El escenario y los actores, luego de la eliminación de Emad Mougnieh, el hombre sin rostro.

Por Rubén Weinsteiner para GERMANBORIS



El personaje

Si había un hombre que encarnaba y simbolizaba la totalidad de las ventajas comparativas que encumbraron al Hezbalá (Hezb =partido de Alá) en términos de explotación de asimetrías en los conflictos, ese era Emad Fares Mougnieh, a quién un alto jefe del Mossad me definió, como la intersección entre Irán y el movimiento Shiita del sur del Líbano.
Si algo faltaba para medir la dimensión operativa de este hombre, la magnitud de su funeral en el barrio Shiita de Dajia, en Beirut, la relevancia de los visitantes tanto de Irán como de Siria, la reacción de Nasrallah, pusieron en claro para todo el mundo lo que representó Mougnieh para el Hezbalá.


Mougnieh conjugaba la ideología Iraní con la materialización operativa de acciones contra los “enemigos de la revolución Islámica”.
Era de hecho el Comandante de operaciones, aquel que interpreta la voluntad política de la cúpula y la traduce en acciones en le terreno. Un rol mucho mas significativo en términos objetivos que el de Nasrallah, el líder del Hezbala, aunque este goza de mas exposición y cultiva un perfil mucho mas alto, la desaparición de Mougnieh resulta el golpe mas duro que pudo recibir el Hezbalá.
La comunidad de Inteligencia internacional sabía de la importancia de Mougnieh su pedido de detención a través de INTERPOL por parte del Fiscal Alberto Nisman de la Argentina es solo uno de los lugares conceptuales que conforman el prontuario de este mega terrorista, pero lo que apareció como novedad en estas horas que siguieron a su muerte tiene que ver con la importancia que entrañaba Mougnieh para las actividades terroristas palestinas en Judea y Samaria, donde Irán comenzó en los últimos años a hacer pie a través de Mougnieh.


Intenciones y capacidad

Uno de los errores que ha cometido la inteligencia de los EE.UU., es confundir intenciones con capacidad, luego de la guerra fría y liberados algunos documentos clasificados, se podía observar claramente que la URSS era mucho más hostil de lo que parecía pero mucho menos peligrosa también. Lo que descubrió la CIA luego de la caída de la URRS, fue que eran aun más malos de lo que parecían, pero menos poderosos también.
El análisis era: “son un peligro por que son malos”, y esto constituye un gran error, el análisis debe estar centrado no en las intenciones de un gobernante o de alguna organización, sea esta nacional o corporativa, sino en la capacidad para hacer algo.

Si vemos las primeras reacciones de Nasrallah prometiendo venganza, en la comunidad de inteligencia, no dudan de la voluntad del líder Shiita, rápidamente deberemos evaluar mas que sus intenciones su capacidad, para lo cual el Hezbalá se encontrará con dos problemas.

1) Le falta Mougnieh, aquel que le manejaba acciones como el atentado a la Amia, a la Embajada, el secuestro del avión TWA, el secuestro e ciudadanos Israelíes como Eljanan Tenembaum o de los soldados Israelíes Regev y Goldwaser. El profesionalismo de Mougnieh su manejo del terreno y su talento logístico no son fácilmente reemplazables. Nasrallah anuncíó que habñia nombrado a un reemplazante pero sin duda los planes que están en el nivel de ejecución deberán esperar.
2) Depende mucho de Irán, de su infraestructura de embajadas para instrumentar logísticamente un atentado, para el traslado de explosivos, el armado de conexiones locales, la cobertura a los movimientos de los organizadores y realizadores y la posterior evacuación de los mismos. La estructura iraní en sus embajdas sigue vigente pero no es lo que era en 1994 cuando el atentado contra la AMIA, la exposición, y el desgaste le quitaron margen de maniobra a los Iraníes, en lugares como la Triple frontera, donde los hermanos Barakat ( operadores Iraníes) debieron bajar el nivel de actividad por la importante presencia de agentes de los EE.UU en la región apoyados por la base militar de ese país en Paraguay. A pesar de esto los iraníes mantienen cabezas de puente claves en Isla Margarita Venezuela, Isla Alberti Paraguay, Barra de Quarein en el límite entre Brasil y Uruguay, entre otros lugares en Sudamérica.

