Las importaciones aumentaron un 24 por ciento en mayo






La balanza comercial registró en mayo un déficit de 642 millones de dólares, que se explica por una suba del 24 por ciento de las importaciones y magro crecimiento de las exportaciones, que aumentaron sólo un 0,8 por ciento, según informó el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). En los primeros cinco meses del año, el saldo comercial muestra un rojo de 1863 millones de dólares, que contrasta contra el superávit de 515 millones registrado en 2016.


A pesar de que hoy mismo el jefe de Gabinete, Marcos Peña, insistió en que "Argentina ha empezado a crecer en parte por el motor del campo", de acuerdo con el informe del Indec, la menor exportación de cereales y derivados explica la caída general de las exportaciones, que mostró una leve variación de 0,8 por ciento, que resulta de una suba del 5,3 por ciento en los precios, mientras las cantidades cayeron un 4,2 por ciento.

Según un informe del Centro de Economía Política Argentina (CEPA), entre abril y mayo, dos meses de habitual liquidación de soja, ingresaron apenas 4344 millones de dólares, la cifra más baja de los últimos siete años. La práctica del sector agropecuario no es nueva y se repite cada vez que buscan una suba del precio de la moneda estadounidense mediante devaluación.

En el caso de las importaciones, la suba del 24 por ciento es producto de una suba del 8,2 por ciento en los precios y del 14,5 por ciento en las cantidades. Los incrementos se observaron en todos los rubros, pero con menor intensidad en aquellos vinculados a los bienes de consumo.

La suba más importante se observó en combustibles y lubricantes, cuyas compras aumentaron 67 por ciento, a 705 millones de dólares. El INDEC precisó que aumentaron las compras de gas oil (en 112 millones de dólares), gas natural licuado (en 64 millones) y aceite crudo de petróleo (en 47 millones).

Las importaciones de bienes de capital subieron 22,6 por ciento, mientras que los accesorios y bienes de capital aumentaron 22,9 por ciento. Las adquisiciones de bienes intermedios avanzaron 8,8 por ciento. La suba de importaciones en energía tiene su correlato en la fuerte caída de la producción petrolera, que en abril cayó un 13 por ciento, en el marco de un plan de ajuste de las empresas que operan en el país.