Francia investiga a Apple

La firma de Cupertino suma polémicas en las últimas semanas

Apple investigada por justicia francesa

La justicia francesa abrió una investigación contra Apple por "estafa" y "obsolescencia programada", al mismo tiempo que dos inversores de la firma pidieron "mayor responsabilidad social" para "contener" la dependencia de los niños respecto de los iPhones.
La investigación abierta en Francia el pasado 5 de enero es conducida por la Fiscalía de París, según informó una fuente judicial citada hoy por los medios locales y sigue a una denuncia presentada la semana pasada por la Asociación Halte à l'obsolescence programmée (Hop). El coloso estadounidense reconoció en las últimas semanas ralentizar voluntariamente los viejos modelos de celulares inteligentes (smartphone).
En otro nuevo frente de polémicas, Jana Partners y CalSTRS, firmas inversionistas del gigante de Cupertino le pidieron a Apple que investigue en detalle cuál es el uso que los niños le dan a los productos de la manzana, preferentemente con la intervención de un comité de expertos.
Una carta abierta firmada por ambos inversionistas, poseedores de acciones de Apple con un valor multimillonario, sostuvo que la firma de Cupertino necesita dar más control a los padres para saber que sus hijos hacen un buen empleo de los productos.
"Hay cada vez más pruebas que demuestran como, al menos para los jóvenes que hacen un uso permanente, los smartphones pueden tener consecuencias negativas involuntarias", escribieron los inversionistas.
"El malestar social creciente en un cierto punto tendrá un impacto negativo también para Apple. Por esto es importante enfrentar pronto la cuestión", agregaron.
"Ninguna empresa puede externalizar esta responsabilidad.
Apple puede cumplir un rol determinante en prestar particular atención a la salud y el desarrollo de la próxima generación. Es una buena acción y también lo más justo por hacer", prosiguió la carta.
El iPhone es el dispositivo tecnológico más popular de todos los tiempos. Solamente en 2017 se vendieron 223 millones de ellos, una buena porción de las utilidades de la sociedad conducida por Tim Cook.
La carta de los dos inversionistas provocó algunos efectos en la Bolsa de Nueva York y analistas de la consultora Barclays estimaron que Apple arriesga vender cerca de 16 millones de iPhones menos de los previstos para 2018.