Sturzenegger reconoció que lo "sorprendió" el alza de la inflación de septiembre

El presidente del Banco Central presentó el Informe de Política Monetaria del tercer trimestre y celebró la desinflación.





El presidente del Banco Central, Federico Sturzenegger, presentó este miércoles el Informe de Política Monetaria (IPoM) del tercer trimestre en el que destacó que pese a que la inflación repuntó entre agosto y septiembre, al pasar del 1,4% al 1,9%, al mirar la tendencia este mes tuvo la inflación más baja desde mediados de 2015.

En una conferencia en el edificio de Reconquista, el banquero central reconoció que "El número de septiembre no fue el esperado" y que con la marca de agosto se sentía más cómodo para acercar las expectativas inflacionarias a las meta de 2018. Y adelantó que octubre se muestra "más interesante".



Particularmente, Sturzenegger se refirió a la dinámica de la inflación núcleo, ya que esta no está afectada por la suba de precios regulados -como los de las tarifas- ni los precios estacionales: "Me parece estupendo que la sociedad se preocupe si la núcleo sube de 1,4% a 1,6%, pero no olvidemos que en el trimestre fue la más baja" desde el comienzo de su gestión.



Como viene advirtiendo LPO, la inflación núcleo supo estar muy pocos meses de forma sostenida debajo del 1,7%. En septiembre cumplió por segunda vez dos meses seguidos sin volver a superar esa cota, pese a que se le volvió a acercar. Para esta altura del año, de acuerdo a los senderos compatibles con la meta de inflación, esta marca debería rondar el 1% mensual. Por eso los especialistas hablan de una nueva barrera en el 1,5% por mes.



Y aunque el presidente reconoció que el mes pasado la inflación repuntó y que los precios no están cediendo con la velocidad con la que quisiera, "el proceso en perspectiva de desinflación continúa".



"El 1,6 por ciento de inflación del último trimestre es preludio de otras bajas, pero aún es insuficiente respecto de los que estamos buscando", reconoció Struzenegger.



Sturzenegger señaló que superada la pauta de 17 por ciento para 2017, "ahora el objetivo es encauzar la inflación del último trimestre a un valor consistente con la meta de 10 más/menos 2 puntos para 2018", pero no hizo un nuevo mea culpa por haber quedado, de acuerdo a las expectativas, cinco puntos por encima de la meta oficial de este año.

La brecha (o "gap") para 2018 también persiste. Mientras la meta oficial para el año próximo tiene un techo del 12%, el último Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM) reveló que los privados estiman que será de 15,8% anual. Aun así, el presidente de la entidad sostuvo que "el objetivo de 2018 es perfectamente cumplible".



Para acercarse a la meta, Struzenegger adelantó que buscará que en el último trimestre una inflación del orden de 1,4% promedio que le permitirá encarar 2018 dentro de los parámetros deseados, aunque aclaró que no se trata de una meta mensual sino de uno de los posibles escenarios compatibles con el cumplimento del objetivo desinflacionario.



Puntualmente, Sturzenegger destacó que "hay consenso en el mercado que el proceso de desinflación se va a consolidar en los próximos meses, aunque tenemos un gap sobre el que tendremos que trabajar", añadió.



En una velada respuesta a los economistas que reclaman que Federico Sturzenegger refuerce el combate contra la inflación con una política centrada en los agregados monetarios y no en la tasa de interés, el presidente del Banco Central destacó que en lo que va del año, la base monetaria se expandió solo 4,6% la menor cifra desde al menos 2010, un número más cercano al crecimiento de la economía.



Así también destacó que su política de altas tasas de interés no afectó el crecimiento de la economía, a la vez que resaltó que entre las preocupaciones de los empresarios reunidos en el Coloquio de IDEA figura la inflación, pero no el tipo de cambio. Respecto del crecimiento aseguró que "Nuestros indicadores marcan un crecimiento de 0,95 por ciento del PBI en el tercer trimestres, pero Hacienda tiene mejores números aún".