Agregar valor

En el informe de la Cepal se menciona que la descomposición del valor en precio y en volumen de las exportaciones de la región durante la primera década de 2000 revela el gran empuje provocado por el alza de los precios, que favorecieron en gran medida a los productores de materias primas básicas. Tal es el caso de los petroleros y productores de minerales (Venezuela, Perú y Chile). Entre 2000 y 2008 la tasa media de crecimiento del precio de las exportaciones de estos países fue del 22 por ciento, en tanto que la del volumen fue únicamente del 6 por ciento. Los productos que tuvieron las mayores tasas de crecimiento en sus precios fueron el petróleo crudo, el cobre, el mineral de hierro, las semillas de soja, el gas natural y las carnes.

En Venezuela, por el alza del precio del petróleo crudo y sus derivados aumentó la participación del complejo petrolero en el valor exportado total de 83 a 93 por ciento en esos años. En Chile, únicamente tres productos (cobre en bruto, cobre procesado y oro no monetario) experimentaron alzas combinadas de precios cercanas al 26,6 por ciento, con un aumento moderado del volumen (4,6 por ciento). Esto derivó en el incremento del peso relativo de estos productos en las exportaciones totales de un 41 por ciento en 2000 a un 61 por ciento en 2008. En Perú, el precio de cuatro productos (legumbres frescas, cobre, derivados de petróleo y oro no monetario) se incrementó un 33 por ciento y hubo un crecimiento del volumen del 14 por ciento.

La región alcanzó una notable mejora de los términos de intercambio entre 2000 y 2008, de un 20 por ciento en promedio, aunque diferenciada entre regiones, se señala en el documento de la Cepal. Mientras los países andinos y Chile alcanzaron tasas medias de aumento de la relación de intercambio de poco más del 70 y el 60 por ciento, respectivamente, el Mercosur y México tuvieron aumentos menores y Centroamérica acusó un deterioro importante de los términos de intercambio del orden del 18 por ciento, sobre todo por la importante dependencia de los alimentos y los combustibles, de los que son importadores netos. Con la crisis de 2009, ese indicador se deterioró, para luego comenzar una sostenida recuperación en este año.

La investigación de la Cepal incorpora otra cuestión relevante para evaluar la primera década del nuevo siglo referida a si este ciclo favorable permitió modernizar la estructura productiva de los países de la región. El resultado global no es alentador. Las exportaciones de recursos naturales fueron las más dinámicas, especialmente en América del Sur. Este patrón de crecimiento favoreció el retorno del protagonismo de las materias primas en la estructura exportadora regional. Después de haber reducido su participación de niveles cercanos al 52 por ciento de las exportaciones totales a inicios de los años ochenta y de haber alcanzado una participación mínima (26,7 por ciento) a fines de los años noventa, aumentaron su peso relativo durante la década pasada, hasta llegar a casi el 40 por ciento del total en el último bienio (2008-2009). Este aumento del peso de las materias primas se ha producido a expensas de las exportaciones de manufacturas con contenido tecnológico medio, alto y bajo.

La conclusión del informe de la Cepal advierte que el balance preliminar del desempeño exportador en la década muestra que esos países no han conseguido avances significativos en la calidad de su inserción comercial internacional. Destaca que la expansión de los sectores asociados a los recursos naturales, impulsada principalmente por la demanda asiática, no ha contribuido suficientemente a la creación de nuevas capacidades tecnológicas en la región.