Argentina cuestionó el reconocimiento de Trump de Jerusalén como capital de Israel



Argentina cuestionó las "medidas unilaterales" que modifiquen el régimen internacional especial de Jerusalén La Cancillería emitió un comunicado tras la decisión de Donald Trump

Donald Trump durante el anuncio



Tras la decisión de Donald Trump de reconocer a la ciudad de Jerusalén como capital de Israel, la Cancillería emitió un comunicado en el que ratificó la postura de la Argentina en torno al conflicto en Medio Oriente. Además, el Palacio San Martín destacó que la Argentina "lamenta medidas unilaterales que pudieran modificar" el régimen especial establecido por la Asamblea General de las Naciones Unidas.



En el comunicado, la Cancillería destacó que "el Gobierno argentino entiende oportuno recordar su posición en favor de una solución de dos Estados conviviendo pacíficamente, en forma respetuosa, reconociendo las fronteras de 1967 y el estatus especial de Jerusalén de acuerdo a sucesivas resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas".



"La Argentina reconoce el derecho del Estado de Israel a vivir en paz junto a sus vecinos, dentro de fronteras seguras e internacionalmente reconocidas, así como el derecho del pueblo palestino a constituir un Estado libre, independiente y viable en base a las fronteras de 1967 y de acuerdo a lo que las partes determinen en el proceso de negociaciones", agregó el comunicado.


En esa línea, el ministerio que conduce Jorge Faurie concluyó que "al igual que la mayor parte de la comunidad internacional, la Argentina apoya el régimen internacional especial de Jerusalén, conforme lo establece la Resolución 181 (1947) de la AGNU, así como el libre acceso, visita y tránsito sin restricción a los Lugares Santos para los fieles de las 3 religiones monoteístas (judaísmo, cristianismo e Islam), por lo que Argentina lamenta medidas unilaterales que pudieran modificar este estatuto especial".


El Canciller argentino, Jorge Faurie.



Este miércoles, Trump reconoció a Jerusalén como capital de Israel, una decisión histórica que revoca décadas de diplomacia estadounidense y amenaza con desencadenar una escalada de violencia en Medio Oriente. "Es hora de reconocer oficialmente a Jerusalén como la capital de Israel", declaró el líder estadounidense desde la Casa Blanca, considerando este paso como "condición necesaria para lograr la paz" y llamando a que la "calma y la "tolerancia" prevalezcan sobre el odio.



La declaración, que recibió una fuerte condena regional, pone fin a siete décadas de ambigüedad diplomática sobre el estatuto de una ciudad que alberga los lugares sagrados de las tres grandes religiones monoteístas.

Aunque el primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, dijo que era "una decisión valiente y justa", la medida tomada por Trump deja profundas dudas sobre el futuro del proceso de paz, ya tambaleante.

Trump también anunció el inicio del proceso de trasladar la embajada de Estados Unidos en Israel desde Tel Aviv a Jerusalén. Sus predecesores, desde Bill Clinton hasta George Bush, hicieron promesas electorales similares, pero las desecharon al asumir el cargo. "Muchos presidentes dijeron que harían algo y no hicieron nada", dijo Trump poco antes de su discurso.