Se nos viene encima un festival de
encuestas , una lluvia de porcentajes, se acerca octubre. Para poder
leer los datos en un contexto global y determinar cuanto contribuye cada
distrito sobre el total de votos nacionales es necesario hacer algunas
presiciones. Al respecto, las imágenes que abren este post (click sobre
ellas para verlas mejor) muestran desagregado por regiones el peso
electoral porcentual de cada distrito a nivel nacional, en otras
palabras, de cada 100 votos positivos nacionales cuántos aporta cada
uno.
La determinación del aporte de votos positivos de cara a las elecciones de octubre de 2007 , se realizó tomando en cuenta el promedio de los niveles históricos de voto negativo (anulado, impugnado y blanco) y la magnitud del ausentismo en cada distrito nacional, registrado en las elecciones realizadas desde la recuperación democrática para elegir fórmula presidencial. Los resultados son muy contundentes: El 48,7% del voto positivo nacional se concentra en tan sólo dos distritos: Capital Federal y Provincia de Buenos Aires Dicho de otra manera, de cada 100 votos positivos nacionales, 10,6 se generan en Capital y 38,1 en la Provincia de Buenos Aires, 8,8 en Córdoba y 9 en Santa Fé, en tanto en Formosa por caso, se genera 1,1 en Jujuy 1,3 y en San Juan surgen 1,7 .
En este sentido, debe considerarse que , por ejemplo, una diferencia electoral de 5 puntos en la Provincia de Buenos Aires del candidato A, sólo será compensada con una diferencia de 24 puntos en el NEA o 20 puntos en el NOA o al menos 9 puntos en la suma de Córdoba, Santa Fé y Entre Ríos del candidato B. Por este motivo, se afirma, abusando de una metáfora bélica de dudoso gusto , que la Provincia de Buenos Aires es madre de todas las batallas y el comportamiento de una fórmula en ese distrito estratégico define de manera concluyente su performance nacional.
Este distrito entonces, es hoy el vértice electoral del FPV y sobre él estarán puestos todos los recursos materiales y simbólicos de la campaña electoral de cara a las legislativas de octubre. Del mismo modo, cualquier fuerza que quiera ser una alternativa electoral realmente existente a nivel nacional debe ser competitiva en tierras bonaerenses sí o sí, todo lo demás es literatura fantástica, fotogenia, fuegos de artificio por lo que , por ejemplo, el PRO, hoy sin candidato bonaerense para las legislativas 2013, encuentra su límite estructural para la spresidenciales 2015.
En fin, sepamos que a la hora de analizar estudios de opinion y evaluar perspectivas electorales debemos observar que las asimetrías del voto positivo nacional, hacen que el peso del distrito bonaerense resulte abrumador y el comportamiento de la oferta electoral en esta región, decisivo.