Productores de EE.UU. contra las importaciones de biodiésel argentino


Pidieron al Gobierno norteamericano que se investigue el ingreso del producto por presuntas prácticas desleales de comercio y solicitan además que se le aplique un arancel del 23%. Advierten que 50.000 empleos corren peligro.

La National Biodiesel Board, una agrupación de los productores norteamericanos de ese producto, solicitó al Gobierno de su país que investigue las importaciones del combustible desde Argentina e Indonesia. Sostienen que se violaron distintas leyes comerciales inundando el mercado con biodiésel subsidiado y con precios menores a los costos de producción.

Las importaciones desde Argentina e Indonesia a Estados Unidos aumentaron un 464% entre 2014 y 2016, lo que ha elevado su participación en el mercado a un 18%, por lo cual 50.000 empleos corren peligro detallaron desde la entidad.

En 2016, Argentina exportó 1,6 millón de toneladas de biodiésel, más del doble del volumen embarcado al exterior en el año previo. Cerca del 90% de los embarques del año pasado tuvieron como destino a Estados Unidos, este mercado representa ingresos anuales de alrededor de u$s1.100 millones.

El pedido concreto de los productores norteamericanos es que se aplica un arancel de alrededor del 23% al producto argentino pero por el momento no hubo una respuesta concreta por parte del Departamento de Comercio de los Estados Unidos.

Desde que Donald Trump asumió la presidencia, el mercado especula con un inminente cambio en la política en el negocio de los biocombustibles. Incluso, a comienzos de marzo hubo fuertes rumores de que el mandatario le daría prioridad al biodiésel local y aplicaría ciertas regulaciones a las importaciones. Finalmente ninguna de la especulaciones se hicieron efectivas, pero ahora se abre un nuevo capítulo en el que los productores norteamericanos están en pie de guerra contra el producto argentino.

Así es que una vez más el mercado de biodiésel local se vuelve a convulsionar, ya que es absolutamente dependiente de Estados Unidos mientras continúa a la espera de que se reabra el mercado de la Unión Europea.