Además, para hacer este libro atractivo a una amplia gama de lectores, he usado historias periodísticas y personalidades actuales para ilustrar conceptos claves. Por ejemplo, los lectores conocerán de cerca a Glenn Beck y a Hugo Chávez, y llegarán a comprender las fuerzas ocultas que representan.
Si bien este libro cubre temas extremadamente controvertidos, mi intención no es tomar partido; sino iluminar. Desafortunadamente, los estudios nos muestran que altos niveles de educación e interés por la política tienen un efecto polarizador en las personas. Esta polarización ocurre debido a que cuando la gente absorbe más y más información sobre los acontecimientos políticos, se vuelve cada vez más eficiente en organizarla en ideologías coherentes, que se basan típicamente en sus predisposiciones. Sin embargo, la mayoría de la gente no ha tenido la oportunidad de dar un paso atrás para contemplar la lógica evolutiva de la propia orientación política. Hay un fenómeno maravilloso aquí: cuando la gente retrocede un paso atrás, se abre a un entendimiento más profundo, a la moderación política y, últimamente, a mayor tranquilidad de espíritu.
Es mi mayor esperanza que este libro logre avanzar este proceso. Con corazones quietos y entendimientos más profundos, tal vez podamos elevar el nivel de nuestro discurso político, y fortalecer nuestras nobles instituciones democráticas.

*Avi Tuschman (Washington, DC) es el autor de Our Political Nature: The Evolutionary Origins of What Divides Us (Nuestra naturaleza política: los orígenes evolutivos de lo que nos divide). Comenzó su carrera política como el asesor más joven en el Palacio de Gobierno en Lima, Perú, a la edad de 23 años. Tuschman tiene un doctorado en antropología evolutiva de la Universidad de Stanford.

Murió Giap

Falleció el  General Giap


giap_28_06_091El general Vo Nguyen Giap, figura central de la victoria de la guerra de Vietnam, murió a los 102 años, según informaron hoy fuentes militares y familiares.
El general falleció por causas naturales en el Hospital Militar 108 de Hanoi, informó una fuente militar del centro.
“Murió por su avanzada edad, no debido a ninguna enfermedad”, aseguró la fuente, en condición de anonimato.
Giap estuvo además en batallas significativas contra Estados Unidos como la ofensiva del Tet en 1968.
Estados Unidos envió miles de soldados para reforzar a los 60.000 asesores que ya servían en Vietnam del Sur, llegando a superar el medio millón en 1969. Los norteamericanos se desplegaron principalmente en los alrededores de Saigón, en la base de Đà Nẵng, en la Zona Desmilitarizada y las Tierras Altas Centrales, a la vez que bombardeaban Vietnam del Norte.
Giáp organizó la defensa del Norte al mismo tiempo que dirigía las operaciones en el Sur contra los ejércitos sudvietnamita y norteamericano. Cuando los estadounidenses lograron cortar los suministros enviados por mar amplió la Ruta Ho Chi Minh.
Como en la lucha contra los franceses, el general probó el enfrentamiento directo con el Ejército de los Estados Unidos y también cosechó una seria derrota durante la Batalla del valle de Ia Drang.12 Sin embargo, supo aprender del error y desde entonces trató de rehuir el combate directo de grandes formaciones contra la potencia de fuego norteamericana, al mismo tiempo que acumuló hombres y armas durante dos años para lanzar una gran ofensiva.7
En 1968 realizó dos de sus acciones más controvertidas y según sus enemigos, dañinas para sus fuerzas. El Sitio de Khe Sanh y la Ofensiva del Tet, ambos supuestos fracasos. Sin embargo Giáp consiguió convertir la derrota militar de la Ofensiva en un éxito político, al demostrar a los norteamericanos que todas sus victorias y sus dos años de participación en el conflicto no habían debilitado a los comunistas, a la vez que les mostraba que se enfrentaban a una guerra interminable. Tanto es así, que unos meses después Giáp lanzó la llamada Ofensiva del Mini Tet.7
En 1972 Giáp organizó la llamada Ofensiva de Pascua con la esperanza del que el ARNV se desmoronara. Aunque en algunos casos así fue, en otros las tropas del Sur aguantaron como una roca, la presidencia de Saigón cambió a parte de la corrupta cúpula militar por oficiales competentes y los aviones y barcos de Estados Unidos detuvieron el avance en los momento más álgido. Por otra parte Giáp no supo utilizar los numerosos carros de combate para lograr un avance sistemático y terminó perdiéndolos ante el fuego enemigo. Tampoco pensó en concentrar sus fuerzas sobre un punto para partir Vietnam del Sur en dos, lo que le hubiera concedido un gran ventaja o incluso la victoria7 anticipada.
Después de la aparente derrota militar, pese a lograr una clara mejora en la posición estratégica, la persona del ministro de Defensa pareció perder autoridad. Poco se sabe de las reacciones dentro del Politburó norvietnamita ni si la derrota de Pascua fue una causa o no; pero después de 1972 la figura de Giáp comenzó a quedar eclipsada por la de su protegido, el general Van Tien Dung, quien comandó la Ofensiva de Primavera de 55 días de duración y la toma de Saigón el 30 de abril de 1975.

