El secretario de Seguridad criticó las diversas lecturas que hacen los magistrados al analizar las normas. Aseguró que "hay mayor violencia, pero no más delito". Y remarcó que Argentina es uno de los países más seguros de la región
Sergio Berni se refirió a la lucha contra la inseguridad y no
dudó en señalar las falencias del Poder Judicial en la interpretación de
las leyes, e incluso sugirió que tal vez "sería mejor" poner "maquinitas expendedoras" en el lugar de los magistrados, aunque rápidamente aclaró que la idea es que las normas sean analizadas por jueces.
En declaraciones al canal A24, Berni explicó que "el pilar fundamental para la lucha contra el delito es la Justicia", pero lamentó que sus representantes hagan análisis muy diferentes de las mismas reglas. "No tenemos un problema de leyes sino de interpretación".
El secretario de Seguridad consideró que en el Poder Judicial "cada uno interpreta lo que le parece, algunos los que les conviene y a otros ni siquiera les interesa" hacer una lectura. Para reforzar su postura, apuntó: "La ley dice que el que corta una ruta comete un delito, pero hay jueces que consideran que si hay caminos alternativos (a la vía que fue interrumpida) no es un corte...".
En
ese contexto, tras ser consultado sobre el grado de responsabilidad de
la dirigencia política por no solucionar ese problema, Berni dio una
respuesta irónica, pero a la vez realizó una apreciación resonante: "Si
no sacamos los jueces y ponemos robots o maquinitas expendedoras...
creo que sería mejor, pero ese es el sentido de que haya jueces, que
puedan interpretar las cosas".
Sobre los niveles de inseguridad, el funcionario kirchnerista aseguró que "en el país tenemos una disminución permanente y constante de los índices de criminalidad". Y aclaró que "hay mas violencia, pero no hay más delito".
Luego
de explicar que la inseguridad se mide a través de la cantidad de
asesinatos por habitante, el secretario de Seguridad recordó: "El
informe de la ONU determinó que Argentina es, junto a Uruguay y Cuba,
uno de los tres países más seguros de Latinoamérica, con una tasa de
homicidios que no llega a los 6 puntos".
"Los
hechos (de inseguridad) existen, pero no es la misma cantidad de
delitos que en 2001. Obvio que hay lugares focalizados como Rosario, por
eso hicimos una intervención muy fuerte", diferenció el funcionario del
gobierno nacional, que reforzó su análisis con un dato fuerte: "En la
ciudad de Buenos Aires los índices de seguridad son mucho mejores
incluso que ciudades de los Estados Unidos".
