Monumento al Angel de la Independencia de México
La posibilidad de que el gobierno ruso interfiera en las elecciones de 2018 inunda cada vez más el ambiente público en México, a la luz de algunas evidencias difundidas sobre lo realizado en los comicios de Estados Unidos y en procesos similares en Europa.
En los medios políticos y periodísticos se comienza a hablar cada vez con más fuerza sobre un tema que hasta ahora había estado ausente en el debate nacional.
El diario digital estadounidense "thehill.com" citó en abril pasado al senador independiente Armando Ríos Piter, que renunció hace poco al centroizquierdista Partido de la Revolución Democrática (PRD), afirmando que la interferencia de Rusia en las elecciones mexicanas "no debe ser minimizado".
"Si intervino en los Estados Unidos, hay muchas razones para pensar que México es un objetivo para el ataque", dijo Ríos Piter, que actualmente busca reunir las firmas suficientes (casi un millón) para postularse a la presidencia.
El mismo periódico señaló que el propio gobierno del presidente Enrique Peña tiene "preocupación y temor" de que Rusia pueda manipular a los electores que se preparan para sufragar en las votaciones del 1 de julio del año próximo.
Hasta ahora, como el propio sitio digital lo acepta, no hay "pruebas contundentes" de esta intromisión, pero cuando surgieron evidencias de que lo hizo con las elecciones estadounidenses y en europeas, en México sonaron las alarmas.
El tema habría sido planteado por el canciller Luis Videgaray, durante una visita oficial a Moscú esta semana, para entrevistarse con diversos funcionarios, entre ellos su homólogo Sergei Lavrov, sugirieron algunos analistas.
El propio Lavrov aprovechó la ocasión para arremeter contra lo que llamó el "síndrome de Washington" y subrayar que, en contra de los rumores que se difunden desde Estados Unidos, "Rusia no tiene ninguna intención de interferir en las elecciones presidenciales del próximo año en México".
Videgaray, a su vez, señaló que "por nuestra parte no tenemos ninguna evidencia que valide la hipótesis".
La comisión de inteligencia del Senado inició una investigación sobre la injerencia de Rusia en las elecciones a favor de Trump, pero Rusia ha rechazado una y otra vez esta intervención a través del mismo presidente Vladimir Putin.
El analista político y crítico literario Fernando García Ramírez señaló sin embargo que en México "comienza a hacerse visible esa influencia para favorecer a Andrés López Obrador en 2018, en referencia al candidato del izquierdista Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) que lidera todas las encuestas.
Gary Kasparov, el famoso ex campeón mundial de ajedrez y ahora en las filas de la oposición a Putin, declaró hace poco al diario estadounidense The New Herald que no sabe si "México sea tan importante para la agenda política" de Rusia "pero si lo es por supuesto" intervendrá en las elecciones.
Entre otros comicios, hay informes de que Rusia interfirió en las votaciones del Brexit en Gran Bretaña, en el referéndum en Italia y en los comicios franceses.
García Ramírez dijo que es en el "terreno de la propaganda" donde Rusia podría "meter su cuchara" en las elecciones mexicanas a través del canal de televisión Rusia Today, que puede verse en México a través de televisión por cable.
Otro comentarista político, Jorge Fernández, afirmó que podría ser posible que los rusos intervengan en "la forma en que ya lo hicieron en Cataluña, Estados Unidos, Francia y Austria entre otros países". El columnista Juan Pablo de Leo señaló que la elección en México, por su cercanía geográfica con Estados Unidos, "sería un objetivo muy llamativo para los rusos" y sugirió a sus compatriotas "estar atentos de los correos electrónicos que nos pudieran llegar".
"No sólo hace falta tener un sistema antihackeo, sino concientizar a los votantes de no dar click a links de cuentas de correos que no resulten familiares, ni dar la clave de acceso a las cuentas de los correos propios, porque es entonces que ellos toman poder de la información", afirmó.