Si bien a Ho Chi Minh se le atribuye el mérito ideológico de sus victorias contra japoneses, franceses y estadounidenses, de Giáp es el mérito militar con ejemplos como:
  • La estrategia de guerra prolongada desplegada frente a un enemigo muy poderoso16 (en forma similar a Mao).
  • La concepción y práctica de combinar el despliegue de las fuerzas políticas de masas con las fuerzas militares17 y la transformación de unas en otras; así como la combinación de fuerzas armadas locales y regionales, con el ejército; de las guerrillas y milicias locales, con las tropas regulares; de la guerra de guerrillas con las insurrecciones urbanas; de la guerra de movimientos y de posiciones, con insurrecciones generales (como la de agosto de 1945 contra los japoneses 18 y las de la primavera de 1975 contra el gobierno Thieu, instalado por Estados Unidos19 ); de la guerra campesina con la política obrera; y de la guerra de liberación nacional, con la lucha social por la tierra20 y el socialismo.
  • La transformación del Viet Minh de una fuerza guerrillera en un ejército capaz de medirse con la famosa Legión Extranjera y tomar cualquier posición pese a fuertes bajas.21
  • La vuelta a la guerrilla cuando era necesario, reconvirtiendo al EVN en una fuerza casi irregular de la que se ha dicho que tratar de inmovilizar al Ejército de Vietnam del Norte era como intentar sacar sangre de una piedra.7
  • La motivación tan grande que lograba imprimirle a sus soldados, valga el ejemplo de los tatuajes en el pecho de muchos de ellos con la frase nací en el Norte para morir en el Sur.7
  • La adaptación de las células guerrilleras a 3 hombres que se apoyaban y se daban ánimos mutuamente.22
  • Su modo de vida, relativamente sencillo, que transmitía a sus oficiales y que hacía que los soldados aguantasen mejor las penalidades de la Ruta Ho Chi Minh o la vida en los túneles. Muy alejado de los ostentosos y corruptos modos de muchos oficiales survietnamitas.7
  • Su método de lucha, se convirtió en fuente de inspiración para muchos o todos los movimientos guerrilleros de los años 70 y 80 como el Frente Polisario en el Sáhara Occidental contra Marruecos,23 aunque muy pocos de ellos han lograron los éxitos obtenidos por el general vietnamita.

Hay que vender sensaciones asociadas a la gestión


Por Rubén Weinsteiner
para El País


No tenemos que vender gestión, tenemos que vender sensaciones. No tenemos que comunicar una ruta, sino las sensaciones, las mejoras en la vida de las personas que construye esa ruta. Porque el posicionamiento de la gestión o de un dirigente se construye en la cabeza de la gente, allí donde las sensaciones construyen sentido.

