El único campo de batalla es la cabeza de la gente

Creamos  marcas políticas mediante la creación de visibilidad,  predisposición en la cabeza de la gente y la construcción de sentimientos  positivos hacia la marca.  Ese estar en la cabeza de la gente, lo que llamamos el posicionamiento marcario,  se gestiona instalando algo así como un chip que a través de un bluetooth comunicacional, que en primer lugar, crea algo la intención de escuchar, ver, sentir, porque les da algún tipo de satisfacción. 

En segundo lugar, llega a audiencias masivas. En tercer lugar, crean activos distintivos que anclan la marca de manera única en la mente de las personas. 

Cuarto brinda al público formas de involucrarse activamente con la marca, hablar sobre ella, usarla emocionalmente, compartirla, discutir sobre ella y que se parte de su vida