Busti señaló en un comunicado que “el nuevo dueño de la máquina de humo y famoso vendedor de ese elemento, se llama Jaime Durán Barba, quien pretende instalar el relato de la Tercera Vía, de la nueva política, bla, bla y bla para de esa manera imponer a Mauricio Macri en la Presidencia de la Argentina en 2015”.
Curioso lo de Busti porque él mantuvo bastante diálogo con Macri (de hecho, Alfredo De Ángeli, senador nacional PRO-Entre Ríos, ganó su curul gracias a ese entendimiento), y porque Sergio Massa también busca instalarse desde la 3ra. Vía.
Massa no se instala desde el peronismo. De hecho, él creó el Frente Renovador porque rechazó competir dentro del Partido Justicialista, experiencia que considera imprecisa y superada por la realidad argentina contemporánea.
Massa recibe peronistas (como Jesús Cariglino, José Manuel De la Sota, Adolfo Rodríguez Saá, Juan Carlos Romero, Humberto Roggero o el propio Busti), radicales (desde los intendentes bonaerenses Mario Meoni, de Junin; y Carlos Oreste, de Coronel Pringles; hasta Roberto Lavagna, quien fue candidato presidencial radical, y las negociaciones con el senador nacional Gerardo Morales, de Jujuy), y de otras fuerzas (desde Adrián Pérez y Walter Martello a Gustavo Posse, intendente de San Isidro).
El problema de Macri en Entre Ríos es cómo construye la candidatura de Eduardo De Ángeli, con un PRO frágil, que pasó por una crisis intensa y deserciones hacia el Frente Renovador, y no ha conseguido prosperar en la construcción de esa 3ra. vía porque no aparecen los acuerdos con la UCR o con el PJ.
Macri confía por momentos en exceso acerca de su propia posibilidad de convocatoria a electores individuales, apartados de las estructuras partidarias que es cierto que ya no consiguen retener a nadie, hay zapping permanente, nadie lleva en tropilla a los ciudadanos... pero también se precisan fiscales de mesa, organización por localidades, militantes en la calle, etc.