Las decisiones que toma un político, con las que la gente puede identificarse, traducidas en la emocionalidad estructural de la Web 2.0, y en la arquitectura de un discurso como el de Twitter, impulsivo, vertiginoso y visceral, disparan significados y sensaciones que con una estrategia determinada deben lograr posicionamientos específicos en la mente de las personas, para generar una satisfacción simbólica en las personas.
Esas sensaciones se construyen a partir de una simbología y una ritualidad, que dan sentido y contexto a los hechos políticos y los traducen en sensaciones.
Estos hechos no deberían ser explicados para alcanzar mayor poder de fuego, deberían poder ser decodificados por las personas sin construcción de meta relato por parte de la gestión.
La Web 2.0 presenta como atributos específicos
a) Velocidad de distribución,
b) Viralidad en la réplica y redistribución
c) Potencia de reproductibilidad de esos sentimientos
Una de las cosas que habilita la web 2.0 es apuntarle a 1000 líderes de opinión en lugar de molestar a 5 millones de personas, pero ese impacto en los líderes debe incluir e incorporar las sensaciones a comunicar para reproducir la emoción en la palanca de transmisión que encarna el líder de opinión.

Rubén Weinsteiner

Funcionalidad electoral de una oferta superadora del PRO en CABA



L

La persistencia del PRO como alternativa electoral mayoritaria en la CABA, debe hacer reflexionar a quienes lo adversan más allá de la impotente visión estigmática hacia el electorado porteño.



La oferta opositora deberá desplegar una nueva oferta en la CABA que de cuenta de las transformaciones porteñas acontecidas en la post crisis, incluyendo las promovidas por el mismo PRO.
La eficacia electoral requiere un armado que responda a una cultura política post macrista, nunca a una anterior, cuyo esplendor aconteció recién entrado el último cuarto del siglo pasado. La vida siempre fue así y le tiren con lo que le tiren las fuerzas políticas tradicionales, el PRO absorverá el impacto.
En fin, para intentar una aproximación a la comprensión del modelo de gestión PRO, leemos parte de la interesante ponencia de Palombi y Cravino(*)

El macrismo ¿neoliberal?: Política Urbana en el Sur de la CABA

La caracterización conceptual de Macrismo ... posee su fundamento en la política concreta que la gestión implementa en cada uno de los barrios pertenecientes al sur de la ciudad. Podríamos afirmar que su política general hacia dicha área se encuentra en relación con las especificidades de la misma. 

A la vez, pareciera que los distintos funcionarios del PRO, en sus varias facciones, constituyen una variable que se encuentra en estrecha relación con el sentido de las políticas de desarrollo urbano y hábitat. De esta manera, estas acciones son abordadas por dependencias tan distintas como los ministerios de Espacio Público, Desarrollo Urbano, Desarrollo Económico, Desarrollo Social y la Corporación Buenos Aires Sur, cuestión que redunda en políticas diversas, hasta contradictorias, que poseen el denominador común de que son respuestas contingentes a territorios que poseen distintas sociabilidades y jerarquías urbanas. También expresas las pujas de las facciones políticas dentro del Macrismo y la correlación de fuerzas en los diversos territorios.

De acuerdo a estos criterios, podemos entender la política hacia cada una de las comunas y/o de los barrios de la siguiente manera:

1) Políticas de recualificación y renovación urbana: éstas se desarrollan en los barrios de la ciudad que poseen una cantidad importante inmuebles recuperables o reutilizables (La Boca, Barracas, San Telmo, Balvanera, Parque Patricios y Pompeya). Dentro de esta zona podemos encontrar un sector cercano al centro de la ciudad, en el cual se busca promover el desarrollo de oficinas y viviendas pertenecientes a nuevos sectores de clase media (Barracas y La Boca). En el caso particular de La Boca, el impulso a la recualificación de sectores residenciales se encuentra mixturado con la implantación del “distrito de las artes” (por ejemplo, la recientemente inaugurada Usina de las Artes) y algunas obras de mejoramiento, como la puesta en valor de la calle Necochea y todo el entorno cercano a la Ribera, que implica el intento de consolidar una zona turística – artística (cualidades que se retroalimentan). Vale aclarar que el barrio de La Boca, Junto al de San Telmo, ya había sido objeto de políticas en el mismo sentido, algunas de ellas fracasadas.

