Para la UIA, en un "país normal" no habría paritarias


El ministro de Tabajo, Carlos Tomada, respondió: "No vayamos a políticas que bajo la consigna de terminar con la inflación, lo que crezca sea la pobreza la desocupación y el desempleo".



Provocador. El presidente de la UIA, Héctor Méndez, propuso que los ajustes salariales no superen el 20%.






El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Héctor Méndez, calentó ayer las negociaciones salariales al advertir que los empresarios "sacarán corriendo" a los gremios que reclamen aumentos superiores al 40 por ciento. El dirigente también consideró que "en un país normal, la paritaria no tendría sentido" porque no habría inflación. La respuesta fue inmediata. El ministro de Tabajo, Carlos Tomada, afirmó que las convenciones colectivas le dan "previsibilidad al funcionamiento de la economía" y alertó: "No vayamos a políticas que bajo la consigna de terminar con la inflación, signifiquen que todo lo que crezca sea la pobreza la desocupación y el desempleo".

Méndez elevó el tono de la corporación industrial al salir al cruce del reclamo de aumento que presentó el sindicato de la alimentación. En rigor, varios gremios están pidiendo recomposiciones porcentuales de ese nivel. Los aceiteros, por caso, piden un 42 por ciento.

El titular de la central fabril propuso, en cambio, que los ajustes salariales no superen el 20 por ciento. Admitió que cuando las industrias ofrezcan esos niveles de incrementos "seguro nos van a sacar corriendo, pero nosotros también los vamos a sacar corriendo a los que vengan con un planteo de aumento de 43 por ciento".

Además, aseguró que en el sector fabril "no hay atraso en los salarios" y que "tiene las horas de trabajo mejor pagas de la región".

"A nosotros nos toca bailar con la más fea por el nivel de inflación que hay en el país, acá la moneda se deteriora a toda velocidad y lógicamente las paritarias son siempre antipáticas", dijo.

Por ese motivo, consideró que "en un país normal, la paritaria dejaría de estar, es una política de Estado que fracasa, que nos complica a los empresarios y a los trabajadores, con una discusión que no debería existir si tuviéramos valores razonables" de inflación.

Réplica. El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, cruzó a Méndez. "Discutir paritarias no es discutir un porcentaje, es mucho más que eso", dijo, y añadió que "la experiencia de la Argentina es muy clara, o hay paritarias o hay aumentos por decretos dispuestos discrecionalmente por el Poder Ejecutivo".

El ministro de Interior y Transporte, Florencio Randazzo, sostuvo que "hablar de eliminar las paritarias es un claro gesto en contra de los trabajadores", y llamó a "estar muy atentos en este año electoral frente a este tipo de deseos".

El funcionario dijo que la idea de Méndez es "insólita" porque "quien tiene un buen salario cuenta con mayores posibilidades de consumir, por lo tanto plantear congelar ingresos atentaría primero contra la dignidad de los trabajadores, pero también contra la propia industria nacional y el mercado interno".

El diputado del Frente para la Victoria, Héctor Recalde, le pidió "prudencia" al empresario a la hora de opinar sobre el porcentaje que deberían tener los aumentos, que el industrial había fijado en torno al 20 por ciento.