El dólar sube y se fuga En los primeros 7 meses del año se fugó el doble que en igual lapso de 2017


La incertidumbre no es gratis: El dólar sube y se fuga En los primeros 7 meses del año se fugó el doble que en igual lapso de 2017. Es que la incertidumbre respecto a la situación económica del país transforma al dólar en principal activo de refugio mientras la devaluación se torna permanente... aunque la excusa sea esta vez la devaluación en Brasil.





Si bien los condicionantes externos complican al país, ya que reducen las posibilidades de financiamiento externo, no es sólo Brasil, o Turquía, o la guerra comercial entre Estados Unidos y China, lo que dificulta el panorama, sino que todo ello se da en un marco de importante falta de credibilidad en el actual rumbo económico.

El dólar se posiciona como el principal activo de refugio frente a expectativas de una permanente devaluación de la moneda.

Ayer el dólar superó los $30,80, y en algunos bancos incluso rozó los $31 en el segmento minorista.

En las casas de cambio y bancos, la divisa de USA promedió los $30,82 para la venta y $29,79 para la compra.

En lo que va de 2018 el aumento del tipo de cambio es de 62,9%, una tasa que triplica la inflación del período, mientras que en los 12 meses acumula un salto de 76,1%, de los $17,50 del 22 de agosto del año pasado.

Como explicó Lucas Gardiner, director de Portfolio Personal, a un sitio web, "el escenario mantiene, e incluso profundiza su inestabilidad. La combinación de un escenario propio claramente frágil con otro externo que suma frentes de tensión, lleva a resaltar las vulnerabilidades que presenta la Argentina".

En este marco, la fuga de capitales alcanzó en julio los US$3351 millones, según el Banco Central, acumulando en los primeros 7 meses del año US$20.028 millones, esto es, el doble que en igual lapso de 2017.

La fuga, que se computa como formación neta de activos externos del sector privado no financiero, estuvo compuesta por compra de billetes (2386 millones) y por transferencias de residentes (965 millones).

A esto se suman otros US$748 millones en servicios, en su mayoría "por los consumos de residentes por viajes, pasajes y otros pagos al exterior por el uso de tarjetas", advierte el organismo que conduce Luis Caputo.

Estos niveles de fuga extraordinarios explican la disparada del endeudamiento y la devaluación permanente, que el Gobierno no atina a cortar.

La cuenta capital y financiera cambiaria del sector privado no financiero registró egresos netos (salida) de US$4415 millones en julio.

Según el informe oficial, los principales factores que explican este resultado fueron la formación neta de activos externos del sector privado no financiero por 3351 millones, egresos netos por inversiones de no residentes por 914 millones y la salida neta por la operatoria de títulos valores de las entidades por unos 360 millones. Respecto del flujo por turismo, el informe puntualiza que la pérdida fue de 748 millones de dólares, lo que representó una caída de 19,8% contra los 896 millones de igual mes del año pasado y un aumento de 6,4% sobre los 703 millones de junio.

En términos brutos, las compras de billetes de residentes totalizaron US$3693 millones y fueron realizadas por unos 1.350.000 clientes, que implicó un aumento de 240.000 clientes respecto a lo observado en junio previo. Se trata de niveles entre los máximos históricos.

El diario 'Ambito Financiero' publica que "el mes pasado la compra bruta de billetes sumó u$s3.693 millones y fue realizada por 1.350.000 clientes, o sea, 240.000 más que en junio. Para las autoridades del BCRA esto se explicaría por el efecto aguinaldo".

En tanto, también se computaron caídas de los depósitos en dólares, que el organismo justifica en "repatriaciones de inversiones de no residentes por 440 millones de dólares, por formación de activos externos de (inversores) residentes por 328 millones y por egresos por operaciones en el (mercado) primario y secundario por 52 millones".

El Tesoro registró pagos por vencimientos de Letes por 1900 millones de dólares, a lo que se sumaron cancelaciones de capital e intereses a tenedores de otros títulos y a organismos internacionales por 1100 millones.

"Los cobros de tenedores locales constituyeron uno de las principales explicaciones de aumento de los depósitos privados en moneda extranjera por 900 millones de dólares", advierte el comunicado, lo que implica colocaciones de corto plazo hasta que los fondos se direccional a otra inversión.

La pérdida de divisas fue parcialmente compensada con US$2254 millones en ingreso de fondos por colocación de nueva deuda del Tesoro, detalló 'Página/12', y continuó: "En ese endeudamiento de julio, se destacó la ampliación de un título denominado en pesos por US$1583 millones y la colocación de Letes por 671 millones. El resultado fue que el stock de reservas del Central disminuyó en US$3885 millones hasta los 57.996 millones con los que concluyó julio".