Krugman Nobel de Economía 2008

El comité del premio Nobel anunció hoy la concesión del galardón de Economía al economista estadounidense Paul Krugman por su "análisis de las tendencias del comercio y la ubicación de la actividad económica".

La Real Academia sueca de Ciencias reconoce con la concesión del premio, la labor de Krugman en la formulación de una nueva teoría para dar respuesta a las incognitas relacionadas con los efectos del libre comercio y la globalización.

Krugman, de 55 años, actualmente es profesor de Economía y Asuntos Internacionales en la Universidad de Princeton, en Estados Unidos.

El Nobel de Economía, oficialmente denominado Premio de Ciencias Económicas del Banco de Suecia en memoria de Alfred Nobel, fue establecido en 1960 y está dotado con una cuantía de 10 millones de coronas suecas (alrededor de un millón de euros).

Paul Robin Krugman (nacido 28 de febrero, 1953) es un economista, divulgador y periodista norteamericano, cercano a los planteamientos neokeynesianos. Actualmente profesor de Economía y Asuntos Internacionales en la Universidad de Princeton. Desde 2000 escribe una columna en el periódico New York Times.

Krugman es probablemente mejor conocido al público como crítico abierto de las políticas económicas y generales de la administración de George W. Bush, que ha presentado en su columna. Krugman también es visto como un autor de aportes importantes por su contraparte. Ha escrito más 200 artículos y 21 libros - alguno de ellos académicos, y otros de divulgación. Su Economía Internacional: La teoría y política es un libro de textos estándar en la economía internacional.
Ha sabido entender lo mucho que la economía tiene de política o, lo que es lo mismo, los intereses y las fuerzas que se mueven en el trasfondo de la disciplina; el mérito de Krugman radica en desenmascarar las falacias económicas que se esconden tras ciertos intereses. Se ha preocupado por replantear modelos matemáticos que resuelvan el problema de ¿dónde ocurre la actividad económica y por qué?. La filosofía económica de Krugman se puede describir lo mejor posible como neo-Keynesiana. Políticamente es considerado un liberal (término usado en Estados Unidos, para referirse a ciertas tesis de izquierda).
En 1991 la Asociación Económica Americana le concedió la prestigiosa medalla John Bates Clark Medal. Ganó el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales en el año 2004.
Nacido en la ciudad de Long Island, se licenció en Economía de la Universidad de Yale en 1974. Luego obtuvo su Ph.D. en Economía del MIT en 1977 y fue profesor de Yale, MIT y Stanford, antes de pertenecer al claustro de la Universidad de Princeton, donde ha estado desde el 2000.
De 1982 a 1983, fue parte del Consejo de Asesores Económicos (Council of Economic Advisers) de la administración de Reagan. Cuando Bill Clinton alcanzo la presidencia en 1992, se esperaba que se le diera un puesto en el gobierno, pero ese puesto se le otorgó a Laura Tyson. Esta circunstancia le perimitió dedicarse al periodismo para amplias audiencias, primero para Fortune y Slate, más tarde para The Harvard Business Review, Foreign Policy, The Economist, Harper's, y Washington Monthly.
Krugman trabajó en el panel de asesores de Enron durante 1999, antes de renunciar para trabajar como columnista para el New York Times, que exigía cierta exclusividad.

Desde enero de 2000, ha sido columnista quincenal en la página de Opinión del New York Times, lo que le ha convertido, en concepto del Washington Monthly, "el más importante columnista político en Estados Unidos... ha estado casi solo analizado los más importantes hechos políticos recientes, los descosidos tejidos de los intereses de las corporaciones, clases y partidos políticos, en medio de los cuales la administración de Bush sobresale.".
En Septiembre de 2003, Krugman publicó una colección de sus columnas titulada The Great Unraveling ("El Gran Desenredo"). Tomada en su totalidad, era un ataque mordaz contra las políticas económicas y exterior del gobierno de Bush. Su argumentación principal se centraba en cómo el creciente déficit fiscal, generado por la disminución de impuestos, el aumento del gasto público y la guerra en Iraq, a largo plazo es insostenible, y generará eventualmente una crisis económica importante. El libro fue un éxito inmediato.

A principios de los '90, popularizó el argumento de Laurence Lau y Alwyn Young de que la economías emergentes de Sudeste Asiático no eran el resultado de políticas económicas de un nuevo tipo, como se había argumentado, sino que las altas tasas de crecimiento se debían a elevadas tasas de inversión de capital y aumentos espectaculares en la mano de obra (algo que, tal como explica el propio Krugman, recuerda en parte al "milagro soviético" 1945-1965). De hecho la Productividad total de los factores de esos países no se incrementó, lo cual revela que tecnológicamente esas economías no han sido especialmente eficientes. En base a esos hechos, su predicción ha sido que el que la tasa de crecimiento del sudeste asiático descenderá a medida que sea más difícil generar crecimiento a base de incrementar los inputs (en inversión y trabajo). Esa situación es similar al frenado que sufrió la URSS a finales de la década de los '60, su estancamiento durante los '70 (que eventualmente degeneró en decrecimiento en los '80).

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