Industria, la perdedora del modelo

La actividad industrial retrocedió 4,7% en 2016 y por su matriz productiva Santa Fe sintió con fuerza el impacto de la apertura del mercado y la crisis.



por Rodrigo Miró





La actividad de la industria retrocedió en 2016 un 4,7% según datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec). En Santa Fe, a pesar del viento de proa de la maquinaria agrícola y el complejo oleaginoso, la tendencia también fue negativa. El Centro de Estudios de la Federación Industrial de Santa Fe (Fisfe), midió doce meses consecutivos de baja en la actividad fabril, información que luego confirmó el Ipec.

Dentro del enorme universo de empresas, hubo diferentes realidades según el rubro o la escala. Todas se vieron complicadas por los aumentos de costos y de tarifas, o la dificultad para exportar bienes industriales. Pero a la hora de enumerar problemas, las más afectadas fueron las que destinan su producción al mercado interno, ya que la baja del consumo pegó tan fuerte como la suba de importaciones, otro factor determinante en la crisis.

Para algunas pudo salir el sol, como las vinculadas a la producción agropecuaria y sus derivados. También las dedicadas a la generación energética y el complejo agroexportador. Aún así, en el balance esto no alcanzó para traccionar al resto de las actividades, que evidenciaron caídas.

La situación santafesina refleja lo que sucede con la industria del resto del país, en polos como La Rioja, Luján, Escobar, Avellaneda o Tierra del Fuego, donde hubo despidos y cierre de fábricas.

En Santa Fe, durante 2016 hubo un fuerte protagonismo de Fisfe en defensa de la industria. El lanzamiento del Observatorio de Importaciones junto al Ministerio de Producción de la provincia fue la punta de lanza. El gobierno nacional tomó nota y en las últimas semanas activó una estrategia, que consta de una parte visible y una especia de diplomacia secreta, destinada a "calmar los ánimos" de los empresarios santafesinos. En la pública, hubo dos visitas a Rosario del secretario de Industria de la Nación, Martín Etchegoyen _viejo conocido del sector por provenir de la UIA_ y del ministro de la Producción de la Nación, Francisco Cabrera. El primero recorrió plantas carroceras en Villa Gobernador Gálvez y les prometió más cuidado con las importaciones, aunque también los instó a hacer el esfuerzo de "invertir más". Cabrera, por su parte, se exhibió sonriente en algunas fábricas del grupo de las llamadas "competitivas". El ministro elaboró un listado de diez fábricas rosarinas con buen presente. No obstante, por fuera de ese listado hay numerosas industrias y sectores, con miles de trabajadores, que no pueden mostrar el mismo optimismo. El siguiente es un repaso de situación en la provincia.




Más procedimientos de crisis




Según datos oficiales, en 2016 hubo en Santa Fe 175 empresas que tramitaron un procedimiento preventivo de crisis (PPC), un 157% más que en 2015. "Esto nos permitió salvaguardar el empleo", indicó el ministro de Trabajo, Julio Genesini. Y agregó: "La industria es el 25% del empleo registrado en Santa Fe. Cayó porcentualmente un punto y medio, que fueron 1.574 puestos menos de trabajo registrado. Casi todo focalizado en Rosario y en el rubro metalúrgico. El 80% de los procedimientos de crisis fueron en el sur de la provincia", agregó. Por fuera de los registros oficiales, además, hubo retiros voluntarios y caída de trabajo en negro.

En la industria textil, por ejemplo, el Sindicato de Tintoreros y Lavaderos denunció que la empresa Sólido firmó en noviembre un acuerdo para la desvinculación de 50 de sus 130 empleados y que Laundry hizo lo mismo con 20 trabajadores. Esta semana, hubo un piquete en la puerta de esta última firma, en reclamo de aportes adeudados y pago de salarios.




Metalúrgicos




Los 170 trabajadores de Mefro Wheels, con apoyo del gobierno provincial, el Concejo Municipal y la UOM, trabajan por la reapertura de la fábrica, cerrada a comienzos de este año por sus dueños alemanes. Desde el Observatorio de Importaciones se informó que en lo que va de 2017, con la planta sin actividad, ya ingresaron al país 117.326 llantas de acero, similares a las que se podrían elaborar Mefro.

Antonio Donello, secretario general de UOM Rosario reveló que la crisis del sector llegó al punto tal que se firmaron convenios para disminuir cargas sociales con varias empresas de la región. "No podemos decir los nombres de las firmas. Lo hicimos con los empleados menores de 55 años, para que a los más grandes no se les achique la jubilación. La contraparte, fue que las fábricas no podían despedir. Hay tres mil trabajadores con ese paragüas que encontramos en un año claramente recesivo. Y 500 de ellos se hubieran ido a la calle", relató. Uno de los empresarios que rubricó el acuerdo con UOM explicó: "Cada uno pone lo suyo para poder salir adelante. Nosotros bajamos la rentabilidad a lo mínimo posible, desde el sindicato se hizo este aporte".

