El café conquista a los millennials

La bebida caliente favorita de los argentinos se vuelca a la generación sub 30 de la mano de nuevas preparaciones más suaves, servicios personalizados y baristas profesionales


 
por Jimena Golender



El modelo cold brew, más suave al paladar, es el preferido de los más jóvenes


Es el compañero ideal para empezar el día, favorito de las sobremesas e invitado estrella de las reuniones entre amigos. Durante los últimos años creció su demanda a nivel mundial y local, sumó al público joven entre sus seguidores e impulsó la figura del barista profesional. Esta bebida aromática de origen natural ya se posiciona en el tercer puesto de las más consumidas en el mundo, luego del agua y las gaseosas. Y, aunque algunos prefieren la vía rápida (café instantáneo o al paso), otros eligen las cafeterías de especialidad que ofrecen calidad, diferentes sabores y presentaciones.

Acorde a los cambios en las tendencias de consumo post globalización, el público de hoy exige más información del producto que elige: quiere saber el origen del café, dónde y cómo se cultiva, quién lo produce y si se respeta el medio natural. Que los productos sean sostenibles se convirtió en uno de los factores fundamentales para conquistar potenciales clientes. El avance en el desarrollo de máquinas cafeteras hogareñas y el acceso a la información hacen que los consumidores se vayan convirtiendo en especialistas en la materia.

Gracias a cursos y catas entienden de preparaciones, niveles de tostado, variedad de granos, combinaciones y accesorios específicos como molinillos. En la principal cadena de cafeterías en el mundo se sumaron a la tendencia sostenible y desarrollaron recipientes reciclables: “desde Starbucks ofrecemos una experiencia única y personalizada con el foco puesto en la innovación, hoy estamos lanzando el nuevo “Reusable Mug”, un vaso reutilizable y reciclable, como parte de nuestras iniciativas relacionadas al cuidado del medioambientes”, destaca Máximo Pellegrino, gerente de marketing de Starbucks Argentina. Estudios recientes sobre el gusto sensorial y la apreciación olfativa demostraron que el ambiente (lugar, música, temática y atención) influye directamente en el sabor, la relación entre las papilas gustativas y el consciente es muy estrecha. El consumidor percibe al café no sólo como una bebida sino como una experiencia para los sentidos. Para los comercios ya no alcanza con ofrecer un buen producto, la ambientación, el trato, la iluminación, la comodidad de las sillas y la experiencia del vendedor son factores que influyen en la decisión de compra y satisfacción del cliente.

Millennials

El grupo de consumidores entre los 13 y 16 años (la llamada generación Y), y los millennials son el mayor grupo de consumidores de café en Estados Unidos y ya representan el 44%. Esto impacta directamente en las formas, presentaciones y ocasiones de consumo, como por ejemplo la tendencia hacia bebidas más dulces y cremosas, sin tanta cafeína como el clásico y tradicional café negro. Los novatos eligen los frappés y bebidas frías para luego descubrir los sabores más intensos y originales que el café puede brindar. La última moda es el Cold Brew, un método que reduce la acidez y brinda un producto más suave al paladar y mucho más fácil de preparar. Lucila Cabello de Café Martínez afi rma que ésta ya es la variedad más consumida en las 175 tiendas de la empresa: “trabajamos con granos especiales de Colombia para crear preparaciones en frío que son más livianas para el público más joven, además ofrecemos la opción de comprar el producto para consumir en el hogar”. Las nuevas generaciones también demandan y valoran la presentación del producto, que luego será subido a las redes junto con opiniones y críticas que terminan atrayendo (o alejando) nuevos clientes. La última novedad viene desde Londres y se llama “selfieccino”, una mezcla de la típica sel- fi e y el famoso capuccino. El impulsor fue una cafetería de Oxford Street y el procedimiento es muy práctico, el cliente envía una foto por Whatsapp y una máquina la escanea e imprime en la espuma del café. En sólo 4 minutos y por módicos 8 euros ofrecen una taza lista para ser instagrameada. Otro servicio que no pierde protagonismo y crece es el “ready to go” (listo para llevar), que permite al consumidor tomar su café caliente en todos lados. Café Martínez llevó el concepto un paso más allá ofreciendo la posibilidad de encargar tu café por Mercado Libre y pasar a retirarlo por el local minutos después. Los ansiosos felices, por supuesto.

Baristas

De la mano del aumento del consumo surgió la fi gura del profesional especializado en café. Los baristas son responsables de la creación de bebidas nuevas y originales, mediante el uso de distintos y novedosos ingredientes, además son los creativos detrás de las presentaciones e imagen del producto. Su rol también consiste en comunicar al cliente sobre la preparación y origen de la bebida para así tomar una mejor decisión basada en información experta. Diego Lobos, uno de los profesionales más reconocidos en el país se refiere al fenómeno: “Estamos frente a un creciente surgimientos de nuevas cafeterías de especialidad, lo que produce una amplia demanda de baristas y multiplica la demanda de los profesionales en el sector, aún así, más cantidad no significa que sea mejor. Por eso aparecen cada vez más fuertes los institutos e instructores como pilar educativo para que ese aumento de baristas y cafeterías vaya acompañado de un mayor conocimiento en la profesión”. En cuanto a tendencias se refiere, Lobos augura un futuro donde la propuesta diferencial será la clave: “las cafeterías buscarán separarse unas de otras ofreciendo opciones como maridajes con pastelería, fusiones con coctelería y la apuesta al café filtrado, una bebida que permite mayor gama de preparación y apreciación”. Las calidades de la materia prima seguirán perfeccionándose, así como también los procesos productivos y formas de preparación. En estos aspectos, el futuro irá de la mano con el desarrollo tecnológico pero lo artesanal continuará siendo una pieza fundamental para mantener la tradición. Lo que sí está claro es que hay café para rato y para todos los gustos.