Pymes: “Llevamos once meses de malaria y 2017 pinta peor”

“Llevamos once meses de malaria” advierten los empresarios PYME de todo el país, que empiezan a analizar los despidos como variable de ajuste de una economía que los castiga. El impacto para la economía sería devastador.



Los empresarios no prevén que la cosa vaya a mejorar en 2017: el Gobierno mantiene el mensaje de apertura económica y castiga al mercado interno, base de sustentación para las cerca de 80 mil empresas del país – 20 mil manufactureras, 25 mil comerciales y 35 mil de servicios. “Las empresas productoras de bienes son las que sufren con más fuerza la presión que ejerce el comercio internacional en el mercado interno”, advirtió en septiembre el informe interanual del Observatorio Pyme, consolidando esa visión.


A diferencia de las multinacionales y el gran empresariado nacional que comenzaron con los despidos ni bien asumió Mauricio Macri, las pequeñas y medianas empresas soportaron el peso de una economía que las castigó con devaluación, inflación y tarifazos sin apelar a los recortes laborales como variable de ajuste. Al límite, los pequeños comerciantes, industriales y prestadores de servicios estiman que en diciembre se cortará esa tendencia.

“Llevamos once meses de malaria”, afirman los empresarios que viene resistiendo el recorte de la planta laboral a pesar del escenario desfavorable. El análisis lleva directamente a una conclusión fatal: diciembre será el momento de pagar aguinaldos y empezar a dar vacaciones, y es considerado por el sector como la última oportunidad para revertir la tendencia.

¿Cómo y por qué no ajustaron antes? Hasta ahora, la implementación de los tarifazos se vio demorada por fallos judiciales que, en la última instancia, los desprotegieron. La única buena noticia del año fue la sanción de la llamada “Ley Pyme” que promovió el Frente Renovador para conseguir eximición de impuestos y acceso al crédito.

Los empresarios no prevén que la cosa vaya a mejorar en 2017: el Gobierno mantiene el mensaje de apertura económica y castiga al mercado interno, base de sustentación para las cerca de 80 mil empresas del país – 20 mil manufactureras, 25 mil comerciales y 35 mil de servicios. “Las empresas productoras de bienes son las que sufren con más fuerza la presión que ejerce el comercio internacional en el mercado interno”, advirtió en septiembre el informe interanual del Observatorio Pyme, consolidando esa visión.

Hay un componente sociocultural que colabora para mantener los puestos de trabajo: no es fácil para un pequeño o mediano empresario despedir a su gente. “Les vemos las caras todos los días. Entramos a las fábricas o a los comercios y sabemos lo que están pensando”, se sinceran.

“¿Qué pasa si en diciembre no levanta?”, se pregunta el pequeño empresariado con el calendario en la mano. La dirigencia política del país debería empezar a analizar ese interrogante a la luz de un dato crucial: las PYME generan el 70 por ciento del empleo privado del país.