En General Motors, a pesar de haber tenido un buen año en ventas en el país, se siente la caída del mercado brasilero. Así, sin hacer demasiado ruido hacia afuera, la firma y el sindicato Smata acordaron unos 600 retiros voluntarios en 2016 y 350 suspensiones por nueve meses este año.




Heladeras




Rosario tiene tres de las fábricas más importantes del país: Bambi, Briket y Electrolux. Esta última _que antes era Gafa_ hoy es parte un grupo multinacional. En 2016, tuvo personal suspendido durante algunos meses, al igual que Bambi. En ambos casos, padecieron un año negativo, que combinó una merma en la capacidad de compra con un alto número de importaciones. De haber tenido más de un millón de ventas en 2015 a menos de 800 mil en 2016. Con un ingreso al país de heladeras del exterior que _según datos del Observatorio de Importaciones de Santa Fe_ fue de 130 mil, contra 29 mil del año anterior. Se pasó en doce meses de un mercado abastecido en el 97% con producción nacional, a un 15% de heladeras importadas.




Electrodomésticos chicos




Las ventas de estos productos cayeron un 15% durante 2016. En la región está la firma Liliana, tradicional marca que con créditos del Bicentenario tomados durante el gobierno de Cristina Fernández logró mudarse a un predio en Granadero Baigorria. Allí incorporó tecnología y matricería propia. Hoy emplea a 630 personas.

Mostró su preocupación por las importaciones el año último y acompañó las presentaciones del Observatorio. Estuvo muy activa a la hora de renovar normativa antidumping, vigente desde la gestión anterior. El titular de la firma, Leonardo Iacobsohn, señaló que ante la baja del poder adquisitivo de sus clientes, la menor venta de aires acondicionados hizo crecer las de ventiladores. El jueves 16, el ministro Cabrera, visitó la planta y anunció sin más precisiones "una futura inversión de 150 millones de pesos". Según fuentes sindicales, eso "está supeditado a la vigencia de la protección contra las importaciones". Liliana es otra de las firmas que tiene un convenio firmado con el gremio para la baja de aportes. Además, la propia firma importa algunos productos, que llegan desde China con marca propia. "Lo hace para balancear con el resto de sus producción y no tener que despedir, para que le den los costos. No podemos decir nada, no nos gusta, pero la política económica nacional no la deciden ellos", dijo Donello.




Calzado y herramientas.




Es de los sectores más damnificados por la apertura importadora y la baja del consumo en 2016. Cerraron 5 fábricas en la provincia, hubo despidos en muchos talleres. La firma Wyler's, de Alcorta, tenía 140 empleados pero hoy cuenta con 40 personas menos, por retiros voluntarios. También Grimoldi, la empresa más grande del país, tiene su planta en Arroyo Seco. Hasta hace un tiempo las elaboraba en la Argentina y con empresas que le trabajaban a fasón, hoy fabricando aunque también es una de los principales importadores. Tenía 350 empleados en diciembre de 2015. Diversas fuentes coinciden en que ya se desprendió de los obreros con más antigüedad y que la sangría continuará en los próximos meses.

En otro rubro afectado por la importación es el de herramientas. La marca española Mota estaría ingresando productos elaborados en China violando acuerdos antidumping con ese país. Esta última semana, el Boletín Oficial notificó la apertura de una investigación solicitada por la firma sueca SNA, que en el país es propietaria de la tradicional marca Bahco, con fábrica en Sauce Viejo.



Carroceros




Fue uno de los sectores que en estos días meneó el gobierno nacional a la hora de mostrar resultados. El mercado nacional de unidades de media y larga distancia es de unas mil unidades. Las únicas fábricas del país de este tipo de colectivos están en Rosario y Villa Gobernador Gálvez. En 2016, pese a haber acordado un mecanismo de palabra para que la importación no supere el 30% del mercado, se cubrió la mitad de las ventas con colectivos de Brasil.

Los reclamos de los fabricantes llegaron a Nación. "Nos prometieron que la importación bajaría y que ayudarían con medidas técnicas, a través del Inti, también con financiamiento", señalo Guillermo Rodríguez, de la firma Niccolo. En febrero entraron 17 colectivos y voceros del oficialismo dijeron que el problema ya estaba "controlado". Sin embargo, en los primeros quince días de marzo ya llegaron 45 micros.




Agroindustria, la mosca blanca del sector

El 2016 fue un año muy bueno para los fabricantes del sector de maquinaria agrícola. En Las Parejas, Las Rosas, Armstrong, Firmat y Fuentes, volvió a haber empleo industrial, de la mano de la recuperación económica de los productores. Igualmente, desde la Cafma, la cámara sectorial se pidió al gobierno nacional que controle las importaciones. "Debemos hacer diferencia entre la importación de un componente que no se produce en el país frente una máquina que sí se fabrica localmente", dijeron.