El ex gobernador Raúl "Tato" Romero Feris podría ser encarcelado en la prisión de condenados de Corrientes si continúa negándose a firmar una alianza con el frente liderado por el actual mandatario, Ricardo Colombi, quien decidió aplicar un torniquete judicial para sumarlo como aliado.
En horas de la tarde de este martes 8 de agosto, un emisario del poderoso fiscal general César Sotelo llegó a la residencia Romero Feris para consumar la amenaza: "Si tu gente no firma con Ricardo se te termina la prisión domiciliaria y esta misma noche te llevamos a un calabozo".
Un allegado a la familia del ex gobernador, quien cumple arresto domiciliario como consecuencia de una condena por supuestos hechos de corrupción, confirmó que "el apriete es porque quieren los votos del Partido Nuevo para ganarle a (el candidato opositor) Camau Espínola".
Colombi está impedido de competir por su reelección y después de 16 años en el poder intenta levantar las acciones de su heredero, el candidato a gobernador Gustavo Valdés, para lo cual requirió la ayuda de su principal lugarteniente judicial, el fiscal Sotelo.
Enterado de que "Tato" Romero Feris había instruido a las autoridades de su Partido Nuevo para que apoyen la candidatura de Camau Espínola, Colombi decidió aplicar su herramienta coercitiva más eficaz: el martillo judicial que suele bajar en contra de sus enemigos cada vez que el aparato gubernamental detecta algún riesgo de derrota política.
La estrategia de Colombi se halla en sintonía con el embate lanzado por sectores judiciales afines a Cambiemos para impedir que el ex presidente Carlos Menem pueda postularse para la senaduría nacional por La Rioja.
Justamente, la figura de Romero Feris en Corrientes presenta un claro paralelismo con la trayectoria de Menem, ya que -como el ex presidente riojano- Tato pasó de ser un gobernador exitoso a convertirse en un sospechoso de graves delitos contra la administración pública.
En 2001 Raúl "Tato" Romero Feris fue condenado por tribunales especiales (designados en comisión por el ex interventor federal Ramón Mestre), pero su sentencia estuvo en suspenso hasta 2016, cuando Colombi hizo que lo encerraran luego de que el nuevismo se negara a votar una reforma constitucional con cláusula reeleccionista.
Desde entonces el ex gobernador se encuentra privado de su libertad en su casa, un beneficio que podría perder en las próximas horas si el torniquete judicial no logra quebrar su voluntad de no aportarle los votos del Partido Nuevo a ECO+Cambiemos.
