El aumento de los precios de los alimentos llega a Cuba

Aceite de soja, helados, pasta de tomate, detergente y leche en polvo son algunos de los artículos que registraron aumentos.

Cuba no escapa al aumento de los precios de los alimentos en los mercados mundiales, un fenómeno que la prensa oficial de la isla comenta insistentemente, y que hoy ya ha adquirido oficialidad al confirmarse la suba de algunos productos en las tiendas estatales que venden en divisas y de varios de los elementos básicos de la cartilla de racionamiento.

Aceite de soja, helados, pasta de tomate, detergente, leche en polvo y cerveza son algunos de los artículos que han registrado aumentos recientes en la red comercial que abastece a los extranjeros y a los cubanos que tienen monedas convertibles. Hay que recordar que en la isla circula un peso convertible, el CUC, equivalente a 1,08 dólares, y otro que vale 24 veces menos, con el que el Estado paga a los cubanos.

Ante este panorama, el periodista Ariel Terrero ha comentado hoy los aumentos en su espacio de la televisión estatal al señalar que "la economía cubana no está desconectada de la economía mundial".

Así, ha explicado que, por ejemplo, el aceite de soja ha duplicado su precio en el mercado mundial y se cotiza a casi 1.500 dólares por tonelada

Terrero ha explicado que en 2004 se produjo la última alza generalizada de precios en las tiendas en divisas, que desde entonces los mantenían "prácticamente congelados a pesar de que la tendencia en el mundo era diferente".

El alza de precios de productos básicos -algunos incluidos en la distribución subsidiada de la cartilla de racionamiento- tiene lugar en momentos en que el Gobierno califica la producción de alimentos "cuestión de seguridad nacional" por la escasez y los elevados precios en el mercado mundial.

De hecho, Cuba importa el 84% de los alimentos que consumen sus 11,2 millones de habitantes, mientras que la mayoría de las tierras cultivables están ociosas o sub-utilizadas.

En su toma de posesión como presidente, el pasado 24 de febrero, el general Raúl Castro anunció la convergencia de las dos monedas y la eliminación de subsidios excesivos.