Con una cena de camaradería el PJ buscó contener y ampliar los votos de las PASO

El PJ bonaerense junto a ganadores y perdedores. Aníbal Fernández fue la figura central, rodeado de los jefes partidarios. Este sábado es el cierre con Scioli y Zannini


Por: Sabrina Carrasco 

“El mejor ejemplo de que el PJ está más unido que nunca es esta reunión, por eso todos juntos detrás de nuestro querido Aníbal, mostrando que las primarias potenciaron al peronismo y al FpV” aseguró el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza.

Rodeado de más de 500 comensales, el jefe del peronismo bonaerense, y ex rival de Fernández, se mostró exultante con la convocatoria que movilizó a intendentes, legisladores y candidatos de toda la provincia, hacia Mar del Plata.

Desde la tarde comenzaron a poblar el loby del Hotel Provincial, ganadores, perdedores, postulantes camporistas, randazzistas reconvertidos en anibalistas, funcionarios sciolistas, entre otros.

Pasadas las 20 horas, llegaron al lugar, el candidato a la gobernación, Aníbal Fernández, cuyo ingreso fue acompañado por el jefe de gabinete de la provincia, Alberto Pérez, y el intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde.

A esa altura el convite mostraba rasgos de fiesta, que se coronó con la cena que se desarrollo en uno de los salones principales.

Organizado por Espinoza, y la dupla de la FAM, conformada por los intendentes, Julio Pereyra (Florencio Varela) y Alberto Descalzo (Ituzaingó), se dio la palabra a un representante por cada una de las secciones electorales.

“Te pido Aníbal que nos sumemos todos con vos, que sos el mejor candidato a la gobernación de la historia para llevar al triunfo a Daniel Scioli” afirmó un encendido Martín Insaurralde, que tomó la palabra en representación de la tercera sección. Fue luego que hablaran los intendentes, también ganadores de las PASO, Juan Pablo Anghileri de General Rodríguez, y Ricardo Casi de Colón.

“Si el peronismo provincial levanta 10 puntos en cada una de las secciones, Scioli será presidente” bramó el jefe de Lomas, ante la mirada de Fernández, que compartía mesa con Mariano West, el jefe comunal de Moreno que perdió la interna contra el camporista, Walter Festa.

Cerca de ellos, se encontraba el intendente de San Vicente, Daniel Di Sabbatino, también derrotado en su distrito, que de forma estoica, sostuvo las condolencias de varios de los oradores. El que prefirió esquivar esa situación, fue Raúl Othacehe, de Merlo, que salteó la cena, y dejó que su rival ganador, Gustavo Menendez, se mostrar en sociedad.

En las restantes secciones, hablaron José María Medina de General Arenales (cuarta); Néstor Alvarez de Guaminí (sexta); Juan Carlos Gasparini de Roque Pérez (séptima); y Pablo Bruera de La Plata (octava).

En representación de Scioli, habló Alberto Pérez, quien se encargó de pegarle al principal rival, el candidato presidencial de Cambiemos, Mauricio Macri. Y además, aprovechó para intentar rebatir el viejo mito, que indica que ningún gobernador bonaerense llega a la jefatura del Estado nacional “ese mito se va a terminar cuando Daniel llegue a la presidencia”, aseguró el funcionario sciolista.

Cuando ya había pasado el plato principal, de carne y guarnición de verduras y puré, y comenzaban a servirse los postres helados, le tocó el turno a Aníbal Fernández.

“Ahora, nosotros nos queremos parar arriba de lo que hizo Daniel, dejar todo sin romper nada, y comenzar a poner nuestros ladrillos” indicó Fernández, en alusión a la posibilidad de triunfo.

Y tildó de “salame” a su rival provincial de UNA, Felipe Solá, en relación a las cifras del delito que dio a conocer el ex gobernador. “Se quiso hacer el insolente, dando cifras de inseguridad, pero como yo soy más hijo de puta de lo que parezco, me fije en los datos de otros años y resulta que en el gobierno de Scioli sucedieron la cuarta parte de los delitos que en la gestión anterior” aseguró.

La necesidad de sumar votos en pos de ganar la presidencia, fue una de las arengas más fuertes de la noche. Con esa promesa, los dirigentes abandonaron el salón, no sin antes cantar la marcha peronista.

Este sábado, a partir de las 10 horas, se reordenarán en el Provincial, las mesas de trabajo, que abordarán la cuestión climática, la inclusión social, la justicia y la seguridad. Cerca del mediodía, se espera el cierre a cargo de la fórmula presidencial, de Daniel Scioli y Carlos Zannini.

Estarán además, el Secretario General de la Presidencia, Wado De Pedro, el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Julián Domínguez, y algunos dirigentes más que no participaron de la cena.

Aunque no se descarta que pueda viajar Martín Sabbatella, el candidato a vice de Fernández, no es una de las figuras más queridas por la cúpula del PJ.

“Acá el problema no fue Aníbal, fue el otro” indicó , uno de los históricos del peronismo. A su lado, varios de sus pares, miraron dando su asentimiento.



Organizado por uno de los perdedores de la virulenta interna bonaerense, la reunión de intendentes, legisladores y candidatos del peronismo provincial coincidieron en que “lo que pasó, pasó”. Por eso anoche, en la multitudinaria cena del PJ en el Hotel Provincial, se sentaron Fernando Espinoza junto a Aníbal Fernández.

En la mesa principal también le dieron protagonismo a Mariano West. El intendente de Moreno llegó acompañado de su presidente del concejo deliberante, José Luis Barreiro. Y también está en Mar del Plata, el ganador de la interna del FpV moronense, Walter Festa.

Tras ser armador de Massa en Merlo, a ser la punta de lanza del ultrakirchnerismo merlense, otro ganador de la interna como Gustavo Menéndez también llegó a Mar del Plata. Se espera que en el acto de cierre se haga presente, Raúl Othacehé.

“Vinimos a acompañar. La interna fue muy violenta, quedaron muchos heridos. Pasaron muchas cosas en la campaña, pero no nos vamos a ir a ningún lugar” le dijo a Letra P un intendente mientras “cafeteaba” en el bar del Provincial y todavía golpeado aseguró que “evidentemente fue una decisión de la superestructura”, que a varios intendentes le pongan internas.

El mismo jefe comunal perdedor aseguró que “hay que trabajar para que Aníbal gane en la Provincia y Scioli sea presidente”, dijo el intendente de la Primera Sección electoral.

El intendente de Mar Chiquita, Pitingo Paredi, en tanto, recordó a Julián Domínguez y que el chacabuquense “perdió”. Domínguez llegará para el acto del cierre.

Todos unidos es el slogan. Siempre en pos de trabajar por la candidatura de Daniel Scioli y la victoria del FpV. Pero no sólo hay lugar para perdedores, también lo hay para aquellos que los cierres de lista le dieron un golpe de gracia: hay legisladores provinciales que vencen su mandato en diciembre y se quedarán sin nada. También hay buena presencia randazzista.