Boris Johnson renuncia a suceder a Cameron y deja vía libre a Michael Gove


El ex alcalde de Londres Boris Johnson durante su discurso este jueves en Londres.


El ex alcalde de Londres y 'cabecilla' del Brexit Boris Johnson ha arrojado la toalla y ha anunciado que no se presentará a la sucesión de David Cameron como líder conservador y como primer ministro. Johnson, considerado como el favorito tras el referéndum, ha sorprendido a propios y extraños con su retirada, que se produce a las pocas horas de que el ministro de Justicia, Michael Gove, su ex 'socio' y cerebro de la campaña VoteLeave, decidiera presentarse como el gran 'tapado' en la guerra fratricida de los 'tories'.

Johnson, que llevaba dos días en paradero desconocido y forcejeando con Michael Gove, ha ofrecido su visión 'optimista' del Reino Unido y "las oportunidades que se abrirán cuando recuperemos la soberanía", para sorprender al final de su intervención anunciando que no se presentará como candidato.

Al final de su discurso, cuando todo el mundo esperaba el clásico remate triunfal a lo Boris, el ex alcalde de Londres, "a la vista de las circunstancias en el Parlamento" y en el momento de sopesar quién será el líder de la era post-Brexit, ha reconocido en un tono severo: "He llegado a la conclusión de que esa persona no puedo ser yo."

Johnson ha precisado que, en cualquier caso, su papel será de "posible apoyo a la próxima Administración conservadora para asegurar que el mandato del pueblo se llegue a cumplir". "Creo que este país puede ser mejor, más maravilloso y más grande de lo que ha sido hasta ahora", ha dicho en su lacónica línea de despedida.
Vía libre a Gove

Su renuncia deja la vía libre a Michael Gove, que ha recalcado que "Brexit significa Brexit", en un pulso inesperado con la secretaria de Interior, Theresa May, que respaldó la permanencia y ahora se presenta como candidata de la unidad tomando el guante de Gove y reiterando que "Brexit significa Brexit".

Previamente, el 'culebrón' del 'Brexit' ya había tomado un giro inesperado cuando el ministro de Justicia, Michael Gove, 'cerebro' de la campaña VoteLeave, traicionó a su 'socio' Boris Johnson, cuestionando su capacidad de liderazgo y le desafió con su propia candidatura como líder del Partido Conservador.

El anuncio de la candidatura sorpresa de Gove se producía a las pocas horas de la filtración de un correo electrónico de su mujer, Sarah Vine, cuestionando la capacidad de Boris para ser primer ministro y las reservas expresadas por el propio Murdoch a su candidatura.

"Los británicos han rechazado la política de toda la vida y quieren otra manera de llevar el país", dijo Gove en el momento de romper la baraja, anticipándose a sus dos rivales. "Tenemos grandes retos por delante, pero también grandes oportunidades. Podemos hacer un país más justo y más fuerte".

"He dicho en repetidas ocasiones que no quiero ser primer ministro", recalcó Gove. "Ésa ha sido siempre mi intención. Pero todo lo ocurrido desde el pasado jueves me ha hecho cambiar de opinión".

Reconocía Gove que su intención era formar equipo con Boris Johnson, pero que había llegado a la conclusión de que Boris "no puede facilitar el liderazgo que necesita el país o formar que el equipo que hacer falta para ese misión".

El ex secretario de Defensa Liam Fox ha decidido presentar también en la recta final su candidatura y ha defendido la ruptura total con la UE y la renuncia al mercado único. La secretaria de Estado de Energía, Andrea Leadsom, que se posicionó a favor de la salida de la Unión Europea, también ha presentado su candidatura. El último en liza, pero el primero en oficializar su candidatura, es Stephen Crabb, titular de Trabajo y Pensiones.