Humala recargado

Humala tiene ahora un discurso más moderado y abarcador que en su primera experiencia electoral en el 2005, y su referente proclamado es Lula. Su triunfo es una buena noticia, en principio, para los gobiernos de Argentina y de Brasil, y un fastidio para el de los EE.UU., que tenía en Alan García a uno de sus aliados más firmes.
Otro elemento, quizá el más importante: Perú ha sido el ejemplo favorito de los organismos internacionales y de la prensa económica en estos años, casi tanto como lo fue Argentina en los ´90. El “viento de cola” de los altos precios de las materias primas, que sopla para todos, ha hecho que su experiencia no terminara en catástrofe, como la nuestra en el 2001. Pero está claro que el pueblo ha optado por el cambio. Que tenga suerte, porque la de ellos es también la nuestra...