Respecto a Barracas, allí se intenta construir el "distrito gubernamental" (dentro de la propuesta más amplia que denominan “Centro Cívico”), que implicaría el traslado de las dependencias del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires a este barrio. La iniciativa posee resistencia de diversos actores sociales, dado que está planificado construirlo sobre terrenos pertenecientes al Hospital Neurospiquiatrico José Borda, sin haberse explicitado de parte del Gobierno de la Ciudad cual será el destino del mismo y de sus pacientes. Además, la iniciativa viola el código de planeamiento urbano y diversas normativas de protección histórica. En este espacio, se han realizado numerosas obras de mejoramiento del entorno urbano de distrito gubernamental, como ser el arreglo de veredas, la construcción de bulevares y distintas obras orientadas hacia el espacio público. Claramente, la intensión de la política es consolidar una zona de oficinas y viviendas donde se asiente una clase media joven que valore la cercanía a las centralidades. Es ineludible el impacto favorable al desarrollo inmobiliario privado que generaría en una zona actualmente devaluada y/degradada.

Por otra parte, en Parque Patricios y un sector de Pompeya, la gestión ha diseñado el llamado “distrito tecnológico”. Esta iniciativa promueve la instalación de empresas del rubro, brindando rebajas impositivas y realizando obras de mejoramiento del entorno. Además, los empleados que trabajen en las empresas y se muden al barrio poseen líneas de crédito diferenciales y se encuentran exentos de pagar el impuesto municipal por 10 años. Esta cuestión se encuentra complementada con la puesta en funcionamiento de nuevas estanciones estaciones de subterráneo y el mejoramiento del Parque Patricios. Nótese que dentro de esta misma zona también existen algunas barrios que poseen políticas mayormente orientadas a garantizar ciertos niveles de gobernabilidad, como el caso de la Villa 21-24, uno de los barrios informales más grandes y antiguos de la ciudad.

2) Política de grandes equipamientos urbanos: estas políticas se localizan en la zona de Villa Soldati y Villa Riachuelo. Es un plan en formación que se basa en la readecuación de un proyecto desarrollado durante la última dictadura militar (1976-1983). Estas acciones se planifican en una porción significativa de suelo vacante que existe en la ciudad en la zona sur y se orientan a propiciar un uso recreativo y turístico. Los proyectos que se incluyen en el mismo son la readecuación del Microestadio del Parque Roca y del denominado Parque de la Ciudad para el Festival Rock in Rio, la construcción de una terminal de ómnibus y un centro de transferencia de cargas.

3) Política de gobernabilidad: estas políticas se llevan adelante en territorios en condición de vulnerabilidad, principalmente en los barrios en los que se encuentran la mayor parte de las villas de la ciudad como la 1-11-14, 20, 3, 15, 6, Piletones, Calaza, Calacita y 19. Aquí encontramos diversos modos de abordaje de la cuestión durante el desarrollo de la gestión macrista. En estos barrios podemos diferenciar dos líneas diversas, aunque complementarias. Por un lado, encontramos una serie de intervenciones que se caracterizan por obras de desarrollo de espacios públicos y comunitarios, mejoramiento de servicios, remodelación de fachadas y atención de emergencias. Estas políticas se comenzaron a desarrollar a partir del 2009 con la Unidad de Gestión de Intervención Social (UGIS), mediante el armado de cooperativas con vecinos de los propios barrios como una manera de articular una red social y política que logre garantizar un piso de gobernabilidad en estos territorios y captación de votos. A partir del año 2012, esta política convive con la desarrollada por la Secretaría de hábitat e inclusión, en particular, la experiencia de los “portales de inclusión” (desarrollo de espacios públicos orientados a lo deportivo y el desarrollo de microemprendimientos). Estas intervenciones se implementaron en asentamientos de gran escala o complejidad como la villa 1-11-14 (Bajo Flores), villa 20, aunque también se desarrollaron en otros de menor escala como la Villa 6 (Cildañez). No obstante su alta visibilidad, es claro su bajo impacto en lugares de tan alta concentración de población.

Por otra parte, existen algunas intervenciones acotadas en asentamientos de menor escala, como la Villa 19, 17 y 6, tendientes a la concreción de una forma de reurbanización de los barrios mediante la apertura de calles, la construcción del algunas viviendas y la regularización dominial del suelo aplicando espuriamente la ley de propiedad horizontal, sin intervención en la calidad de la vivienda. Estas acciones tienen una escala ínfima pero se busca ampliarla en el futuro.

