La Iglesia pide a empresarios ayuda para comedores populares ante falta de pago de la provincia

Varios obispos le señalaron a empresarios ligados a la industria alimentaria que la gobernadora Vidal hace 3 meses que no baja los fondos para los comerdores de Caritas.


La Conferencia Episcopal Argentina, a través de la Comisión de Pastoral Social, pero junto a otros espacios internos, decidió ponerse a la cabeza de las crecientes demandas que surgieron





La Conferencia Episcopal Argentina, a través de la Comisión de Pastoral Social, pero junto a otros espacios internos, decidió ponerse a la cabeza de las crecientes demandas que surgieron a partir de la caída del empleo: convocó a empresarios pymes y de grandes firmas a redoblar esfuerzos para contener una escalada de conflictividad en las calles, y advirtió que en sus comedores ya se siente un aumento de la demanda de alimentos, y Provincia no baja los fondos.
 La contracción de la actividad productiva, asociada a la caída del consumo y el efecto inflacionario de los costos, provocó una alerta en el empleo, que atraviesa por horas de tensión ante pedidos y exigencias para mantener el empleo privado. En este escenario, el clero comenzó una serie de reuniones con representantes del sector productivo y comercial para concientizar sobre la necesidad de mantener las fuentes de trabajo.
También buscó ampliar la base de ayuda social que realizan grandes empresas por la creciente demanda que notaron durante el último mes. Algunos prelados que integran la CEA prevén que la “delicada situación social” tendrá escala ascendente durante este año, y estiman que el pico se sentirá cuando se combinen los efectos de la recesión y el incremento de los costos energéticos. “Vamos a necesitar más ayuda de los empresarios”, fue el mensaje que le enviaron al sector privado. Con conocimiento del valor en el empleo con que cuentan las pymes, el obispo de Chascomús y secretario del Episcopado, monseñor Carlos Malfa, estrechó vínculos con integrantes de la Cgera.
En un encuentro que se realizó el martes de esta semana en la sede de la CEA, el prelado destacó la necesidad de “favorecer el diálogo y el encuentro entre los distintos sectores de la sociedad argentina”.
“Las pymes son las grandes generadoras de trabajo en todo el país”, destacó Malfa.
La principal preocupación de la Iglesia argentina, que cuenta con la atenta mirada del papa Francisco, es el deterioro del tejido social que se generó a partir de la pérdida de puestos de trabajo.
Cgera, presidida por Marcelo Fernández, se volverá a ver con Malfa, y reclamó un cuidado especial para las pymes. “Hay una mirada errónea de los economistas del Gobierno de responsabilizar a la industria por la inflación”, se lamentó el dirigente pyme, que reiteró un pedido para presentarle a la administración Macri propuestas para el sector.
Las pymes aclararon que las coincidencias con las grandes empresas en contra del encarecimiento de las indemnizaciones no persiguen el mismo objetivo: “Parece que las políticas económicas se deciden entre los reclamos de los popes empresarios y los popes sindicales. A las pymes no nos escuchan y somos las más perjudicadas y las que más empleo generamos”, se quejó el titular de la Cámara de Industrias Ópticas, Norberto Fermani.
Pero la Iglesia también busca refugio en las grandes. Un grupo de empresarios católicos visitó a firmas multinacionales en búsqueda de un aumento en la ayuda social, según confiaron fuentes del sector.
En ese contexto, las centrales obreras -en un histórico acto unificado- marcharon con la denuncia de “una enorme cantidad de despidos, tanto del sector público como privado”, según reza una solicitada publicada en todos los medios gráficos porteños, en donde invoca además “las banderas” del papa Francisco “tierra, techo y trabajo” como paraguas de contención.