Cristina mandó a sus ministros a levantar la campaña por la Ciudad de Mariano Recalde, candidato a jefe de gobierno porteño en la interna kirchnerista.
El presidente de Aerolíneas Argentinas no pierde oportunidad de aparecer en cuanto acto haya en territorio porteño, siempre acompañado de otros funcionarios del gobierno nacional, aunque su presencia poco y nada tenga que ver con lo que se esté anunciando en el momento.
Una de sus irrupciones fue durante un anuncio que encabezó el ministro de Economía Axel Kicillof por la red “Comprar”, junto al Secretario de Comercio Augusto Costa. Lo curioso fue en la misma mesa estaban sentados el ministro de Trabajo, Carlos Tomada-precandidato a legislador-, y el propio Recalde, pese a que era una iniciativa de mero corte económico que busca repuntar el consumo.
La Cámpora teme que sus candidatos pierdan con Aníbal Ibarra, quien, pese a la oposición de Máximo Kirchner, enfrentará a Cerruti y Recalde en la interna del Frente para la Victoria en la Ciudad con una lista propia de legisladores-que compartirá con Carlos Heller, otro candidato k-.
La preocupación de “La Orga” se debe a que los sondeos lo mostraban al presidente de Aerolíneas incluso por debajo de Juan Cabandie, otro camporista. De ahí la desesperación de Máximo Kirchner en armar las listas en soledad y dejar afuera al ex jefe de gobierno.
En la última semana, Recalde también se autopromocionó con anuncios que hizo junto a Kicillof relacionados a la compañía de la que es presidente.
Pero ayer volvió a darse otra muestra de que Cristina busca apuntalar la campaña del camporista. Recalde se mostró nuevamente junto a la presidenta y al ministro del Interior y Transporte Florencio Randazzo por la nueva tramitación del DNI en 24 horas. En el acto Recalde volvió a hablar, aunque tuviera para decir poco y nada sobre una medida sobre la que no tuvo injerencia.
Acaso la perlita de su intento por levantar la campaña fue en el Foro de Emancipación que se celebró hace dos semanas en el Teatro Cervantes. Allí hablaron el filósofo kirchnerista Ricardo Forster y analistas de talla internacional como Noam Chomsky. Otro que no perdió oportunidad fue Kicillof. Lo curioso fe que pese a que no figuraba entre los oradores del programa, Recalde se coló y dio un breve discurso, vestido con una chomba marrón, como para no desentonar con la vestimenta informal del titular del Palacio de Hacienda.
