El "embrujamiento" de nuestra inteligencia por el lenguaje


Wittgenstein sostiene que el significado de las palabras y el sentido de las proposiciones son su función, su uso [Gebrauch] en el lenguaje, vale decir, que preguntar por el significado de una palabra o por el sentido de una proposición equivale a preguntar cómo se usa.
Por otra parte, puesto que dichos usos son muchos y multiformes, el criterio para determinar el uso correcto de una palabra o de una proposición estará determinado por el contexto al cual pertenezca. Dicho contexto recibe el nombre de juego de lenguaje [Sprachspiel] .
Estos juegos de lenguaje no comparten una esencia común sino que mantienen un parecido de familia [Familienähnlichkeiten].
De esto se sigue que lo absurdo de una proposición radicará en usarla fuera del juego de lenguaje que le es propio.
Desde esta óptica, los llamados "problemas filosóficos" no son en realidad problemas, sino perplejidades. De ahí que la misión de la filosofía sea la de una lucha contra el "embrujamiento" de nuestra inteligencia por el lenguaje