La industria del azúcar ocultó sus efectos negativos para la salud durante 50 años

Un estudio publicado en la revista científica 'PLOS One' revela cómo la 'Sugar Research Foundation', financiada por las compañías azucareras, ocultó repetidamente evidencias científicas entre su producto y las enfermedades cardiovasculares y el cáncer.








La indusria del azúcar ocultó durante años los efectos perjudiciales del azúcar para la salud.


No le interesaba y simplemente lo ocultó. Un artículo publicado ahora en la revista científica PLOS One ha revelado que la industria del azúcar, a través de la Sugar Research Foundation (SFR), ocultó hace 50 años diversas evidencias sobre la relación entre el consumo de azúcar y el riesgo de enfermedades cardiovasculares y cáncer.

Este estudio bucea en distintos documentos y revela, por ejemplo, cómo en 1965 la SFR pagó de forma secreta un artículo en el New England Journal of Medicine para restar importancia a la relación entre el consumo de sacarosa y los niveles de lípidos en sangre y las enfermedades coronarias. La fundación también había financiado durante esos años un estudio en ratas que al ver que ligaba el consumo de azúcar con el cáncer de vejiga lo paró de forma inmediata.



 
Años más tarde, entre 1967 y 1971, la SFR financió el estudio “Proyecto 259: carbohidratos y lípidos en la sangre en ratas libres de gérmenes”, que se desarrolló en la Universidad de Birmingham (Reino Unido). Sin embargo, cuando los resultados de la investigación comenzaron a apuntar a la relación entre el consumo elevado de azúcares y el riesgo de enfermedades cardiovasculares, la industria lo tapó y finalizó el trabajo sin publicar los resultados.

“Si (el Proyecto 259) realmente se hubiera completado y publicado, habría avanzado la discusión científica general sobre el vínculo de la enfermedad cardíaca con azúcar”, ha declarado al periódico The Verge el coautor del estudio Stanton Glantz, profesor de medicina de la Universidad de California (EEUU), “y evitaron que eso sucediera. Ayudó a desviar el problema durante bastante tiempo “.



Azúcar, un dulce 'veneno'

Además de este estudio conocido ahora, ya el año pasado la SFR publicó unos documentos internos de los años 60 en los que se desveló cómo la fundación pagó a investigadores de la Universidad de Harvard para ocultar la relación entre el azúcar y las enfermedades cardiovasculares y culpar en su lugar a las grasas. En dicho estudio, publicado en Journal of American Asociation (JAMA) los científicos sugerían que se debería “considerar dar menos peso a los estudios financiados por la industria alimentaria e incluir estudios mecánicos y en animales, así como estudios que evalúen el efecto de los azúcares añadidos en los biomarcadores de enfermedades coronarias múltiples y el desarrollo de la enfermedad”.


La investigación publicada ahora en PLOS One también critica que en enero del año pasado, la Asociación Americana de Azúcar publicó un comunicado en el que criticaba un estudio de la revista Cancer Research que relacionaba una dieta rica en azúcares con el crecimiento y metástasis de tumores respecto a una dieta sin azúcar. La Asociación afirmaba que los vínculos “no eran creíbles”.

En definitiva, lo que ahora se ve claramente como un conflicto de intereses – una fundación pagada por la industria para mostrar los efectos del azúcar – manejó durante décadas, a la luz de estos documentos, la información según sus intereses. Lejos quedan sin embargo de la actual situación, denominada incluso como “guerra al azúcar” de los últimos meses. Justo hoy el Ministerio de Sanidad daba a conocer que plantea un acuerdo con la industria para reducir el consumo de azúcar (también de sal y grasas) en un 10% hasta 2020.
Salud La contaminación, relacionada con un esperma de peor calidad La industria azucarera ocultó los efectos negativos de la sacarosa en la salud durante 50 años Azúcar Varios terrones de azúcar. (GTRES) Un trabajo de investigadores de la Universidad de California y publicado en la revista 'PLOS Biology' ha revisado documentos internos del sector. Han descubierto que la Sugar Research Foundation financió estudios con animales que canceló ante los indicios que relacionaban la sacarosa con el cáncer. Los autores de la investigación comparan estas prácticas "de manipulación" con las realizadas por la industria tabaquera. ECO Actividad social ¿Qué es esto? 97 % 22 +4 EFE. 22.11.2017 - 07:08h La industria del azúcar ha ocultado durante alrededor de 50 años estudios efectuados con animales que sugerían los efectos negativos que la sacarosa tiene en la salud, según una investigación desvelada este martes por la publicación especializada PLOS Biology. El trabajo desarrollado por investigadores de la Universidad de California en San Francisco revisó documentos internos del sector y descubrió que la Sugar Research Foundation (SRF, por sus siglas en inglés) había financiado estudios con animales para evaluar los efectos de la sacarosa que fueron cancelados ante los indicios que la relacionaban con el cáncer de vejiga. En documentos analizados previamente, el grupo de investigadores averiguó que la SRF había sufragado un artículo en 1967 que reducía la importancia de las pruebas que vinculaban el consumo del azúcar con las enfermedades de la arteria coronaria. Esa pieza, subvencionada por la industria, apostaba por los microbios intestinales para explicar por qué las ratas que consumían azúcar tenían niveles de colesterol superiores a las que tomaban almidón, pero rechazaba que fuese extrapolable a los humanos. La entonces SRF cambió su nombre a ISRF (International Sugar Research Foundation) en 1968, año en el que iniciaron un proyecto de estudio con ratas para comparar los efectos nutricionales del consumo de azúcar con los del almidón, según un comunicado publicado en la revista. El análisis sugiere que la industria sabía de la investigación sobre animales y que frenó la financiación para proteger sus interesesLa investigación, también financiada por ISRF, la desarrolló un equipo de la Universidad de Birmingham que señaló los efectos cardiovasculares adversos del azúcar, así como indicios de un incremento de los riesgos de cáncer de vejiga para concluir que el almidón y la sacarosa tienen efectos diferentes. ISRF reconoció que era una de las primeras demostraciones de que tenía consecuencias biológicas distintas en ratas, pero poco antes de que el estudio finalizase optó por cancelarlo y no publicar sus resultados, la misma metodología empleada en el caso que ahora se hace público. "Esto sugería que el azúcar podía tener un rol en el cáncer de vejiga", afirmó Cristin Kearns, uno de los autores del trabajo de la Universidad de California en San Francisco. En los años 60, recuerdan desde la publicación, los científicos se debatían entre si el azúcar podía elevar más el nivel de triglicéridos que el almidón, una discusión en la que los resultados del llamado Proyecto 259 habrían sido un argumento de refuerzo, según los autores. En el comunicado, también aseguraron que es una prueba de los primeros esfuerzos de SRF para minusvalorar el papel del azúcar en la enfermedad cardiovascular y de que el debate de los últimos 60 años puede estar basado en la manipulación de la ciencia por parte de la industria. El coautor del trabajo Stanton Glantz comparó las prácticas "de manipulación" de la industria azucarera con las realizadas por la tabaquera y afirmó que la investigación contribuye a documentar estos métodos en el sector. PLOS Biology menciona que el año pasado la Asociación del Azúcar criticó un estudio de ratones por vincular el consumo de sacarosa con el crecimiento de tumores y metástasis, indicando que no se ha establecido ningún "nexo creíble". "El análisis sugiere que la industria sabía de la investigación sobre animales y que frenó la financiación para proteger sus intereses comerciales hace 50 años", comenta en el escrito.