Alertan que crecimiento de base monetaria conspira contra la baja de la inflación






La base monetaria en la Argentina registra un crecimiento interanual del 27%, lo que genera una inyección de pesos que ejercerán presión sobre los precios en los próximos meses y supone mayores dificultades para el Gobierno en su misión de bajar la tasa de inflación, advirtió un informe privado.

La emisión de pesos por parte del Banco Central en concepto de operaciones con el sector público se ha expandido en los últimos dos años, detalló el Instituto Argentino de Análisis Fiscal (IARAF), en un trabajo que lleva la firma de los especialistas Nadin Argañaraz y Bruno Panighel.

El informe señaló que "en efecto, en 2016 se emitieron $ 311.519 millones y en lo que va de este año $ 370.426 millones", tomando en cuenta adelantos transitorios, transferencia de utilidades, compras de divisas y la variación de la cuenta del Tesoro Nacional en la autoridad monetaria.

En este contexto, el IARAF consideró que "para evitar que esta creciente emisión de pesos se traslade a los precios", el Banco Central (BCRA) absorbe los billetes con las letras de la entidad.

"En lo que va del año, el Central lleva esterilizados por esta vía unos $ 280.508 millones, lo que representa un aumento del 112% respecto a 2016 y más del 3.000% respecto a 2015. Esto permitió que pese a que las operaciones con el Tesoro fueron fuertemente expansivas, la base monetaria haya crecido solamente $ 80.290 millones en lo que va del año", indicó.

Agregó que "en 2016, la cantidad de pesos aumentó poco menos de $ 200.000 millones, pese a que el BCRA retiró de circulación $ 132.000 millones con las Lebac".

"Teniendo en cuenta que noviembre y diciembre pueden ser meses de expansión monetaria tanto por compra de dólares al Tesoro Nacional como por no renovación de Lebacs, es probable que el año 2017 finalice con un aumento de Base Monetaria cercano al 27% interanual", estimó el IARAF.

Esta situación "genera una inyección de pesos que en los próximos meses presionará sobre los precios. Dado un crecimiento de la actividad económica real interanual del 4% o 5%, va a ser difícil bajar la tasa de inflación mientras la base monetaria crezca a esa velocidad", indicó la entidad.

"Si la única herramienta para que baje es una esterilización aún mayor, mayor tendría que ser la tasa de interés y más alto el pasivo generado de Lebacs. Esto último también presionaría aún más sobre el déficit cuasifiscal", consideró el IARAF.

Por último, señaló que "la solución de fondo sigue siendo alcanzar lo antes posible el superávit fiscal primario. Para este objetivo primordial, entre otros aspectos, son clave las reformas que están en discusión en el Congreso de la Nación. Tanto su aprobación como su posterior cumplimiento".