También, existen algunas políticas desarrolladas como respuesta a distintas sentencias judiciales como el caso de Villa Cartón y la llamada “causa Mendoza”, relacionada fundamentalmente con la relocalización de hogares que viven dentro del camino de Sirga del Riachuelo. Si bien el cumplimiento de las sentencias poseen una cantidad importante de retraso y diversas complicaciones (finales de obras deficientes, construcción de conjuntos de viviendas en terrenos presuntamente contaminados, etc.), el Gobierno de la Ciudad debe construir una importante cantidad de viviendas llave en mano en la zona sur, teniendo que superar la parálisis prácticamente absoluta de ejecución del presupuesto en este rubro. Menos avance tuvo la ejecución de políticas ambientales incluidas en el fallo judicial sobre el Riachuelo.

4) Políticas de “zonas fronterizas”: como afirmamos anteriormente, la política desarrollada por la gestión Macri se encuentra particularmente articulada con las sociabilidades y jerarquías urbanas propias de cada uno de los territorios. Estas acciones se desarrollan en zonas que constituyen el último eslabón de la ciudad formal, fundamentalmente conjuntos habitacionales construidos desde hace décadas por el Estado y viviendas construidas por el mercado. Creemos que este tipo de políticas emergieron centralmente como respuesta al conflicto del Parque Indoamericano durante el mes de diciembre de 2010 como una forma de articular un mecanismo no necesariamente coercitivo que logre garantizar gobernabilidad. La ocupación de este parque fue generada por inquilinos de las distintas villas de la ciudad y algunos conjuntos habitacionales deteriorados y hacinados, donde la respuesta del Gobierno de la ciudad fue el desalojo violento del mismo, generándose la muerte de tres personas. Nos estamos refieriendo a los barrios Nágera, Samore, Copello, Juan XXI, Villa Lugano(conjuntos habitacionales construidos por el Estado), Flores sur y ciertas partes de Parque Chacabuco.

Algunas de obras de magnitud que se desarrollan en estos territorios son la puesta en valor y readecuación de la zona de la ex – Plaza de los Virreyes (rebautizada como Plaza Tupac Amaru) y menor medida del Parque Indoamericano, la política selectiva de mejoramiento y maquillaje urbano de conjuntos habitacionales como Piedrabuena y Castex y la inversión mobiliario urbano en algunos centros comerciales a cielo abierto.

Más recientemente emergen intervenciones en el transporte público, centradas en el desarrollo de lo que denominan “Metrobús” (carriles exclusivos para autobuses con estaciones de pasajeros), inaugurando en agosto de este año el “Metrobús Sur”, enmarcado en una política de maquillaje urbano, que da visibilidad y cambia la estética del espacio público, ya que los autobuses son los mismos que se utilizaban anteriormente y no hay gran cambio en el tiempo de viaje, ni en los recorridos. Consideramos que, a la vez, les permite expresar una política de transporte homogénea en toda la ciudad.

Palabras finales

Luego del análisis de las iniciativas y prácticas realizadas por el Macrismo en la zona sur de la ciudad, podemos sostener que esta gestión desarrolla una política neoliberal de ciudad pero combinada de manera funcional con proyectos de mejoramiento del espacio público en zonas de sectores populares. Sostenemos que es funcional porque permite correrse de la imagen de programa neoliberal, garantizando gobernabilidad y voto para la ciudad de los negocios.

En síntesis, se busca la recualificación de algunos sectores apetecibles para los inversores privados e intervenciones superficiales en otros. Las acciones desarrolladas en barrios populares se centran en una política de maquillaje urbano que busca cambiar sólo aspectos estéticos de estos espacios, no modificando su condición de barrios estigmatizados, su altísimo hacinamiento y las precarias condiciones habitacionales y de infraestructura básica.

En cambio en la zona norte se continúa promoviendo el desarrollo urbano inmobiliario privado, es decir, acciones en los espacios privados bajo la lógica de los negocios. Inclusive, el Estado ha subastado tierra pública para la construcción de vivienda de lujo.

Afirmamos que estamos en los umbrales de una nueva etapa de despliegue de la política urbana del Macrismo en la Ciudad, donde la implementación de obras de importante magnitud en el sur de la ciudad, la articulación de una red territorial política propia dentro de los sectores populares y la consolidación de cuadros técnicos y políticos con mayor capacidad de gestión son elementos que pueden ayudar a llevar adelante grandes transformaciones que significarán una consolidación de este modelo de ciudad.

