Decenas de líderes mundiales se reúnen en Jerusalén para recordar el Holocausto y luchar contra el antisemitismo

En uno de los eventos más importantes en los últimos años en Israel, una cincuentena de dirigentes, entre ellos el rey Felipe VI, se ha reunido en Yad Vashem con motivo del V Foro Mundial del Holocausto y el 75 aniversario de la liberación de Auschwitz. El presidente ruso Vladimir Putin saluda a Carlos de Inglaterrra, al lado de Emmanuel Macron, durante la ceremonia en Jerusalén.


En su camino al Monte Herzl de Jerusalén que alberga el Museo Yad Vashem, decenas de jefes de Estado y de Gobierno dejaron a un lado y aunque fuera solo por unas horas sus respectivos problemas internos y las discrepancias entre ellos para lanzar un mensaje de unidad contra el antisemitismo, recordar a las víctimas de la maquinaria nazi y abrazar a los supervivientes.

En momentos de significativo resurgimiento de la judeofobia y otros extremismos en Europa y América, Israel ha sido el escenario del cónclave internacional convocado por el V Foro Mundial del Holocausto y el 75 aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau.

"No solo personas fueron quemadas en los crematorios de Auschwitz. La dignidad humana, la libertad, la solidaridad humana...todo esto fue llevado por el humo del crematorio", dijo el presidente israelí Reuven Rivlin abriendo el primer encuentro de estas dimensiones en Jerusalén en el que pidió un frente global unido ante "las fuerzas radicales que difunden el discurso del caos, destrucción, odio y miedo".

"La Alemania nazi intentó destruir al pueblo judío", lamentó Rivlin que avisó: "El antisemitismo no se detiene en los judíos. El antisemitismo y el racismo son una enfermedad maligna que destruye y desarticula sociedades y los países desde dentro y ninguna democracia es inmune. En nombre del pueblo judío y en nombre de Israel agradezco vuestra presencia, vuestra solidaridad con el pueblo judío y vuestro compromiso con el recuerdo de las víctimas del Holocausto".

Bajo el estremecedor silencio de las imágenes y nombres que documentan el exterminio de seis millones de judíos, entre ellos un millón y medio de niños, Yad Vashem ha congregado a casi 50 estadistas. Monarcas como Felipe VI de España, Guillermo de Holanda que aterrizó su avión en el aeropuerto de Tel Aviv, o Felipe de Bélgica; príncipes como Carlos de Gales, presidentes como Vladimir Putin (Rusia), Emmanuel Macron (Francia) Frank-Walter Steinmeier (Alemania), Sergio Mattarella (Italia), Marcelo Rebelo de Sousa (Portugal) o Alberto Fernández (Argentina) y líderes como el vicepresidente estadounidense Mike Pence o el presidente del Parlamento Europeo (David Sassoli) y del Consejo Europeo (Charles Michel).