Blanco reemplazó a Guzmán en diciembre pero como sucedió en otros distritos – como Lomas de Zamora- el ahora diputado nacional del Frente Renovador no renunció a la intendencia sino que pidió licencia.
Lo curioso es que Blanco siempre se referenció en el Frente para la Victoria. De hecho, fue el armador de la lista de concejales del kirchnerismo que enfrentó al massismo en las últimas elecciones.
Aún así, en el comienzo de su gestión pareció tomar equidistancia de ambos sectores. “No es momento de política, sino de trabajar para los vecinos”, había dicho Blanco, palabras más palabras menos.
Algunos gestos del jefe comunal interino parecían dar la idea de que la relación con el massismo seguía intacta. De hecho, había invitado a Guzmán para la inauguración de patrulleros y hasta se había reunido con senadores del FR.
Pero, en las últimas semanas comenzó un distanciamiento del massismo y son varios los dirigentes cercanos a Sergio Massa que lo dan como fuera del espacio.
“Tuvo conversaciones con el kirchnerismo para asegurarse los fondos de las obras, no está con Sergio. Desde un primer momento jugó con La Cámpora”, sostienen algunos dirigentes del massismo.
Otros están confundidos por la actitud de Blanco y afirman que el intendente “está en el limbo”. “Hace poco le preguntaron si forma parte del grupo de intendentes massistas y respondió con evasivas”, señalaron las fuentes.
El dato concreto que manejan los massistas para confirmar el giro es que días atrás decidió reestructurar el Gabinete y cerró 3 secretarías que eran conducidas por funcionarios massistas. La versión que sostienen en el entorno del intendente es que los funcionarios en cuestión pasarán al Concejo Deliberante para “reforzar la gestión desde allí”.