De Apple a Facebook, los grandes de la web desafían a Trump

Crece el frente del no a las restricciones migratorias
  Donald Trump está cada vez más solo. El frente del no a las restricciones contra los musulmanes crece hora a hora. En revuelta entraron las compañías de Silicon Valley, que decidieron desafiar al presidente ante la justicia, que deberá decidir si cancelar o no el rechazadísimo decreto. Un total de 97 empresas firmaron un documento durísimo contra la medida, desde Apple a Facebook, de Google a Twitter. Pero además entre los más firmes opositores al decreto hay dos exsecretarios de Estado como John Kerry y Madeleine Albright, o exjefes de la CIA y el Pentágono como Leon Panetta.
Y se suman cientos de investigadores y docentes universitarios, sin contar a las asociaciones para la defensa de los derechos civiles. Truenan también los jesuitas: "es un ataque a los valores cristianos".
Y hasta el titular de la Cámara de los Comunes del Reino Unido, John Bercow, reiteró su oposición a que Trump intervenga en el Parlamento durante su visita a Londres.
El New York Times trazó un panorama de una Casa Blanca donde aumenta la frustración ante el caótico inicio de la presidencia y donde se estaría evaluando seriamente un cambio de estrategia a raíz de la improvisación que reina hasta el momento.
El diario habla de un magnate furioso por no haber sido puesto plenamente al corriente de los contenidos y consecuencias de algunas de sus medidas que se aprestaba a firmar, incluido el del nombramiento de su estratega Steve Bannon en un puesto en el consejo de seguridad nacional.
Una reconstrucción rechazada firmemente por Trump, que vía Twitter acusó al periódico neoyorquino de falsedad: "escribe cosas no verdaderas sobre mi, inventan historias y fuentes", indicó.
Se trata de un nuevo enfrentamiento con la prensa, mientras todos los ojos apuntan a la Corte de apelación federal del noveno circuito, con sede en San Francisco, considerada la más liberal del país. Son sus jueces los que "congelaron" el decreto que rechaza la entrada al país de viajeros de siete países musulmanes, confirmando por ahora la decisión de la Corte distrital de Seattle. En las próximas horas es esperada su decisión final, que ambas partes podrán impugnar ante la Corte Suprema. Una Corte que -hasta que no sea confirmada la designación del nuevo juez elegido por Trump, Neil Gorsuch- está dividida en dos. El resultado? En caso de empate permanecerá en vigencia la sentencia de la Corte de apelaciones californiana.
Sobre la mesa de este tribunal está el documento firmado por todos las "grandes" compañías de la web, incluidas Microsoft, Intel, Uber, Airbnb, Snapchat...
Pusieron negro sobre blanco su firme oposición al llamado "muslim ban", definiéndolo "ilegal e inconstitucional".
Se trata, a su juicio, de un decreto que, si es confirmado, desencadenaría "un nuevo caos". Por ello expresan su máximo apoyo al esfuerzo de los estados de Washington y Minnesota, promotores de la causa contra la orden presidencial.
A ellos se suma un grupo de al menos 10 exrespsonsables de gobiernos estadounidenses. Para ellos el decreto de Trump "no puede se justificado en términos de seguridad nacional y política exterior".
En un documento presentado a los jueces, señalaron que el decreto "destruye miles de vidas, incluidas las de los refugiados y de titulares de visados que fueron sometidos a controles severos".
Entre los firmantes se encuentran, además de Kerry, Albright y Panetta, la exconsejera de seguridad nacional de la Casa Blanca, Susan Rice y el director de la CIA Michael Hayden. En tanto, en el curso de una llamada telefónica con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, Trump reiteró el firme compromiso de Estados Unidos, apuntalando la próxima cumbre de los líderes de la Alianza Atlántica prevista a fines de mayo. Pero hablando en Florida, poco después afirmó: "los aliados deben pagar lo justo".