OFF THE RECORD por Iván Schargrodsky

“¿Es por los repo?”, le pregunté anoche por WhatsApp a uno de los empresarios más importantes del país. “No creo, los mercados no tomaron bien la nota de Alberto F en Clarín”, respondió. “¿La parte de la deuda?”, insistí. “Dijo que va a hablar con todos los acreedores, mal quote para los tenedores de equity y bonos; está todo muy en carne viva para no ser precisos con estas cosas”, concluyó el magnate. En Desafío 2019, Emmanuel Álvarez Agis quiso salir al rescate de la definición albertista: “Lo que se necesita es refinanciar la deuda, no reestructurarla”. Hoy vamos a bailar twist arriba de una sartén. Como le dijo el criminal albanés a Liam Neeson en la primera Taken: “Good luck”.

Hace exactamente una semana, pocas horas después de la entrega de este correo y en plena corrida, el Presidente Macri se puso en contacto con un amigo suyo del círculo rojo. ¿El motivo? No, pifiaste: no fue un pedido de asesoría para entender cómo enfrentar las volatilidades a las que está sujeta la Argentina por el programa financiero elegido por la Rosada sino una invitación a jugar al paddle y después presenciar el debut del italiano De Rossi en el partido de Boca contra Almagro. Si bien el ex Roma fue una de las figuras e incluso logró convertir, la situación era lo suficientemente delicada como para tomarse esas licencias aunque Macri nos tenga acostumbrados a este tipo de reacciones anómalas.

En otro recorrido están los funcionarios del ala optimista. Encabezados por Marcos Peña, tanto Guillermo Dietrich como Elisa Carrió y Alejandro Finocchiaro sostienen que hay chances de forzar un ballotage y aprovechar ese ímpetu para intentar retener la Presidencia. Dietrich tiene un estímulo extra para no perder poder: se la escuchó en una cena privada a Silvia Majdalani anticipar que el ciclista y Toto Caputo podrían ser los más comprometidos judicialmente ante una eventual pérdida de poder cambiemita.

Dentro de la coalición oficialista también conviven los realistas. Larreta y Vidal, que dan Nación y Provincia por perdidas, sostienen que hay que mejorar la performance de cara a octubre para mantener cierta representación institucional en territorio bonaerense y permitirle a la Gobernadora pararse como la principal dirigente opositora con la que debería dialogar Axel Kicillof. “Yo voy a seguir haciendo política en la Provincia”, se le escucha repetir a Vidal ante propios y extraños.

Una de las novedades de esta semana fue la confirmación de Rodolfo D’Onofrio de participar activamente en política a partir del 2021. El Presidente de River ha compartido durante estos últimos meses varias cenas con Emilio Monzó y Nicolás Massot que fueron cautivados por el mandamás riverplatense. Sin embargo, D’Onofrio también mantiene una muy buena relación con Alberto Fernández desde que era titular de la Asociación Argentina de Compañías de Seguros y el candidato a Presidente se desempeñaba como Superintendente de Seguros de la Nación. Ambos se tienen en muy alta estima y fue el propio Fernández que se acercó al palco en el estadio de Argentinos Juniors para saludar al titular del club de Núñez el día que le entregaron la camiseta del Bicho. En esa conversación se gestó un almuerzo que tendrá lugar esta semana o la otra a más tardar. A su vez, Monzó –que está pensando en un armado de neto corte bonaerense con figuras como el propio D’Onofrio– mantiene un contacto permanente con Alberto Fernández, como ya contamos en este espacio, y podría ser convocado a participar en un eventual gobierno peronista. Movida que cuenta, naturalmente, con el visto bueno de Cristina Kirchner.

Fernández tiene otro motivo para ilusionarse con ampliar la diferencia en octubre: hoy los intendentes justicialistas de Córdoba le van a pedir a Schiaretti dos cuestiones muy puntuales: unir las campañas locales con la candidatura presidencial del Frente de Todos y que el Gobernador manifieste públicamente su apoyo a la fórmula peronista.

Emisarios del Fondo Monetario Internacional le confirmaron a #OffTheRecord que, en principio, no vendrían esta semana al país y que, para cuando lo hagan, ya solicitaron un encuentro con Alberto Fernández. Si bien esto fue desmentido por el entorno del candidato a Presidente, no debería sorprender si el mitin se consuma dentro de los próximos 20 días.