De todas formas el Hezbalá buscará un golpe que acredite algún tipo de venganza por la muerte de su Jefe de operaciones. Las acciones podrían ser:

a) Recalentamiento de la frontera norte con intento de secuestro de soldados
b) Lanzamiento de cohetes Katiushas desde el territorio libanés hacia el norte Israelí
c) Intento de secuestro o asesinato de políticos Israleis que se encuentren viajando por el exterior, y que no cuente con custodia.
d) Ataques a Embajadas Israelíes
e) Ataque a edificios judíos
f) Secuesro de turistas Israelíes allí donde se concentranmochileros por ejemplo como Bangkok, Nepal donde la organización Jabbad organiza la festividd de Pesach para los mochiles, o Sudamérica.

Si bien como dijimos, la capacidad operativa se distancia de las intenciones, el Hezbalá con la ayuda de Irán se encuentra perfectamente capacitado para lanzar con mayor o menor éxito cualquiera de estas modalidades de ataques

En Israel saben que la venganza podría llegar a todo lugar y en cualquier momento, en especial cuando estén por terminar los 40 días de duelo, alrededor del 23 de marzo.
"Hezbalá tiene derecho a responder en cualquier parte del mundo y de la forma que considere correcta", dijo Ismail Sukeir, miembro del parlamento libanés por Hezbalá. El funcionario aseguró que la dirigencia de la organización se reunirá en Beirut para estudiar cuál será la respuesta a este ataque, y se percibe en los discursos la inclusión del término judío en cuanto la descripción de objetivos a atacar, es decir se habla de objetivos Israelíes y Judíos. De esta manera la dirigencia del Hezbalá intenta reeditar el escenario por lo menos en cuanto a la generación de expectativas y temores posteriores a la eliminación del anterior jefe de la Organización, Abas Musawi a manos de Israel, que generó primero una escalada en la frontera con Israel, luego el asesinato del oficial de seguridad de la Embajada Israelí en Ankara y luego un atentado muy lejos de escenario natural, nada menos que en Buenos Aires.
En Israel, la Comandancia de Lucha contra el Terrorismo difundió una advertencia a todos los ciudadanos israelíes que se encuentran en el exterior sobre la posibilidad de secuestros de israelíes y les recomendó abstenerse de estar en lugares donde haya concentración de ciudadanos israelíes. Según la Comandancia, ha aumentado el peligro de que algún ciudadano israelí sea secuestrado en el exterior, especialmente empresarios, y muy especialmente quienes tienen vinculación con empresas o empresarios árabes y musulmanes. Las autoridades solicitaron a los israelíes que se encuentran fuera del país que presten atención a situaciones extraordinarias o raras, que eviten permanecer en países árabes o musulmanes sobre los que ya se ha emitido alguna advertencia.

En Buenos Aires, el presidente de la AMIA, Luis Grynwald, nos decía que las autoridades de los centros judíos se encuentran "en estado de alerta" pero "no preocupadas" por la amenaza del líder del movimiento shiíta. "Hay que estar en estado de alerta, agudizar las prevenciones posibles para que no suceda nada, la palabra preocupación es demasiado", "lo que se ha hecho es reforzar muy discretamente las consignas que tiene la Policía Federal en las instituciones" y que incluye templos, clubes y escuelas, nos dijo Luis Grynwald.



El escenario del día después

En la lista de los buscados por el FBI, aparecía hasta su muerte Mougnieh, entre los primeros lugares, debajo de Osama Bin Laden, por su participación en el secuestro del avión de la TWA. Todas las acusaciones desde Irán hasta Siria pasando por Hezbalá, apuntan hacia Israel. El gobierno de Olmert Negó cualquier participación, Israel siempre ha negado haber tenido parte en estos hechos, por lo menos al principio. Motivos no le faltaban al Estado Judío para terminar con la vida de Emad Mougnieh.


En diversos lugares del Medio Oriente, el asesinato de Emad Mougnieh genera preocupación. Tanto en Damasco, en Beirut, en Gaza, como en Tel Aviv y Jerusalén. El presidente de Siria, Bashar Assad se esta preguntando por estos momentos qué pasa con sus servicios de seguridad, al mando de su cuñado Assaf Shawkat. Si no advirtieron que su huésped estaba bajo seguimiento de factores extranjeros, que le pudieron entrar a sus círculos de ocultamiento y seguridad, quizás también sus enemigos internos logren conspirar contra él.


Teherán tuvo en Mougnieh un General de primer nivel. Ahmedinejad contaba en el Líbano tres representantes principales: el embajador en Beirut, el comandante de cuerpo de las Guardias Revolucionarias con su cuartel general en la Bekaa y Emad Mougnieh, el supervisor para Irán de las actividades operativas de Hezballá. No había atentado de las Guardias Revolucionarias, el Ministerio de Inteligencia y Seguridad en Teherán y/o Hezballá, que no fuera producido en la cueva de Mougnieh.



