Medios, competencia y profundización del sesgo


Por Rubén Weinsteiner

Los sesgos de los que se habla y que solemos analizar, se originan siempre en la “oferta” de noticias, en los medios que con más o menos poder de fuego, construyen la agenda y median en los humores sociales.
Resulta útil, a favor de un análisis serio,  estudiar los sesgos de la demanda, del consumidor de las noticias.

Mullainathan y Shleifer plantean de manera consistente, que los lectores estan interesados en escuchar noticias que se adapten a sus preferencias, a su ideología, a sus sistemas de creencias, y que confirmen su visión de las cosas.

Este interés con el que los lectores, televidentes y oyentes van al mercado de la información,  se conjuga con la línea editorial del medio, en el contrato de lectura.

 Cualquier ruptura del contrato de lectura implica el fin de la relación de determinado sub segmento con el medio.

Los medios simplemente proporcionan a los lectores,  noticias con el sesgo que estos quieren percibir.
Una peculiaridad interesante del modelo, es que, contrariamente a lo que se podría pensar , el aumento de la competencia no necesariamente disminuye los sesgos, sino que los puede aumentar, ya se que suena raro, pero es lo que pude verificar en el terreno.

Las razones que encontré son económicamente interesantes. Con una audiencia heterogénea, un medio de comunicación monopólico provee noticias para el consumidor medio, que probablemente tiene un sesgo mínimo. Sin embargo, dos medios que provean noticias al mismo segmento de población,  competirán duramente por esta audiencia, lo cual reducirá sus beneficios. Por ejemplo si apareciera una radio que quisiera robarle la audiencia a Feinmann o a González Oro,  deberá mostrarse mas enfocada en la inseguridad que ellos, pidiendo mas dureza por parte de las fuerzas de seguridad, y brindando un discurso mas radical que ellos.

Si Lanata consigue rating investigando presuntos hechos de corrupción  del gobierno nacional, nunca del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, y llevando imitadores de funcionarios del gobierno nacional, Majul intentará para captar al público de Lanata,  ser más duro con el gobierno,  que Lanata, ya que si lo iguala, no conseguirá robarle audiencia. La competencia entre Lanata y Majul, no aportará diversidad de ofertas, sino una competencia por quién profundiza más el sesgo para satisfacer a los públicos que adversan emocional y profundamente al gobierno.

Esta es la acción estratégica mas conveniente, es decir, profundizar lo máximo posible el sesgo, para quedarse con el segmento, transformando esto a los medios, en mas sesgados que los consumidores.

Con esto no estoy diciendo que hay que mantener los monopolios, lo que planteo es que no basta con desregular, me parece que la solución pasa por abrir el espectro de la oferta, mas allá de lo que la demanda pida, y así una vez en el mercado, los consumidores ante ofertas nuevas,  puedan romper contratos de lectura y cambiar, en lugar de exigir la profundización de los sesgos.

Rubén Weinsteiner