A los 11.000 obreros de la construcción despedidos se suman viviendas, escuelas y rutas paralizadas

Obras de viviendas, escuelas y rutas se paralizó en los últimos tres meses en el Chaco, denunciaron ayer titulares de empresas constructoras locales y dirigentes de la Uocra. Aseguran que la paralización de los trabajos ya generó deudas por 1.200 millones de pesos.


Según Héctor Chaquires, presidente de la filial local de la Cámara Argentina de la Construcción, los constructores se reunieron a principios de la semana con el secretario general de la Gobernación, Horacio Rey. En ese encuentro se habría determinado el monto total de fondos nacionales que dejaron de ser girados a partir de octubre.


  

“La situación que atraviesa el sector es bastante conflictiva”, aseguró Chaquires. Detalló que ni las empresas constructoras ni la Uocra tienen certezas sobre el momento en que se reactivarán las obras que se paralizaron progresivamente desde el mes de octubre.


“Se han parado los pagos y esto genera un panorama de mucha incertidumbre en el plano laboral, tanto de los obreros de la Uocra como en las empresas constructoras”, señaló.


Chaquires aseguró que el sector que él encabeza pretende que el gobierno provincial, mientras gestiona los fondos nacionales retenidos, declare la “emergencia” en el sector de la construcción.


Como parte de la misma pretenden financiación y apoyo desde el sector provincial. Más precisamente del Nuevo Banco del Chaco y la Fiduciaria del Norte. Como también la eximición de otros gastos impositivos que “se cobran incluso a las obras paradas”.


“Sólo por certificados de viviendas de planes nacionales, existiría una deuda de 300 millones de pesos. También está parado Procrear, tanto en créditos individuales y desarrollos urbanísticos. Están detenidas la construcción de escuelas y obras viales”, aseguró.


“En total, habría un total de 1.200 millones de pesos de deuda por obras iniciadas, según las certificaciones generales que faltan remitir de Nación a Chaco”, contó Chaquires.


“La construcción es una cadena que abarca muchísimos rubros, desde el que kiosquero que vende pan o alimentos para la obra, hasta los corralones o los importadores de materiales específicos. Y con obras paralizadas se hace mucho daño a la economía en general”, dijo.


Según precisó, de 14.500 trabajadores de la construcción registrados en el Chaco, sólo unos 3.000 son ocupados por privados. “Y que el resto está desocupado”.


“Hablamos de empleados que en octubre estaban bancarizados, tenían obra social, tenían capacidad de ahorro para comprarse una moto o un plan de pago. Hoy eso se corta todo. Se genera un efecto muy nocivo para la economía”, estimó.


Y advirtió que incluso las consecuencias se dan en otro nivel: “Esto deriva en familias que no mandan a sus hijos a la escuela porque no tienen dinero con qué mandarlos, y ahí tenemos que hablar de más delincuencia, usurpaciones y otros elementos de marginalidad que ya conocemos”.


11.000 despidos en tres meses


Roberto Medina, uno de los máximos referentes de la Uocra a nivel local, explicó que tomando en cuenta a las tres instituciones que aglutinan empresas constructoras en Chaco (la Cámara Argentina de la Construcción, la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Constructoras y el Centro de Empresas Constructora), en los últimos tres meses hubo 11.000 despidos.


Hasta octubre había una cantidad de trabajadores que rondaba los 14.500. Desde ese momento, se generó un “punto de inflexión” y una curva descendente que llegando al final de enero marca sus picos más altos.


“De 14.500 en octubre, hoy entre las tres instituciones sólo hay 3.500 trabajadores ocupados. Es decir, 11.000 trabajadores están fuera del sector formal de la construcción”, señaló Medina.


Estos trabajadores desocupados, son sólo los formales o “conveniados” con las empresas constructoras, pero se cree que el número de desocupados aumentaría considerablemente si se incluyen a obreros de coperativas y los del sector informal.


“Si comparamos la situación actual con la que ocurrió en 2001, vemos que en aquel momento de 6.500 empleados registrados (que era la media del momento), sólo mantuvieron su trabajo 650. Es decir, un 10%. Actualmente, de 14.500 quedaron 3.000. Que es lo mismo que decir que ya estamos con menos del 20% de obreros ocupados, comparando con octubre”, afirmó.


“Es claro que no hay mucha diferencia entre lo que ocurrió en 2001 con lo que está ocurriendo en los últimos tres meses, entre noviembre y enero. La pendiente es muy pronunciada, la caída del trabajo es muy marcada y los niveles de desocupación son alarmantes”, sintetizó.


Finalmente, consideró que si “automáticamente” no se revierte esa tendencia, para llegar a abril o marzo con otra expectativa, “difícilmente en marzo podramos mejorar el esquema de generación de obras”.


Chaqueños que fueron al sur vuelven sin trabajo


Tiburcio Fernández, además de realizar un marcado reclamo al gobierno nacional por la paralización de obras, contó una situación que marca para “crisis nacional” en el sector de la construcción. Contó que trabajadores que se habían mudado al sur del país, más específicamente a trabajar en Austral Construcciones con el empresario santacruceño Lázaro Báez, debieron regresar al Chaco.


“Volvieron con su liquidación, con la obra social suspendida. Están cesanteados y vinieron a pedir trabajo. Son soldadores y obreros de mano calificada que fueron despedidos”, apuntó.

Esta situación para Fernández también podría derivar en medidas de reclamo a nivel nacional. “Nosotros, en la Uocra Chaco, no queremos ni hacer paro ni hacer piquetes, pero no sabemos qué va a pasar”, apuntó.