La eliminación

El que ubicó y terminó con Mougnieh, reveló una capacidad de inteligencia y operatividad brillantes, del tipo que le faltó a Israel en el verano de 2006. La Comisión Winograd insinuó, en un brevísimo capítulo sobre los operativos especiales, que la espera en vano que uno de ellos tuviera éxito, influyó en la tardanza israelí en el frente.
Una fuente de la inteligencia militar Israelí AMAN, me dijo, -aunque esto suene mal desde un costado ético- que la comunidad de inteligencia israelí valoraba mucho a Mougnieh, por su profesionalismo y capacidad, y que si Mougnieh estuviera a un costado mirando su ejecución aplaudiría por la calidad operativa revelada. Sin duda un golpe quirúrgico, sin daños colaterales limpio y sin huellas, que son las que la comisión Sirio-Iraní intenta encontrar por estos días sin éxito, aunque anuncie algunas detenciones de palestinos residentes en Siria, para calmar los ánimos

Israel no logró, en la guerra del Líbano del 2006, dar con Nassrallah ni con Mougnieh, pero esta vez, alguien lo hizo. El mensaje es claro para los líderes de Hamás y de la Jihad Islámica en Gaza, para Khaled Mashal y Ramadán Shelah en Damasco, y también para Nassrallah, el brazo sigue siendo largo, si decide reanudar el fuego para abrir un segundo frente contra Israel, mientras éste está ocupado en Gaza.


El Mossad

Según fuentes de la comunidad de inteligencia internacional a las que tuvimos acceso y las que ha citado en forma pública el diario británico 'The Sunday Times' el Mossad, se encuentra detrás del asesinato del número 2 del grupo chií libanés Hezbolá y jefe militar de la organización, Imad Mughniyeh, fallecido el pasado martes a causa de una bomba instalada en uno de los reposacabezas de la camioneta Mitsubishi en la que viajaba pero que la explosión se produjo mientras Mougnieh bajaba del vehículo. Las mismas fuentes indican que el fallecido podría haber estado colaborando con Damasco para perpetrar un atentado terrorista en suelo israelí, en represalia por el ataque aéreo emprendido por aviones israelíes contra una presunta central nuclear siria, el año pasado.

Según informan estas fuentes, 'alguien reemplazó el reposacabezas del conductor' de la Mitsubishi de Mougnieh con otro que incorporaba una pequeña bomba, que al hacer explosión destrozó el coche y acabó con la vida del número dos de Hezbalá prácticamente en el acto.
El fallecido se había reunido minutos antes con el recién nombrado embajador iraní en Líbano, Hojatoleslam Ahmad Musavi.

El diario libanés Al Ajbar, próximo a Hezbalá, sugirió que habría complicidad de agentes de países árabes que abrían colaborado con el mossad en el atentado del pasado martes en Damasco, que acabó con la vida del líder militar de Hezbalá.
El diario, que cita "fuentes sirias bien informadas", señaló que se han hecho detenciones de sospechosos por su relación con el atentado, y entre ellos hay "elementos no civiles de nacionalidad árabe".



El director del Mossad, Meir Dagán, estuvo de duelo esta semana. No por Emad Mougnieh, por supuesto, sino por su madre, que falleció a edad avanzada la semana pasada. Dagán se levantó de la shivá (los primeros siete días de duelo) y ese día recibió la noticia de la noticia de la muerte prematura de Mougnieh, uno de los enemigos más jurados, sofisticados y creativos que conociera Israel en toda su existencia. Casualidad o no esta semana Ehud Olmert decidió prolongar la titularidad de Meir Dagan al frente del Mossad por un año mas, esto en reconocimiento a su desempeño.

Su mandato al frente del Mossad es considerado como muy exitoso, quizás más que exitoso, sin embargo no podemos entrar en detalles. Dagán hizo al Mossad "volver por sus fueros": los agentes dejaron la oficina y volvieron al terreno, la diplomacia volvió a los diplomáticos, la laptop a la gente de high-tech, y el Mossad volvió a ser una organización activa y con iniciativa.


Cuando fue nombrado para el cargo, hubo quien se quejó de que Dagán no era un hombre de inteligencia, sino un operativo. Es verdad, y al parecer, esto resultó bien. Junto a los fracasos, como la ceguera en todo lo tocante a la nuclearización de Libia y otros, se inscribieron numerosos éxitos, en especial en el área del terrorismo.


Dagán pensaba retirarse próximamente a su hogar lleno de gloria, sin embargo como dijimos lo han invitado a quedarse. Es una lástima que quien lo nombrara, luego de una gran indecisión, ya no pueda agradecerle. Ariel Sharón sigue postrado inconsciente en Tel Hashomer