La UIA descree del impacto real de una nueva ley pyme

Habría un anuncio oficial, pero su alcance será sólo para las que atraviesen la crisis


Malhumor en industriales




El Gobierno buscará en los próximos días enviar señales de distensión a los industriales para que los empresarios del sector enfrenten de "mejor ánimo" uno de los peores años fabriles, que incluye una recesión que llevará a trabajar con rentabilidad "nula", reducción de puestos de trabajo y nuevos cierres de portones. En la reunión del Comité Ejecutivo de la Unión Industrial Argentina ( UIA) que se realizó ayer sobrevoló la posibilidad de que el presidente Mauricio Macri anuncie el envío de una nueva ley pyme para que el Congreso trate en el año electoral.

Los industriales manejan información sobre la iniciativa que se elabora en los despachos del Ministerio de Producción y Trabajo, y si bien se trata de un proyecto que generará beneficios para las pymes, "nada de lo que surja tendrá efecto real en un año en donde la producción tiende a ser una de los peores", afirmó uno de los participantes del cónclave de ayer.

Para varios de los integrantes de la cúpula industrial, el anuncio será "para la tribuna porque los problemas están en otra cancha". "Es claro que todos los beneficios para generar producción y trabajo serán aplaudidos porque es necesario hablar desde una matriz de país industrial, pero no podemos perder de vista que el gran problema que tenemos en la actualidad es la caída del mercado internos y la falta de competitividad de las exportaciones", dijo otro de los líderes fabriles.

Los empresarios del sector señalaron que los beneficios de la ley pyme que se sancionó en 2016 generaron "cierto alivio fiscal pero sólo para una parte del universo de las pequeñas y medianas industrias". Por este motivo, una nueva legislación de mayor alcance será recibida "muy bien" para las inversiones futuras. Sin embargo, el mediano plazo "ya es una utopía para algunos sectores", señalaron las fuentes consultadas.

Lo cierto es que los dueños de las fábricas locales siguen con atención la actividad del sector a diario. Por caso, las empresas del calzado se encuentran en un punto de quiebre. Sucede que existe una parálisis ante el inicio de confección para la nueva temporada: mientras que algunas no tienen capacidad económica y financiera para los bienes de trabajo, otras no tienen estructura de ventas o directamente no tienen pedidos registrados.

Lo cierto es que en la UIA se instaló un "malhumor constante" que hizo "natural" la catarsis de temas, al punto que en algunos casos dejaron de ser agenda para ser "parte de lo sabido". Ya a fin del 2018 se había instalado la realidad de que todos los rubros habían caído en desgracia. "Los distintos sectores, tanto chicos, medianos como grandes, atraviesan la misma problemática", sentenció otro integrante de la mesa chica de la casa industrial.

Ayer, en Comité Ejecutivo, se escuchó el reporte que dio el director ejecutivo Diego Coatz sobre el viaje de negocios a India y Vietnam, en donde acompañó a Macri, junto a dirigentes industriales de la entidad. Algunas fuentes dejaron entrever que allí hubo algunos adelantos sobre el proyecto de ley que integrará la agenda legislativa de este año.