PD (*)
Ariel Matías Palombi. Licenciado en Sociología. Doctorando en Ciencias Sociales (UBA) Becario ANCYT. Instituto del Conurbano (ICO) Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS) arielpalombi@hotmail.com
María Cristina Cravino. Doctora en Ciencias Sociales. Investigadora CONICET con sede en Instituto del Conurbano (ICO) Universidad Nacional de General Sarmiento (UNGS). Mariacristinacravino@yahoo.com.ar

De la comunicación 2.0 a la comunicación 3.0



Esta semana comienzo a dirigir un grupo de investigación en el marco del Centro Interdisciplinario de Hertzlía (IDC). Este grupo al que hemos denominado Maof, reúne a un grupo de investigadores en comunicación que trabajaremos desde 8 países diferentes, y tiene como eje de trabajo: La comunicación corporativa y política 2.0 en la transición a la Web 3.0.

Este grupo cuenta con el apoyo de la Fundación Offer, WIZO Canadá y del gobierno de la República Federal Alemana.

El Centro Interdisciplinario de Hertzlía, es una Universidad laica privada que desempeña un papel central en la vida política israelí. El IDC abrió sus puertas en 1994 y ha adquirido ya gran prestigio, ofrece carreras de B.A. y M.A. en sus seis facultades. Fundado por el Profesor Uriel Reichman, el IDC proporciona una educación interdisciplinaria, que combina estudio académico con entrenamiento práctico e inserción en las diferentes estructuras y estamentos de la vida política y social del país. El IDC se encuentra ubicado en el corazón del "Silicon Valley" Israelí y permite experimentar y aprender de la comunidad empresarial global en forma directa.

El abordaje multidisciplinario de las diferentes problemáticas, le ha dado al IDC un lugar preponderante en la escena política, académica y mediática global, que tiene su evento central a través del Instituto para la política y la estrategia (IPS), el cual organiza la “Conferencia de Hertzlía“cada año, donde asisten el Primer Ministro, miembros del gabinete, personalidades de la cultura, de la academia, de los medios, entre otros, logrando cada año una alta resonancia a nivel global por lo que se dice allí.

Para darles una idea de que es lo que podemos hacer, en el marco de la conformación de esta nueva unidad de investigación, déjenme darles un poco de info de background
En los últimos años escribí, publiqué, y relaté mis experiencias, observaciones y análisis sobre el impacto de la Tecnología en general y la Web social en particular, en la comunicación estratégica, tanto corporativa como política, en los medios, en el marketing, en los negocios, y en la cultura.

En los últimos cuatro años, me focalicé en la comunicación corporativa y política, definiendo estrategias comunicacionales y articulando puentes entre estrategia y operación. En estos cuatro años angosté mi foco, en estudiar, documentar y desarrollar nuevos modelos comunicacionales tanto para empresas como para organizaciones y personalidades políticas.
Mis primeros trabajos publicados, tuvieron que ver con estrategias para nuevos medios y modelos para definir marcos de acción y articular flujos de interacción entre empresas y medios, empresas y clientes, gobiernos y ciudadanos, políticos y medios.

Desde la consultoría me especialicé en:

a) Diseño de estrategias y tácticas evaluando objetivos centrales, fortalezas, debilidades, diferenciales y oportunidades
b) Construcción del discurso y relato
c) Campañas en la Web 2.0 articuladas con medios tradicionales
d) Trabajos con sistemas de segmentación
e) Construcción de marca 2.0, redefiniendo las variables que definen la marca
f) Posicionamiento
g) Advocacy, alegación frente a la evaluación social en la Web 2.0
h) Ingeniería de consensos en los nuevos medios
i) Definición de marcos lógicos para auditar, extraer conclusiones y poder definir nuevas estrategias
j) Capacitación e intercambio de experiencias con grupos decisores contribuyendo a acelerar procesos exitosos, a manejar situaciones de crisis, y a pensar cambios
Voy a continuar con mi trabajo de consultoría en mi empresa, Weinsteiner.net y junto a mi trabajo allí, voy a desarrollar las tareas de investigación en el marco de Maof, publicando anualmente un Paper para ser presentado en la conferencia anual del IDC.

Rubén Weinsteiner